only, my bad boy (Noah Schnapp)

capítulo 23

Este es un capítulo un poco largo. No sean perezosas y lean, está bueno.

Paseamos por toda la ciudad, debia decir que no esperaba eso. Si así era Noah como compañero era grandioso. Pasamos por la pista de hielo de la ciudad, al parecer hoy era el día de la selección, tenían que escoger a una chica para que representara al país, esas competencias siempre se ponen interesantes, pero no queria ver eso, mi idea era engañar a Noah y llevarlo a las guerras de nieve.

- ¿te parece si entramos? - le pregunté. Se detuvo y sin pensar me bajé de la motocicleta. - ¿si? - me coloqué enfrente de él - por Dios... Siempre he querido entrar... ¿que dices? No te estoy pidiendo mucho Noah

- para nada - contestó

- oh, vamos, te prometo que no será para nada aburrido

Me miró detenidamente, tenia una cara de " horror"

suspiré.

- esta bien iré yo sola - caminé hacia la pista, me decepcioné al ver que Noah no me seguía ¿que esperaba? ¿Que me siguiera como un niño detrás de un dulce?. Entré a la pista y caminé al lado contrario, el juego estaba apunto de comenzar.

«al parecer jugaré sola» pensé.

- ¿cuántas personas? - me preguntó el chico, que al parecer era el supervisor. Abri la boca para contestar.

- dos - me giré al escuchar la voz de Noah.

- ¿pensé que no querías estar aquí? - pregunté sorprendida.

El chico nos dejó pasar sin problema alguno.

- me estaba aburriendo en la motocicleta - miró a las demás personas - pensé que iban a ver niños malcriados - dijo mirando todo.

- hay horarios, el de los niños ya pasó, ahora nos toca a nosotros.

El supervisor estaba repartiendo las pulseras que distinguían los equipos, rojo y azul. Me acerqué y tomé una pulsera roja, Noah intentó tomar una, pero le entregué rápidamente la azul.

- no me conviene tenerte en el mismo equipo Schnapp - dije, pude ver su sonrisa maliciosa y se colocó la pulsera azul.

- oh nena, no sabes con quién tratas - dijo seductor.

el supervisor ordenó que los equipos ocuparan en los extremos e hizo sonar el silbato. Me escudé detrás de las barras, tomé una bola y mi plan era atacar a Noah. Salí de mi escondite lista para lanzar e inmediatamente me tiraron una bola de nieve y escuché la risa de Noah.

« con que así quiere jugar » mi gimnasta rusa tiene puesto su mejor traje lista para arrasar.

Tomé otra bola de nieve y se la lancé rápidamente a Noah mientras intentaba darle a alguien más, se sorprendió al ver como la bola de nieve estallaba contra su cadera. Sonrió de oreja a oreja. Era gracioso ver a Noah de esta manera, un chico malo, que prefiere alejarse de la gente ¿estaba jugando guerras de nieve? Eso si que no se veía todos los días. Me sentía orgullosa de hacer que aceptara esto, pensaba que diría un rotundo "no" pero aqui estabamos, tirándonos uno al otro bolas de nieve.

En mis intentos de pegarle con las bolas de nieve no me estaba yendo nada mal, íbamos 8-7 por desgracia el llevaba ocho. Una chica pelirroja con un corte sobre los hombros se colocó a mi lado, me miró sonríente.

- ¿quien es tu rival? - preguntó

Nos levantamos para arrojar las bolas de nieve.

- él - dije y le señalé a Noah rápidamente. Nos volvimos a cubrir.