Capítulo 8

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–Ahora escuchadme, quiero que cogáis a los demás y os marchéis. –dijo Sirius a Harry y Duska.

–¿Qué? No. Me quedo contigo. –respondió Harry preocupado y nervioso por la situación.

–Creo que deberíamos hacerle caso, Harry. Son demasiado fuertes para nosotros. –susurró Duska apenada por lo que iba a ocurrir.

–Black. –dijo Lucius sacando su varita.

La batalla siguió y Harry junto con Sirius se enfrentaron a Lucius y a otro mortífago. Duska luchó contra un mortífago que se acercó donde estaban escondido el resto de sus amigos, Hermione le sonrió agradecida cuando otro mortífago empujó a Duska contra el suelo haciendo que soltara su varita.

–¡Duska! –gritó Hermione asustada.

–¿Tienes miedo, Malfoy? –preguntó el mortífago con una sonrisa a la vez que le apuntaba con su varita. –Le haré un favor a tu padre y acabaré contigo.

–Me gustaría verte intentándolo –Duska sonrió con malicia.

Ante la mirada perpleja de sus amigos, Duska se transformó en un humo blanco y comenzó a volar por el lugar, el mortífago la imitó pero con la diferencia de que su humo negro. Ambos comenzaron a luchar en el aire hasta que Duska se libró de él y regresó a su forma física para coger la varita.

–Ya te tengo, Duska Malfoy. –sonrió con arrogancia.

–Yo creo que no. ¡Avada Kedavra! –pronunció Duska con claridad.

Una luz verde salió de la varita de Duska golpeando al mortífago, este la miró aterrorizado al igual que otros mortífagos que se detuvieron al ver aquello. Aquel seguidor de Voldemort se desintegró en un humo negro, dejando a todos con la boca abierta.

–¡Sirius! –gritó Harry angustiado.

Todos se giraron para ver como Sirius había sido víctima del Avada Kedavra de Bellatrix y poco a poco desapareció sin dejar nada. Harry se enfureció e intentó ir detrás de Bellatrix, Ron le detuvo pero el azabache consiguió liberarse de su agarre y salió corriendo, Duska miró a sus amigos antes de ir tras Harry.

–¡Harry, espera! –gritó Duska corriendo detrás de él.

–¡Crucio! –gritó Harry dándole a Bellatrix e ignorando a su amiga.

Antes de que pudiera lanzarle otro hechizo Voldemort apareció ante ellos, ambos intentaron atacarle pero les tiraron las varitas al suelo mientras Voldemort se burlada de lo débil que había sido Harry. Duska iba a hablar cuando de una de las chimeneas se encendió mostrando a Dumbledore, ambos sonrieron aliviados mientras que Voldemort borró su sonrisa.

–Ha sido una imprudencia venir hoy aquí, Tom. –dijo Dumbledore caminando hacia sus estudiantes. –Los aurores están en camino.

–Cuando lleguen yo me habré ido, y tú estarás muerto.

Dumbledore empujó a sus alumnos lejos del enfrentamiento y Bellatrix aprovechó para marcharse por una de las chimeneas, no sin antes alzarle un pulgar a Duska. Harry y Duska observaban como su director se enfrentaba a Voldemort, era una pelea casi igualada y ninguno de los dos cedía ante el otro.

–¡Vamos Dumbledore, vence al calvo sin nariz! –gritó Duska más emocionada que asustada.

Voldemort lanzó una llamarada de fuego creando una gran serpiente de fuego, Dumbledore retrocedió y Duska se interpuso entre medio de ambos, dejando a Dumbledore y Voldemort confundidos. Duska sonrió y usando sus poderes de fuego creó un fénix del mismo tamaño que la serpiente. Ambos comenzaron a luchar hasta que el fénix que creó Duska ganó, Dumbledore aprovechó que Voldemort observaba sorprendido a su alumna para manipular el agua que había en la sala.

¡No soy cómo ellos! (chicaxchica)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora