La tensión en la habitación fue evidente, Apolo observaba a su hijo con total seriedad, Yoongi pudo sentir entonces el miedo de Jimin, las manos de este temblabab ligeramente, reinaba el silencio sepulcral, ansiosos, esperaban la respuesta de aquel Dios. Una que no llegó de inmediato, porque los pasos apresurados y la voz femenina interrumpieron el momento.
—¡Jimin!
Una mujer de cabello azabache entró a la habitación, sus ojos estuvieron sobre Jimin en todo momento, corrió a rodearlo con sus brazos delgados, Jimin soltó el aire que tenía retenido y devolvió aquel gesto con afecto, alrededor se lleno de una tranquilidad. Vieron cómo Artemiza, abrazaba a Jimin, para después separarlo, lo tomó de las mejillas y le miró sonriente, sus ojos se encontraban brillantes, nadie supo si era debido a las lágrimas detenidas o a la felicidad de reencontrarse con su sobrino.
—Estas bien ¿Lo estás? —preguntó preocupada.
—L..lo estoy—asintió con labios temblorosos, un cúmulo de emociones cálidas llenó su interior, no sabía cuánto extrañaba su hogar hasta que estuvo nuevamente en el.
Artemiza asintió. —Estuvimos preocupados por ti—dijo cálidamente—. Por ustedes—llevó su vista a los demás chicos quienes le sonrieron y asintieron.
—¿Estuvieron? —preguntó Jimin inseguro.
La mujer asintió y se hizo a un lado, Jimin observó nuevamente a Apolo, quien esta vez no se quedó en su lugar, caminó derecho, con una postura firme hacía su hijo, este sintió miedo, esperaba una bofetada de su padre o alguna palabra de desprecio, pero en vez de eso, lo que obtuvo de aquel acercamiento fue un abrazo, uno que sorprendió por completo no sólo a Jimin, sino a quienes estaban en esa habitación.
—Estás aquí—susurró en si oreja.
Jimin salió de su confusión para abrazar con fuerza a su padre, ligeras lágrimas rodaban por sus mejillas, durante mucho tiempo creyó que su padre estaba molesto con él por la vida que había decidido vivir, por haber traicionado su confianza y llevar desventura al mundo humano, ellos nunca fueron capaces de hablar sobre lo sucedido cuando tuvo que ir al mundo humano por primera vez, sólo se despidieron, creyendo que sería su último contacto por lo que restaba de su vida mundana.
—Realmente te extrañé—rio entre sus brazos, terminando por mirarlo con una enorme sonrisa.
Apolo suspiró. —Has hecho que mi alma prenda de un hilo—se separó sosteniéndolo de los hombros—. Pero estás bien, Hades y yo estábamos muy preocupados—terminó mirando a los demás—. Pero están bien, allá arriba es una locura.
—Jimin ¿Y el bebé? —preguntó Artemiza mirando alrededor—. Quiero verlo.
Jimin se separó de su padre y se acercó a Yoongi quien al principio dudo un poco en querer mostrar a su hijo, sin embargo, no hubo tiempo de protestar, porque Jimin tomó al bebé de la canastilla que llevaba en la espalda, dejándole un sentimiento de ligereza y temor.
—Es hermoso—dijo Artemiza con una dulce sonrisa—. Parecido a ti.
Apolo observó al bebé con una tenue sonrisa. —Muy parecido a él, sería su viva copia si tuviese el cabello rubio.
—Yo creo que se parece a Yoongi—dijo Jimin observando a su hijo.
—No—soltó Apolo encogiéndose de hombros—. ¿Cuál es su nombre?
—Demian.
—Domador—susurró Apolo con una ceja alzada—. Nacido para someter a las fuerzas que vayan en contra de sí, acertado.
—Lamento interrumpir el momento dulce de la tarde—dijo Yugyeom conteniendo la risa—. Pero quisiéramos saber, Apolo ¿Amigo o Enemigo?
—Si fuera enemigo, no estarías vivo—le respondió tajante—. Es momento de hablar niños, se ha creado un gran problema y lamentablemente están incluidos.
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El Destino Del Olimpo (Yoonmin/Namjin/KookTae)
FanfictionSEGUNDA TEMPORADA DE HEREDEROS DEL OLIMPO Han pasado cinco años desde que los hijos de los dioses más poderosos del Olimpo dejaron su sangre divina para vivir como mortales. En el momento en donde disfrutaban de su libertad se dieron cuenta que ten...