Poner un pie de nuevo en una iglesia había sido un infierno pero luego de una profunda respiración pude apartar todos los malos recuerdos de mi mente, esto no se trataba de mi, sino de mi nueva buena amiga Haley, ella quería que estuviese allí y no iba a fallarle. Toda la gente reunida estaba emocionada y feliz por la nueva pareja, antes de venir a la ceremonia había recibido un mensaje de Spencer, el amigo de Trent que era mi cita, Haley le había dado mi número para poder ponerse en contacto pero no tenia idea de quien se trataba, solo me dijo que iría un poco más informal a la boda. Estaba muy nerviosa, no esperaba nada de esa situación porque obviamente seguía enamorada de Craig pero acercarme a alguien nuevo seguía siendo un desafío. Estaba a punto de entrar a la iglesia cuando percibí una mirada abrasadora sobre mi, ya sabía de quien se trataba. Mire de soslayo hacia mí derecha y vi al hombre que había robado mi corazón, se veía tan hermoso como recordaba con traje, su rubio cabello estaba creciendo pero aún seguía corto.
-¿Rhian?-una voz desconocida dijo mi nombre y voltee con curiosidad.
Por todos los infiernos… ¿de donde había salido ese hombre? ¿Estaba hablándome a mi?
Mi garganta se seco.
-¿si?-medio murmure
El tipo me mostró unas hermosas perlas blancas mientras sonreía.
-soy Spencer, amigo de Trent y Haley.
-encantada.
¿Eso era informal? El tipo definitivamente sabía lucir lo informal. Lucía como si hubiese olvidado que tenía que asistir a una boda y se vistió con lo primero que encontró en su guardarropa, un pantalón negro que marcaba sus torneadas piernas, una camiseta negra básica y una chaqueta de cuero a juego con botas de motero, para la frutilla del postre, su cabello rubio y largo estaba recogido en un moño desordenado como si no hubiese tenido ni siquiera un segundo de más para peinarse. Pero jodanme, se veía como sexo vestido de cuero. Y era todo sonrisas que adornaban su cara con esa barba espesa que le daba ese toque tan varonil.
-siento el retraso, tenía que recoger mi moto del taller-señaló hacia donde estaba estacionada una hermosa y reluciente Harley Davidson.
-no hay problema.
Se acercó lentamente a mi y dejó un suave beso en mi mejilla tomándome por sorpresa. Olía deliciosamente bien.
-eres aún más hermosa de lo que Haley dijo-susurró en mi oido
Se aparto y me dio otra sonrisa de un millón de dólares. Me sonroje.
-¿entramos?-señale la puerta.
Spencer me ofreció su brazo y enganche el mio en él, todo sucedió bajo un par de ojos azules que seguro estaban tirando dagas en ese momento… Si las miradas mataran seguro mi acompañante estaría a diez metros bajo tierra.
Mi acompañante resultó ser muy divertido, era un asesor financiero muy buen pago por lo que me contó pero lo que más amaba era salir a recorrer el mundo en su motocicleta, para eso necesitaba dinero asique ser asesor no era tan malo después de todo. Por su apariencia jamás hubiera imaginado sobre su trabajo, ni que le gustaran las mujeres de talla grande, pero he comenzado a conocer gente que siempre termina sorprendiéndome.
La ceremonia fue hermosa, Haley se veía deslumbrante y feliz, por supuesto llore como una bebé, mi acompañante fue todo un caballero y me ofreció su pañuelo. Cuando llegó la hora de partir hacia el lugar de la fiesta los nervios comenzaron atormentarme otra vez, se que Craig iba a estar en la misma mesa y para mí fortuna o desdicha, Spencer también. Me retoque el maquillaje antes de entrar, estaba buscando a mi acompañante cuando fui jalada hacia un rincón lejos de las miradas de todos.
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Unswerving (Serie Hard Hearts) libro #1
RomanceLa belleza no esta en el físico donde todos lo buscan, sino en el corazón... donde pocos saben llegar. Obra registrada en Safe Creative 2008315198458