La Bella y el Tsundere {Bakugo Katsuki}

Capítulo 17

-No entiendo - dijo Bakugo revolviéndose el cabello en la biblioteca, ____ lo miraba durante algunos momentos mientras el chico se esforzaba por aprender solo. – Exámenes de mierda

-Quieres que te ayude. – el chico negó con la cabeza, orgulloso, ___ se encogió de hombros con una sonrisa burlesca en el rostro. Bakugo la miró mal unos segundos y luego señaló la parte que no entendía. – Buen chico.

-Sólo explícame. – dijo el chico mirándola, ____ lo ayudó a estudiar, pero Bakugo no entendía nada en absoluto, así que tendrían que estudiar incluso fuera de la escuela, lo que era una excusa perfecta para ver a ____ más tiempo del normal. – Vamos a estudiar a mi casa.

-Bien, debo avisarle a papá. – dijo la chica con una sonrisa. Sacó su celular y comenzó a textear, antes de entrar al chat de su papá, en el lugar donde se podían ver los recientes, Bakugo alcanzó a divisar el chat de Todoroki, pero no alcanzó a ver qué decía. Ambos llegaron a la casa de Bakugo, no había nadie en casa. ____ miró hacia todos lados, allí había una foto de Bakugo pequeño. – Un Bakugo chiquito

-Es peligroso que me llames así si no hay nadie más en casa. – dijo el chico pasando de la nada su lengua por los labios de la chica, ____ se sonrojó mientras el chico se alejaba de ella con una media sonrisa. – Pero bueno, vinimos a estudiar ¿no?

-Exacto. – dijo la chica mirándolo mal. Ambos chicos se sentaron en la mesa del comedor y comenzaron a estudiar con un montón de libros, Bakugo era totalmente un cabeza dura, era muy difícil que le entraran las materias. Pero al final, logró enseñarle lo que le costaba hacer, y el chico soltó una gran explosión en sus manos como celebración. – Muy bien, eres genial, iré al baño, vuelvo enseguida.

-Está bien. – dijo el chico con una sonrisa. La chica cerró la puerta del baño y Bakugo soltó un gran suspiro. La chica dejó su teléfono sobre la mesa, desbloqueado, Bakugo lo miró sorprendido, pero luego desvió la mirada, ignorando la tentación. No lo mires, no lo mires. Bakugo miró los lobros nuevamente rogando porque ____ saliera pronto del baño, pero no salía nunca, el tiempo se hizo eterno. Bakugo comenzó a ordenar para distraerse, pero fue imposible no mirarlo al menos. Los chats estaban ahí, abiertos, Bakugo buscó inconscientemente con la mirada a Todoroki en el teléfono de la chica.

Todoroki: Nos vemos mañana >3<

-Que es ese emoticón - dijo el chico molesto mirándolo. La chica abrió la puerta del baño y Bakugo caminó hacia su habitación con los libros en los brazos. – Iré a dejar esto a mi cuarto, ya vuelvo.

-Si. – dijo la chica, Bakugo volvió, estaba en silencio, pero ella podía ver su rostro enojado en cierto modo. - ¿Pasa algo?

-No es nada. – dijo el chico sin mirarla y dirigiéndose a la cocina. - ¿Quieres té? ¿Algo para comer?

-Té está bien, gracias. – dijo la chica mirándolo desde lo lejos. Se levantó y se acercó al chico en la cocina. - ¿Por qué no me dices nada?

-¿Debería hacerlo? – preguntó el chico fríamente mientras ponía la tetera y preparaba las tazas para servir. – No tengo nada que decirte.

-Ah, ya veo. – dijo la chica confundida y dirigiéndose a su bolso. – Entonces me voy.

-Te quedas, porque ya me hiciste preparar te. – dijo el chico mirándola mal, la chica lo miró de igual forma. – Qué.

-QUE TE PASA. – Dijo la chica exasperada mirándolo mal, haciendo que el chico perdiera un poco su cordura. – RESPONDE, NO PUEDO SABER QUÉ TE PASA SI NO ME LO DICES.

-QUÉ CARAJOS ES ESE EMOTICON. – Dijo el chico molesto señalando su teléfono y mirándola mal. – POR QUÉ TE ENVÍA BESOS ESE PEDAZO DE MIERDA SÓLO SOY YO QUIEN TE PUEDE DAR BESOS.

-QUIÉN TE CREES QUE ERES, BAKUGO. – dijo la chica mirándola mal, el chico bufó y se volteó nuevamente hacia la tetera, la chica soltó un suspiro calmándose y comenzó a acercarse a la cocina, donde estaba él, la chica tomó el teléfono y sonrió al ver el emoticón que le había enviado Todoroki. – Ayer Todoroki me dio una carta de amor, Bakugo.

-QUÉ UN SEGUNDO ¿ME QUIERES CALMAR DICIÉNDOME ESO? – Dijo el chico molesto y bufando. – Maldita sea, ese hijo de puta de seguro escuchó lo que dije y ahora te quiere para él, ese bastardo

-Bakugo. – dijo la chica tocando su espalda con una sonrisa, el chico la miró mal, su cara estaba un poco sonrojada, ____ le sonrió enternecida. – No creo que estés celoso ¿o si?

-Por supuesto que si. – dijo el chico desviando la mirada, ____ se sorprendió ante la respuesta del chico y él sirvió el té en las tazas. – Por supuesto que lo estoy, yo te quiero sólo para mi.

-Bakugo. – dijo la chica tomando la barbilla del rubio y depositando un beso sobre ellos. El chico la miró sorprendido y la chica sonrió nerviosamente. – Te he dicho bakugo cuatro veces y no has hecho nada.

-Ahg - dijo el chico revolviendo su cabello, ____ lo miró unos segundos y él la miró con una media sonrisa y el rostro un poco sonrojado. – Realmente eres increíble, ya no quiero nada de té.

-Pero - el chico tomó la muñeca de ____ y la aprisionó contra la pared de su cocina para comenzar a besarla, la chica soltó un quejido al estrellarse contra la muralla, pero el chico la calló intensificando el beso en dos segundos. ____ tomó el cuello del chico mientras este la besaba intensamente. – Bakugo, para

-Si quieres que pare, no me digas Bakugo. – dijo el chico mirándola mal mientras volvía a lamer sus labios, ____ sonrió de lado. – Y no me beses así de la nada, ni pienses que puedo controlarme, porque no puedo.

-Bueno, si insistes, no lo haré. – dijo la chica sonriendo y girando la cabeza para otro lado, la chica dejó su cuello al descubierto, Bakugo la tomó desprevenida besándola en ese lugar. ___ se sobresaltó al sentir la electricidad recorriendo todo su cuerpo, el chico se separó casi de inmediato de ella y pasó una mano por su cabello un poco frustrado.

-Dios, no estamos en esa etapa. – dijo el chico llevando las tazas de té a la mesa. Ambos se sentaron, pero el rubio no podía dejar de mirarla, era como haber roto una pared y estar frente a ella, pero sin poder pasarla, sosteniéndose en su propia voluntad, bebió un sorbo de té. Ya no la podía ver sin pensar en cosas inapropiadas. _____ obviamente se daba cuenta de eso, y le gustaba verlo tratando de contenerse. – Qué me ves.

-¿Pasa algo? – preguntó la chica tomando té con gracia, el chico la miró mal. – ¿Bakugo?

-No me digas así. – dijo el chico golpeando la mesa. ____ soltó una pequeña risa. – Ya basta, estoy tratando de contenerme, así que si sigues provocándome simplemente me voy a soltar y eso ya no te va a parecer gracioso.

-Que intenso. – dijo la chica sonriendo y mirándolo, Bakugo negó con la cabeza, frustrado. ____ soltó nuevamente una risa, era incontenible. El chico se levantó de la silla y la levantó de un brazo, tomó su cintura y la besó nuevamente, de una manera muy intensa. – Bakugo

-Esto ya no te va a parecer gracioso. – dijo el chico aprisionándola pegada a su cuerpo, ____ estaba sintiendo nuevamente esas corrientes eléctricas por todo su cuerpo. Sin soltarla, Bakugo tomó las mochilas y llevó a ____, mientras la besaba, a su cuarto, la apoyó en el armario mientras la besaba, la chica sentía el cuerpo fibroso de Bakugo sobre ella, basó sus manos bajo la polera del chico, sintiendo los músculos de su espalda, el chico también hizo lo mismo, pasando sus manos por la espalda de la chica hasta llegar a sus hombros y presionándola contra él, ____ soltó un suspiro ahogado, el chico la empujó con fuerza hasta su cama y se quitó la polera.

-Katsuki

-Aunque me digas Katsuki - dijo el chico posicionándose sobre ella y besando su cuello. – Ya no podrás detener

-Katsuki, oye bastardo ¿estás en casa? – Ambos chicos se separaron de golpe al escuchar la puerta cerrándose, ____ se levantó despacio de la cama, pero entonces la puerta de la habitación se abrió, gracias a dios, ____ estaba vestida aún, la madre de Bakugo se largó a reír y Bakugo cerró de una explosión leve la puerta. – Lo siento, estaré en mi cuarto, par de tortolos.

-Te dejaré ir esta vez. – dijo el chico dándole un apasionado beso aún sin polera, ____ sonrió un poco nerviosa, Bakugo también rio un momento, y la miró divertido. – La próxima vez me aseguraré de hacer que viaje.