Un Tropiezo Con El Amor. (Joel Pimentel Y Tu) - CNCO.

Nuevo Para Mi.

Limpio mis mejillas y salgo de la habitación no debería llorar ya, no debería seguir dejando que esto me afecte, no me lo voy a permitir y tampoco debería gritarle de esa manera a las personas, camino por el pasillo y bajo las escaleras hasta llegar a la primera sala de estar — La principal — la abuela está sentada leyendo un libro.

— Abuela...

Ella levanta la mirada y cierra el libro, — No se interrumpe a la gente cuando lee _____.

— Si, lo siento mucho pero quiero... Quiero saber si puedes decirme donde esta Andra.

— Seguramente en el último piso dando vueltas por el jardín, debería estar contigo ¿Por qué no esta con ella?

— Yo le grite y le pedí que se fuera.

Ella Sonríe, — ¿Se lo pediste?

— Le grite fue más una orden... Lo siento.

— No se le Grita a las personas deberías saberlo y no me tutees no soy tu hermana. — Abre de nuevo el libro.

Genial, ahora estoy con una profesora de ética profesiónal, subo las escaleras hasta el último piso — Fue demasiado costoso encontrar un jardín ahí arriba — pero lo hice.

— He hola. — Digo entrando.

Ella Sonríe, — Hola ¿Necesita algo? No escuche la campana.

— No, solo quería pedirte perdón por la forma en que te grite hace rato, no me siento bien pero eso no me da derecho de tratarte así. — Le sonreí.

— El que ríe roto, vale doble.

— Creo que se me pasó de largo la presentación... Soy _____ _____. — Le extiendo mi mano.

Ella la toma, — Andra Alemani.

— ¿Alemani?

— Si, soy la hija mayor de Gerard Alemani. — Asiente con la cabeza.

— Oye... — Digo sorprendida, — Yo jugué contigo cuando tenía 5.

Ella siente riendo, —  Si, yo tenía 9, le encantaba que le leyera libros de...

— Sherlock Holmes. — Terminó por ella.

— Si... Y disculpe por haberme entrometido en su vida personal no era mi intención en lo absoluto.

— No me trates de usted, yo debería eres mayor que yo y no te preocupes esta bien, no tienes que disculparte por eso.

Suspira, —  Ay gracias a Dios... Estaba... Creí que estabas molesta conmigo.

— ¿Cuántos años tienes?

— tengo 21.

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— Eso podría cambiar luego... — Me inclino hacia el apoyándome en el escritorio, — ¿Cuantos años tiene?

— No lo creo _____, no estoy aquí para tener amoríos de oficina y menos con la hija menor de mi jefe. — Se pone pie, — Respondiendo tu pregunta, tengo 21. 

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— Si... — Intento sonreír, — es una buena edad ¿estas en primer años de Universidad?

— En el tercero, — Dice abriendo una bolsa, — ¿Quieres es de queso?

El olor que llega a mi nariz revuelve mi estómago y las arcadas se hacen presentes, — Un baño...

— ¿Que?

— ¡¿Donde esta un baño Andra ?!

Ella me toma rápido del brazo y me lleva a uno de los baños que estaban ahí, cuando ella abrió la puerta y enseguida estaba de rodilla frente al inodoro.