Todavía está amaneciendo cuando Hazel abre los ojos y mira a su lado para contemplar el plácido rostro de Jon durmiendo junto a ella.
Se queda observándole un instante y un extraño vértigo se instala en su interior. Le entran ganas de avalanzarse sobre él y cubrirle la cara de besos, pero se contiene y dobla el codo, apoyando su cabeza y contemplando su calmada respiración con regocijo.
Se siente tan feliz que teme perder esa agradable sensación y anhela poder despertarse así cada mañana.
En ese momento, una notificación le avisa de que ha recibido un mensaje en su móvil. Se incorpora rápidamente y con cierto cuidado para no despertarle, coge su móvil y lee el mensaje. Es de su amiga Carla:
Carla: Estás despierta? Supongo que no, es demasiado pronto... Pero, por favor, cuando leas mi mensaje, llámame. Necesito una amiga 😢
Hazel sale de la habitación y responde el mensaje de inmediato:
Hazel: Me acabo de despertar. Qué pasa?
Carla: Podemos hablar?
Hazel: Sí, claro. Qué ocurre, Carla?
Carla: Rober me ha dejado 😢
Hazel: Qué??? Espera, te llamo
Carla: Puedes bajar y tomamos un café? Estoy en la cafetería que hay en la esquina de tu calle.
Hazel: Voy ahora mismo.
Entra de nuevo a la habitación y con sigilo coge una camiseta, un pantalón corto y unas chanclas, y sale de casa sin hacer ruido.
En la cafetería está Carla sentada a una mesa, removiendo el café que tiene ante ella.
—Carla, ¿qué ha pasado? —le pregunta Hazel acercándose hasta ella y dándole un fuerte abrazo. Se sienta enfrente y espera que su amiga le cuente.
—Se ha marchado...
—¿Así, sin más? —pregunta Hazel sin salir de su asombro.
—Dice que sentía que estábamos estancados. Que me quiere mucho pero que quizás llevamos juntos demasiado tiempo, y ahora siente que nuestra relación está estancada.
—¿Estancada? ¿Qué quiere decir eso?
—No lo sé, Hazel. Dice que llevamos viviendo juntos demasiado tiempo y que era hora de dar un paso más.
—¿Un paso más es casaros?
—Eso mismo le he preguntado yo. Pero dice que no, que para él vivir juntos es lo mismo que estar casados.
—Entonces, ¿qué paso más quiere dar? ¿Tener hijos?
—Esto también le he preguntado. Y, aunque creo que todavía no estoy preparada para ello, habría aceptado si es lo que él quería que hiciéramos para seguir con lo nuestro. Pero tampoco quiere ser padre todavía.
—No entiendo nada, Carla. ¿Qué paso quiere que deis?
—Ese es el problema, Hazel. Que piensa que después de llevar tanto tiempo juntos, cree que ahora sería el momento de ser padres, pero que no se siente preparado todavía para tener hijos.
—¡Eso no tiene ningún sentido! —protesta Hazel.
—Lo mismo he pensado yo y por más que he intentado que me lo explique, solo repetía lo mismo una y otra vez —Carla no puede contener más las lágrimas y empieza a llorar—: Ha empezado a decir que toda relación tiene un periodo de vida y que nosotros, como empezamos muy pronto, hemos superado ya ese periodo.
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Directo hacia ti
RomanceHazel celebra su ascenso con asombro y alegría. Es la primera mujer que ostenta un cargo directivo en la cadena de televisión local donde lleva trabajando casi siete años, propiedad de un multimillonario misógino, inculto y con escasos conocimientos...