Diario capitulo- 46

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Me quedé en plan "Me estás tomando el pelo" pero su cara no mostraba ningún signo de que lo hiciera.
Lo primero que pensé es ¿Cómo podría ayudar? No tenía el carácter valiente de Britt y mucho menos sabia dar una patada sin romperme una pierna en el intento.
Le supliqué con la mirada para que interviniera y dijera algo tipo "No es buena idea" pero esa esperanza se desvaneció cuando se quedó callada y tan solo asintió levemente.

–Yo... no...puedo —tartamudee incomoda ante dos pares de ojos que me observaban detenidamente. Realmente me sentí muy mal por ser tan cobarde cuando ellos se estaban jugando todo para hacer justicia. Estaba en mis manos que mi familia y mis amigos dejarán de correr peligro, así que decidí no darle más vueltas al asunto e inhale profundamente antes de proseguir— ¿Qué tengo qué hacer?

–En principio vas a recibir unas clases de defensa personal —me respondió Jhon acercándose al escritorio y abriendo uno de los cajones para sacar una cajita blanca— te informaré de cada paso a través de este teléfono el cual nadie debe saber que existe o tendríamos problemas con...

–Lo que quiere decir este idiota es que estamos solos hasta que tengamos suficientes pruebas, por lo tanto, nadie nos respalda ¿Entiendes? —le interrumpió Britt haciendo comillas con los dedos.

La reunión terminó unos segundos más tarde, cuando él recibió una llamada y tras disculparse con nosotras se fue corriendo.
Al salir de allí nos subimos al coche y antes de arrancar, Britt apretó las manos en el volante con la mirada perdida y la respiración acelerada. Algo dentro de mí me decía que le preocupaba esa situación, pero a mí no solo me preocupaba, sino que me aterraba por no saber si había hecho lo correcto en aceptar.
El trayecto hasta mi casa lo hicimos en completo silencio. Por primera vez no me sentía incómoda, más bien todo lo contrario, ya que primero necesitaba descansar y asimilar la decisión tan descabellada que acababa de tomar.

–En la agenda tienes mi número y el de Jhon —comentó Britt sacándome de mis pensamientos— recuerda de mantenerlo solo en vibración y llevarlo siempre encima.

–Oye ¿Nunca has pensado en ser policía? —le pregunté cambiando de tema, aun sabiendo que posiblemente me evadiría, sin embargo, negó con la cabeza sin mirarme.

–Esto es algo personal —su respuesta tajante me dio a entender que la conversación había concluido.

Aparcó frente de mi casa y me despedí de ella gesticulando con la mano mientras abría la puerta escuchando de nuevo el chirrido, del cual ya me estaba empezando a acostumbrar.
Al llegar a casa, Karen estaba durmiendo espatarrada en el sofá con la televisión puesta a todo volumen. El olor a alcohol era tan insoportable que fui abrir un poco la ventana y bajé el volumen, antes de encerrarme en mi habitación. Me tiré literalmente en la cama sin quitarme la ropa y bastó unos minutos para quedarme profundamente dormida.

Unos golpes en la puerta acompañado de un gritó ensordecedor me despertaron. Y si, para Karen esa era la manera más tranquila de despertarme, porque de normal solía tirarse encima de mi haciéndome un placaje en toda regla.

–¡Levanta dormilona! —canturreó al cubrirme la cabeza con la almohada— vi a Jael cerca de una cafetería al rato de irme ¿Dónde fuiste? Me tenías preocupada.

–Déjame dormir —le rogué con la voz ronca— luego te lo contaré.

Una vez me despertaban era imposible conciliar el sueño de nuevo, pero tenía que ganar tiempo y pensar en una excusa sobre dónde había estado y con quién. Era mi mejor amiga y no me gustaba ocultarle las cosas, sin embargo, tampoco podía traicionar la confianza que habían depositado en mí.
Entre nosotras no había secretos y eso me carcomía por dentro. Nuestra amistad era tan fuerte que ni siquiera cuando se fue un tiempo a estudiar fuera perdimos el contacto y eso jamás me había pasado con otra persona.
A medida que vas creciendo las personas cambian y las relaciones se enfrían, pero en cambio con ella no. Cada vez que nos reuníamos era como si jamás nos hubiésemos separado.

Juego Peligroso (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora