Capitulo 3

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Lan WangJi apenas sintió el cuerpo de Wei WuXian lo abrazo firmemente, evitando que él recibiera el golpe.
_ ¿Lan Zhan estas bien?-Pregunto el de ojos grices, pero no intento moverse, ya que el cuerpo del otro era calentito.
_ Mmm, no vuelvas a correr. - El corazón del pequeño alfa latía sin control alguno al tener tan cerca a Wei Ying y saber que estaba a salvo.
El de ojos grices sonrió. - Lan Zhan me ha salvado ya dos veces en un día.
Los dos más pequeños estaban en su burbuja y el beta se acercó al otro niño que permanecía en su lugar tratando de no hacer movimiento alguno, aunque su cuerpo temblaba como si de una hoja se tratara, parecía que aún no salía del shock.
Al sentir al Lan cerca Meng Yao se inclino. - Gra... Gracias p... por salvarme jovenes Lan.
Lan Xichen tomo el brazo del más bajo e hizo que se enderece, mostrandole una sonrisa donde predominaba la preocupación y amabilidad, él omega estaba confundido, ese chico se preocupaba por él? Esa pregunta rondaba por su cabeza ya que solo su madre había mostrado preocupación por él en toda su vida.
_¡Madre! - dijo y salió corriendo. El Lan mayor se preguntó si así serían sus vidas de ahora en adelante, es decir, corriendo detrás de sus omegas.
Los menores se percataron de que los otros habían salido corriendo y fueron tras ellos.
Llegaron a la vieja cabaña y a excepción de Meng Yao los otros se debatian si debían entrar, mejor dicho los Lan se debatían si era correcto o no ingresar a una propiedad a la que no habían sido invitados. Mientras que el omega entró sin miramientos.
_ Mayor... em...- Wei WuXian no sabía como llamar al otro omega. - ¿Necesita ayuda?
El otro se encontraba tratando de acarrear una cubeta con agua que parecía muy pesada para él solo, así que entre ambos omegas la llevaron junto al cuerpo de una mujer inconsciente con ropas rotas y manchadas de sangre, el más joven vio que una navaja seguía incrustada en el cuerpo de la bella dama.
Meng Yao se encontraba desesperado, corriendo de un lugar a otro buscando trapos con los que limpiar las heridas de su progenitora. Cuando tuvo todo el más pequeño se dispuso a limpiar el rostro de la mujer y bajar la temperatura, mientras que el de mayor edad sacaba la daga del cuerpo de su madre y agradecía que la hoja era pequeña.
Limpio bien la herida, mientras vio cómo los dos Lan ingresaban a la cabaña indecisos.
_Lan Zhan, por favor trae otra cubeta con agua. - Dijo el oji gris y él pequeño Lan lo hizo eficientemente, mientras su hermano mayor se acercaba a la mujer, no entendía como el pequeño tenía conocimiento y utensilios para cerrar la herida, por más pequeña que sea. Sin cuestionar nada, se dispuso a transferirle energía espiritual para estabilizar a la mujer.
Meng Yao se tranquilizó un poco viendo como todos lo ayudaban a cuidar a su madre y esta estaba comenzando a despertar.
_ A-Yao, gracias al cielo que estas bien.- La mujer hablaba casi sin fuerzas. - ¿No te hicieron nada?.- Meng Shi estaba tan preocupada por su hijo que no se percato de la presencia de los otros tres niños.
_ No, madre, estos tres jóvenes discipulos del clan Lan me salvaron.
La beta quiso levantarse y agradecer apropiadamentre a los tres pequeños, pero no pudo por el dolor y porque su hijo se lo impidió.
_ Se los agradezco jovenes Lan y pequeño Wei.- Si, la mujer conocía al pequeño, solía llevarle un poco de comida de vez en cuando y el niño siempre sonreía, aunque la de ahora era más auténtica.
_Señora Meng Shi, es lo menos que podía hacer al ver a alguien en peligro, pero realmente yo solo complique las cosas, los que nos salvaron fueron Lan Zhan y el hermano mayor Lan Xichen.
_ Wuau, se que en la secta Gusu Lan son excelentes cultivadores, pero ustedes son muy pequeños aún y de todos modos se enfrentaron valientemente a dos hombres peligrosos, se los agradezco por salvar a mi hijo y al pequeño Wei, pero como madre que soy debería reprenderlos también por alejarse de sus mayores, sus padres los deben estar buscando.
Los Lan parecían haberse olvidado de su tío hasta que la bella dama les dijo aquello.

Lan Qiren parecia querer arrancarle los ojos al tonto discípulo que perdió de vista a sus preciados sobrinos y también estaba seguro que sufriría un desvío de su qi en cualquier instante, como es que había dejado que sus sobrinos paseen solos, es decir Lan Xichen era muy responsable para sus cortos 10 años y había estado en dos ocasiones en Yunmeng, pero fue un error dejarlo a cargo de WangJi y confiarse en que recordaria el camino de vuelta a la posada. Que tal si habían tomado una calle equivocada y se perdieron, o si alguien los secuestro, o si los atacaron y estan moribundos en un callejón. O peor aún si se equivocaron de camino, se perdieron, alguien los reconoció, los secuestro, los hirió o mato y tiro sus cuerpos por cualquier parte de Yunmeng. Todo aquello pasaba por la preocupada mente de Lan Qiren.
_ Maestro Lan, encontramos un rastro de olor de sus sobrinos y al parecer un omega cachorro. - Le informo uno de sus discípulos y salieron tras el rastro junto a todos sus discípulos.
Ya estaba anocheciendo cuando encontraron en las orillas del bosque a un hombre inconsciente y a su lado la espada de practica de Lan Xichen.
Cualquiera de los discípulos ahí presentes juraría que su maestro podria desmayarse en cualquier instante.
Despertaron al hombre. - ¿Donde estan mis sobrinos? - Le exigió saber Qiren mientras sostiene su espada contra el cuello del hombre.
El hombre estaba asustado, el jamas se había enfrentado a un cultivador, solo a mujeres u omegas que obligaba a prostituirse y a niños y niñas que vendían.
_ Yo... yo no se...
_ Escúchame y pon mucha atención, quizás no sepas quién soy, así que te lo diré, yo soy Lan Qiren, y mis sobrinos son Lan Xichen y Lan WangJi, hijos de mi hermano Qing Heng-Jun, actual líder de la secta Lan, ya sabiendo quien soy y quienes son mis sobrinos dime que paso, la verdad o seras castigado severamente hasta la muerte. - Nadie jamas había visto al maestro Lan mostrarse tan dominante y amenazante ante otras persona, ninguno se atrevió a decir una palabra.
_ Yo... yo estaba llevándome al hijo omega de una prostituta que nos debía dinero, cuando otro omega apareció, mi compañero y yo creimos que era nuestro día de suerte, pero luego aparecieron otros dos niños de ropas blancas para defender a los omegas, nos atacaron y me desmaye, yo no les hice nada, lo juro no me mate. - Dijo el hombre velozmente y suplicando por su vida.
_ Maestro encontramos a sus sobrinos, se encuentran en una cabaña, no muy lejos de aquí, pero se rehúsan a dejar la cabaña, ya que allí se encuentra una beta herida y dos niños de las edades de ellos, ambos omegas.
_ Llevenlo y hagan que confiese a donde retiene a las personas que obliga a prostituirse, liberenlos y apresen a todos los secuaces de este asqueroso hombre y llevenlos a Gusu, para que reciban un castigo ejemplar. - Les ordeno Lan Qiren a un grupo de cinco discípulos. - Tú llevame con mis sobrinos.
Se dirigieron a la cabaña donde se encontró con su sobrino menor abrazando a un omega de más o menos su misma edad y este dormia al parecer muy comodo al tener al alfa abrazándolo y cubriendolo del frio clima, ya que este llevaba puesta unos trapos rotos que hacía mucho habian dejado de ser una ropa decente y tampoco tenía zapatos, el pequeño se veía mal, demaciado delgado, despeinado y sucio. Mientras que su sobrino mayor charlaba con otro omega de unos nueve o diez años mientras lo miraba con adoración, ese omega se encontraba un poco mejor, su ropa estaba limpia y sin roturas, también tenía zapatos, pero no eran de buena calidad y realmente dudaba que algo en esa cabaña sea de calidad. A un lado de Xichen se encontraba una dama dormida, al juzgar del Lan mayor una mujer demaciado bella, aún estando con el vestido manchado de sangre su belleza deslumbro al alfa.
_Tío. - Lan WangJi inclino su cabeza, pero no se movió más que eso.
En cambió Lan Xichen se paro e inclino ante su tío. El pequeño dueño de la cabaña hizo lo mismo que el beta, este admiraba mucho al clan Lan y soñaba con algún día poder ir y estudiar, ya que su biblioteca era una de las más grandes que existía, pero solo era un sueño.
_¿Me podrian explicar lo que sucedió? ¿Por qué no regresaron a la posada? - Lan Qiren estaba furioso y al mismo tiempo aliviado de que lo único inusual en sus sobrino era las ropas con tierra.
_Tío encontramos al joven Wei WuXian en la calle, al parecer esta huérfano hace ya un tiempo y quisimos ayudarlo, como los principios Lan lo dictan. - Xichen explicaba y usaba las reglas de su clan para justificarse a él y a su hermano. - Lamentablemente solo lo metimos en problemas, ya que nos habiamos perdido, luego escuchamos como alguien intentaba llevarse a a-Yao. - El beta suspiro profundamente para tranquilizar su ira, cosa que no paso desapercibido para su tío, que se encontraba totalmente extrañado, Xichen nunca se había mostrado enfadado ante nada, él sabía controlar sus emociones, pero su naturaleza gentil lo hacía querer ayudar a los más débiles. En cambio su sobrino menor siempre fue muy apegado a las reglas.
_ Luego de lograr liberarnos de esos repulsivos hombres, seguimos al joven Meng Yao y descubrimos que la señora Meng estaba herida, y lamento haberle preocupado, pero se nos paso el tiempo muy rápido mientra ayudabamos a a-Yao.
El omega mayor estaba tan rojo al escuchar como por segunda vez lo nombraba el beta, es que se acababan de conocer y él no le había dicho que podía llamarlo de forma tan cercana, pero no podía engañarse, le encantaba que el Lan se haya tomado tal libertad.
El alfa mayor no sabía que hacer, al parecer sus sobrinos habian tomado cariño por los omegas, ciertamente no quería al hijo de una mujer como Cangse Sanren en la secta Gusu, aún recordaba cuando esa demonio quería cortarle su preciada barba y su cuñada la alentaba. Pero parecía que WangJi no lo solitaria y no quisiera darle otra desilusión cuando su madre acaba de morir hace tan solo una semana. Sus sobrinos merecían ser un poco caprichosos y él, solo por esta vez, les daría el gusto.
Lan Qiren se dirigió a su sobrino menor e intentó tomar en brazos al pequeño dormido, pero el alfa se aferro a él.
_ WangJi comportarte, ya casi son las nueve y quiero irme a la posada, asi que déjame cargarlo que tu no podrás.
_ WangJi, nuestro tío solo quiere ayudarte con el joven Wei WuXian.
Dijo Lan Huan cuando vio que su hermano se debatia si creer o no en su tío.
De a poco el pequeño Lan soltó al omega y su tío lo llevó en brazos, mientras ordenaba a los discipulos que llevaran a la mujer también a la posada y revisen las haridas y que el otro omega también iría con ellos.
Llegaron a la posada unos minutos antes de las nueve, todos estaban cansados, así que Lan Qiren dejo al niño en una habitación y luego les indicaria a sus sobrinos sus habitaciones, pero apenas dejo a Wei WuXian en la cama, Lan Zhan se recosto a su lado atrayendo el otro cuerpo en un abrazo.
El viejo Qiren estaba muy agotado como para ponerse a discutir, así que simplemente salió al encuentro de su otro sobrino que también se encontraba en una habitación con el otro omega, pero estos charlaban sobre la biblioteca de Gusu.
_ Ya deben dormir. - Les dijo el mayor y se dirijo a su habitación, ese día había sido muy largo y algo le decía que de ahora en más no encontraría tranquilidad.

Mi camino eres tu MDZSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora