Un Tropiezo Con El Amor. (Joel Pimentel Y Tu) - CNCO.

Segundas Oportunidades.

Narra Joel.

Ya habían pasado 3 semanas desde que ______ se molestó conmigo no la vi durante una semana completa Andrs dijo que había ido a Victorville por un compromiso pero cuando la vi de nuevo parecía más apagada de lo normal, creería que gracias al cielo ella y Christopher no están en su mejor momento ya que en cada reunión ni siquiera se dirigían la palabra, por otro lado... mi plan salió muy bien, ya tenía una prueba de Ema que sería el dulce que le di aquel día... hace 1 semana llegó la prueba de paternidad y no había sido capaz de abrirla, quería hacerlo pero no quería.

— ¿La vas a abrir si o no? — Dice Zabdiel sacándome de mis pensamientos.

— No se.

— Dijiste no sé hace dos días... hazlo ya ¿Quieres saberlo o no?

Me pongo de pie, — ¿Que debería hacer si sale negativo? ¿Seguir con mi vida? O si sale positivo ¿Tengo que reclamar mi derecho como padre?

— Puedes ocupar ambas opciones en ambos casos, si sale positivo podrías seguir con tu vida o reclamar a tu hijo y si sale negativo podrías seguir con tu vida o quedarte con _____ y tu hijastro. — Se alsa de hombros.

— Esto no está bien... yo no tenía su consentimiento para hacer eso ¿Sabias que Antonella es abogada verdad?

— Si el es tu hijo, no tienen poder sobre ti.

Suspiro tomando el sobre, — Bien... abrelo tú y dime.

— Ah... — Voltea los ojos, — dame eso. — Me lo quita de las manos.

El lo abre con la paciencia más impresionante de la vida, yo estaba nervioso y el lo hacía despacito para alterarme.

— ¡¿Puedes hacerlo más rápido?!

El Rie, — esta bien si... — Saca el sobre y tarde unos segundos en leerlo, — 99.99% de compatibilidad, si... es tu hijo.

Le arrebató el papel tan rápido como puedo, — Tengo un hijo... — Le digo se forma sorpresiva.

— Tienes un hijo. — Me sonríe.

— ¡Soy papá! — Me lanzo sobre el para abrazarlo.

No podía explicar lo que sentía, estaba emocionado, sorprendido y a la vez tenía un poco de rabia ella no me lo había dicho no había vuelto después de años para decírmelo.

— ¡Eres papá! — Dice apretujandome, — ¿Que harás ahora?

Suspiro lanzándome al sofá, — ¿Que debería hacer? ¿Debería acercarme a ella?

— Deberías acercarte a ellos.

Sonrei, — ¿Debería esperar a que ella me lo diga cierto?

— Yo no la veo muy estable... no sé que le está afectando pero ella no está bien así que si, es lo mejor... que no la presiones.

Me pongo de pie y tomo mi saco.

— ¿Donde vas? — Frunce el ceño.

— A subirle los ánimos...

Rie — ¿Crees que no te dará una patada en el culo?

— No lo creo. — Le sonrio antes de salir.

Al salir del departamento de Zabdiel y veo la hora en mi reloj de mano 7:17 pm me subo al auto y voy al centro comercial ¿le seguirán gustando las donas? Da igual, voy y compro donas, helado y muchos chocolates quizá no la haga sentir bien pero estará bien...

Vuelvo al auto y tardo tardó aproximadamente unos 25 minutos en llegar a su casa de el departamento de Zabdiel al centro comercial y luego a su casa y contando los 10 minutos que estuve al frente con el auto apagando pensando si de verdad debería entrar o no...