Si no te hubiera conocido [Mikaela y tu]

Capitulo 16: Cicatriz que aún no sana

"Solo por ti arriesgaría todo.

Aún si las dolorosas cicatrices crecen más.

Como si cada momento fuera un sueño, jamás me alejaré de tí"

Domingo

7:45 am

Otra noche tranquila... es algo satisfactorio, pero no deja de darme preocupación.

Tuve un día algo ocupado pero nada fuera de lo común, mi hermano me invitó a ver peliculas durante la tarde, mi tía se la pasaba tecleando su laptop y haciendo llamadas.

20:45 pm

Encerrada en mi habitación otra vez, con algo de aburrimiento, la música sonando en mis audífonos, una melodía tranquila y melancólica.

Navegando por mi teléfono por las redes sociales, me encontré un post contando algunas de las típicas leyendas urbanas, eso me trajo el recuerdo de aquel día, y me dió una idea.

Decidí buscar en internet las palabras: "Serafin del final".

Muy pocos fueron los resultados... :

《Serafin del final, el peligro de conocer la leyenda》

Al hacerle click, salía un anuncio diciendo "Este sitio web no está disponible".

Busqué otra opción.

《Relacionan casos de personas desaparecidas con la Leyenda prohibida》

Siento un escalofrío, la página también fué cerrada... empieza a parecerme una mala idea..

Las otros sitios y páginas tampoco están disponibles o fueron cerradas, es.. tan raro... Es como si conocerla o investigar fuera algo ilegal...

《El desastre que casi terminó con la humanidad: el proyecto "Serafin del final"》

Dí un último Click.

Esta sí da resultado.
Empezé a leer en voz alta.

—Virus que acabó con casi todos los humanos, jinetes del apocalipsis... vampiros... demonios... , experimentos con humanos, un verdadero infierno...
Oh dios mio... —

Las pocas imágenes que habían en medio de todo el texto: paisajes desolados, el "supuesto" uniforme de los vampiros, que era exactamente el que yo veía... y de algo llamado: el "Ejército Demoniaco Imperial Japonés".

Al mismo tiempo me surgió un enorme sentimiento de tristeza y angustía, nuevamente sentía mi cuerpo adormilado.

Ya no podía seguir con esto asi que solo apagué la pantalla del celular dejandolo caer a mi costado.

Me quedé congelada, viendo hacis el frente, con la música aún sonando en mis audífonos. Sentí un nudo en la garganta.

No quería pensar en nada.. pero eso era imposible.

Es claro... que yo era un vampiro, un chupasángre y quiza había asesinado... ¿cuantas veces... ?

Se me revolvió el estómago de imaginar esos escenarios sangrientos.

Era algo tarde y no me estaba sintiendo bien, decidí acostarme sin encender mi telefóno el resto de la noche.

Me costó bastante dormir, como dos horas acostada solo viendo mi techo, para finalmente conseguirlo.