I-XVIII

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Al caer la noche, la pareja de Ángel Caída y Semi-Dragón salieron del departamento que compartían después de haber dejado servidas comida y agua para la segunda chica con la que compartían su hogar, Sharon, y se encaminaron hacía la plaza, que a pesar de estar a mitad de agosto, ya empezaba a tener tiendas navideñas abiertas, siendo Raynare la más curiosa, viendo absolutamente todo a su alrededor.

ーRaynare...ーla voz de Aijem llamó con suavidad a la chica de la que sujetaba su mano derecha.

ーEsto es increíble, nunca había visto estos lugares por la nocheーdijo Raynare sorprendida, sin percatarse de que el menor la había llamado.

ーHey, mira tu pechoーdijo Aijem tirando un poco de la mano de la pelinegra, llamando así su atención.

ー¿Eh?ーRaynare, al bajar la vista, se topó con un collar hecho completamente de esmeralda, a excepción del centro, el cuál estaba hecho con un diamante negro, tallado en forma de corazón, con tres pares de alas saliendo por los lados, las cuáles, igual que las suyas, intercambiaban su color de forma constante, cambiando de material literalmente, entre oro, plata y el mismo diamante del corazónーA-Aijem, ¿Cuándo...?ーfinalmente, la pelinegra se quedó sin palabras al ver el leve brillo azulado en los ojos de Aijem al compás con su anillo.

ーDescubrí que puedo hacer objetos que sean permanentes incluso si dejo de concentrarme en ellos, ya que no tengo el dinero para comprarte uno, quería al menos pensar y concentrarme discretamente para darte esta sorpresaーdijo Aijem deteniéndose frente a Raynare, para luego besar los dorsos de sus manos con delicadeza y se forma cálida, sonrojando a la Caída.

Antes de que pudiera decir algo, Raynare se vió interrumpida por su impulso de abrazar al pelirrojo.

ーNormalmente no soy buena con las palabras en estos casos, y siempre que dices algo tan lindo, no encuentro forma de responderte que no sea una burla para sonrojarte de regreso, pero cuando haces estas cosas... Simplemente eres de lo mejor, no me lo quitaré nuncaーla voz de Raynare temblaba, ciertamente estaba emocionada y felizーTe amoー

ーRaynare, tu manoーdijo Aijem después de corresponder a la pelinegra.

El corazón de Raynare se aceleró aún más al momento de ver que en su muñeca había una pulsera hecha con un hilo de color verde esmeralda, el cuál apostaría a que era literalmente esmeralda, con diamantes negros y piezas pulidas de amatista, unidos unos con otros, reflejando en ellos las luces de la plaza, haciendo un efecto de absorción de luz al no transparentarse.

ーEn serio, en serio eres un idiota, el idiota que sabe calentar mi frío y cruel corazón con palabras dulces y acciones irrepetiblesーdijo la Caída aferrándose aún más al chico.

ーMe alegra ser eso y no un idiota que habría desperdiciado su vida teniendo miedo de un par de imbécilesーrespondió Aijem, dejando un beso cálido en la mejilla izquierda de Raynare, quien, dejándose llevar, ignorando por completo a las personas a su alrededor, abalanzó sus labios hasta los del chico, haciendo movimientos tiernos y cariñosos.

ーCon tan sólo esto ya hiciste de esta cita la mejor del mundoーdijo Raynare en voz baja entre la poca distancia que había entre ambos.

ーY aún falta todo lo demásーrió Aijem sujetando la cintura de Raynare contra él con cierta delicadeza.

ーEn verdad eres interesante y elaborado a más no poder, aunque dudo que lo que planeaste supere estoーrió la pelinegra ante el comentario dle pelirrojo.

ーHum, tal vez, es mi mayor maníaーdijo Aijem separándose rápidamente de la pelinegraーHay... un lugar al que quiero que vayamosー

Las mejillas de Aijem se tornaron rojas y la nostalgia apareció en su voz.

Highschool DxD: Las Brujas del Pecado (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora