¡No soy cómo ellos! (chicaxchica)

Capítulo 10 (Final)

6 años después

Hoy era el cumpleaños de los gemelos, ambos por fin cumplirían once años, lo que significaba que su carta para Hogwarts estaba a punto de llegar. Minerva se despertó emocionada y no dudó en ir a la habitación de su hermano para despertarlo de una forma no muy agradable.

–¡Hermano! –gritó Minerva sacudiendo a Fred, haciendo que él se despertara asustado.

–¿Min? ¿Qué te pasa? –preguntó tranquilizándose del susto de su hermana.

–Hoy es el día. –comentó emocionada. –Hoy cumplimos once años, y puede que nuestra carta llegue. ¿No es emocionante?

–Lo es. Pero sólo son las seis de la mañana, vuelve a dormir. –pidió Fred intentando conciliar el sueño.

–No puedo, estoy demasiado emocionada. –dijo Minerva viendo como su hermano volvía a dormirse, entonces sonrió ante la idea que había tenido. –Ya sé, despertaré a mamá y a mami.

–¿Qué? –Fred se incorporó al escuchar la idea. –Ya no tienes cinco años para despertarlas así, es mejor esperar a que sea más tarde y....

Fred observó como su hermana abandonaba su habitación con una sonrisa maliciosa, se preocupó por que despertara a sus madres ya que ellas habían tenido mucho trabajo últimamente y sabía que necesitaban dormir. Salió de la cama con rapidez para intentar detener a su hermana, pero no llegó a tiempo.

–¡Bomba! –gritó Minerva lanzándose encima de Duska.

–¡Ahh! –chilló Duska asustada y haciendo que Hermione se despertara sobresaltada. –¿Pero qué? ¿Minnie?

–Buenos días. –sonrió su hija con una sonrisa inocente. –Hoy en nuestro onceavo cumpleaños.

–Lo recuerdo. –murmuró Duska adormilada.

–Lo siento mamá, he intentado detenerla.

–No pasa nada, supongo que algunas cosas nunca cambian. –sonrió Hermione saludando a sus hijos.

Fred finalmente se unió al abrazo familiar en la cama de sus madres hasta que él y su hermana se marcharon a sus habitaciones para ducharse, algo que también hicieron sus madres. Al vestirse con la ropa adecuada fueron a la cocina para desayunar los cuatro juntos hasta que llamaron a la puerta, Fred se levantó para abrir mientras el resto de su familia recogía el desayuno.

–¡Tío Harry! ¡Tía Ginny! –exclamó Fred contento de verlos.

–¿Qué tal estás? –preguntó Ginny. –Felicidades, chico. Ya eres un año más mayor.

–Gracias.

–Primo. –llamó James entrando con una sonrisa. –¿Te llegó la carta?

–Aún no. –comentó Fred con una sonrisa.

–Yo no sé a que espera mamá para dárnosla. –se quejó Minerva cruzándose de brazos y mirando a Duska.

–Te llegará en su momento. No puedo hacer milagros.

–Pero eres la Directora. –se quejó Minerva haciendo que su hermano y su primo se rieran. –No es gracioso. Quiero ir a Hogwarts y explorarlo.

–Lo harás, cuando llegue tu carta. –dijo Hermione con una sonrisa.

–Maldita carta.

Sin que se dieran cuenta las horas pasaron y todos sus familiares más cercanos se encontraban en la casa de Hermione y Duska para celebrar el cumpleaños de los gemelos. Ellos jugaban con sus primos en el patio mientras los adultos charlaban sobre algunos temas de trabajo y sobre planificar un viaje en familia.