¡No soy cómo ellos! (chicaxchica)

Capítulo 4

Al día siguiente Harry y Duska caminaban por los pasillos intentando ignorar a todos sus compañeros pero era imposible, al pasar cerca de ellos les mostraban una chapa que cambiaba de Cedric a "Harry, Tonto" y "Duska egoísta".

–¿Te gusta? –preguntó un alumno de Hufflepuff enseñando su chapa a Harry y no dejándolos pasar.

–Más me gusta esto, hijo de Voldemort. –gruñó Duska malhumorada.

Duska echó atrás a Harry y le propinó una patada en sus partes al chico haciendo que cayera al suelo adolorido y las chicas que estaban con él la mirasen asustadas. Cuando dejaron pasar a ambos se acercaron a donde estaba Cedric con algunos de sus amigos, quienes al verlos comenzaron a burlarse de ellos.

La rubia no lo soportó, cogió a uno del brazo y comenzó a usar sus poderes de fuego, quemándole el brazo poco a poco. Los gritos del chico comenzaron a llamar la atención de todos los presentes que habían en la zona, haciendo que mirasen a Duska asustados.

–¡Me quema! ¡Suéltame! Me duele. –gritaba mientras lloraba e intentaba soltarse pero Duska se lo impedía.

–Te lo repito, vuelve a burlarte y serás convertido en cenizas. ¿Ha quedado claro? –preguntó Duska con la voz ronca y sus ojos rojos.

–S-Sí.

Duska lo soltó y el chico se remangó para ver una gran quemadura en su brazo, gimió adolorido mientras lloraba y se marchó a la enfermería. Los demás alumnos, incluidos Cedric y Harry, observaron sorprendidos a la joven Malfoy.

–¿Alguien más quiere? Por que tengo para todos vosotros, cabrones. –gritó Duska haciendo que todos se marcharan del lugar asustados por la amenaza. –Eso pensé.

–Dragones, esa será la primera prueba. –dijo Harry después de asegurarse de que no había nadie, y efectivamente, todos se habían marchado dejando a los tres solos.

–Un dragón para cada uno. –siguió Duska más calmada.

–¿Vais enserio? –preguntó Cedric impactado por la noticia.

–Sí. –dijeron Harry y Duska al unísono.

–¿Krum y Fleur lo saben? –preguntó el Hufflepuff.

–Así es, se lo hemos dicho antes.

–Sobre las chapas, quise evitarlo pero... –dijo Cedric antes de que ambos se marcharan.

–Lo sabemos, no te preocupes.

–Los que se tienen que preocupar son ellos. –gruñó Duska volviendo sus ojos a estar rojos pero Harry la cogió de la mano haciendo que se calmara, y sus ojos volvieran a estar grises.

–Extraño poder el que tienes, Malfoy. –comentó Cedric interesado.

–Dímelo a mí.

Harry se acercó para hablar con Ron pero este lo ignoró y siguió su camino con Seasmus, quien parecía incómodo de estar en medio de ambos cuando peleaban. Su mañana empeoró cuando Draco comenzó a burlarse tanto de él como de su hermana, haciendo que Harry se enfrentara a él haciendo sonreír a Duska.

Justo cuando Draco iba a maldecirlos por la espalda, Alastor apareció y transformó a Draco en un hurón blanco haciendo reír a todos. Alastor comenzó a moverlo de un lado a otro y Duska sugirió si su hermano podía quedarse así para siempre en vede ser un humano. La diversión acabó cuando McGonagall apareció y revirtió el hechizo de Moody, para luego reñirle por usar la Transfiguración como método de castigo y que estaba prohibido en Hogwarts.

–Harry, yo voy a dar una vuelta. Necesito despejar mi mente. –le comentó Duska a su amigo.

–De acuerdo, nos vemos luego.