¡Quiereme!

Capitulo 13

Los rayos del sol se filtran a través las cortinas de mi habitación, me remuevo entre las cobijas, no queriendo despertar, pero el deber me llama ¡ un momento! ¿rayos de sol? ¿que hora es?.

Ok en verdad yo no poseo las mejores ideas, lo peor que pude haber hecho es girar para ver el despertador y llevarme el susto de mi vida, ¡Dios santo! 8:15 AM., se supone que ha esta hora ya debo estar en la oficina, exactamente hace casi una hora, como loca brinco de la cama al suelo, para solo terminar con la cara estrellada en el suelo gracias a que las sabanas me jugaron la trastada de enredarse en mis pies, GENIAL, noten el sarcasmo, ¡¿que mas me puede pasar ahora?! Corro a la ducha y en el proceso me voy quitando el pijama para lanzarlo a alguna parte del cuarto de baño cuando regrese lo pondré en su sitio. Entro a la ducha y abro inmediatamente la llave y... Aaaaaaaa!!!!! esta horriblemente fría, por mas que abro la llave del agua caliente no sale ¿Qué rayos pasa, por que no hay agua caliente?. Ahs si no me queda de otra me tendré que bañar asi

15 minutos mas tarde...

Salgo tiritando de frio, poco me falta para parecerme a Leonardo DiCaprio en Titanic, salgo envuelta en mi bata de baño con la típica toalla en la cabeza, y me dirijo a mi armario, hoy no tengo tiempo de elegir un buen oufit asi que tomo lo primero que veo y es un vestido negro recto que se amolda a mi figura, lo complemento con un blazer en color salmón y unas zapatillas color nut tomo mi bolso que ese siempre esta en su lugar y con todo lo necesario, ahora si ni tiempo de coger algo de comida ya comprare mas tarde algo para comer. Veo mi reloj de mano y son 8:45, no me quedara mas remedio que tomar taxi hasta la empresa, si espero el bus llegare pasada de las diez de la mañana.

Por suerte veo un taxi y corro - Por favor a empresas Lovejoy - digo en cuanto subo a la parte trasera del vehículo, ni siquiera el buenos días doy - lo siento voy muy retrasada al trabajo.

-Descuide, a todos nos puede llegar a pasar.

Llegamos bastante rápido y es que a las nueve de la mañana el embotellamiento ya ha pasado, todos a esta hora están en sus oficinas trabajando, como yo debería estar haciendo en este instante.

-¿Cuanto es? -pregunto amablemente al señor mientras saco mi cartera del bolso.

-Son $5 dólares señorita - le tiendo el billete al señor y bajo corriendo al edificio, rogando que mi jefe no haya llegado aun, y no me refiero a Jacob precisamente, pero conociéndolo el esta en la oficina a primera hora de la mañana, y de seguro ya me esta esperando para darme la regañada de mi vida además con mi finiquito, y no, no creo que ni siquiera una carta de recomendación, es mas va a llamar a todas las empresas del área para decirles que soy una irresponsable e impuntual que no puede cumplir ni siquiera con un bendito horario laboral y tendré que trabajar como camarera en algún restaurante o peor aun mendigar en las calles por que nadie me dará trabajo debido a que no hay carta de recomendación y luego...ok creo estoy exagerando demasiado pero en verdad Cristóbal Lovejoy podrá ser un hombre guapo y mi amor secreto pero es en verdad el mismo polo norte y sur juntos en una sola persona. Sebastián de recursos humanos le llama Iceman. Justo cuando paso por recepción me encuentro a Priscila, la recepcionista, es una lagartona de primera además de tener un cuerpo 80% silicona y un 20% carne humana y de creerse la rosita fresita de la empresa o la ultima Coca- Cola del planeta.

-No puedo creerlo Evelyn Rivera llegando tarde, ¡que dirá el jefe cuando se entere!, de seguro te pone de patitas en la calle asi yo podre ascender a tu puesto - Ash duro con lo mismo, cuando entre a trabajar ella tambien solicitaba mi puesto, pero en verdad que no era demasiado apta, con mucho esfuerzo y logra contestar el teléfono y escribir recaditos. En verdad me hizo la vida de a cuadritos los primeros seis meses. Hasta que aprendí a contestarle Es una buena para nada. - Pobrecita.