ᴇsᴀ ᴇs ᴍɪ ᴄʜɪᴄᴀ | ᴊᴀᴄᴋ ᴄᴏɴᴡᴀʏ |

| Capítulo 16 |

-Se paciente Gustabo- Volkov era el único tranquilo aquí.

Por detrás de nosotros se escuchaban pasos de tacón, todos volteamos a ver y era la directora del CNI.

-Michelle, gracias por venir- Conway limitaba a decir poco cuando ya quería soltar todo.

Ella volvía a mirarme con cara de desagrado.

-Megan me alegra que sigas aquí- Ella miraba a Conway pensando que lo había dejalo claro.

-No seamos hipócritas Michelle, ni tu ni yo nos queremos ver ni mucho menos trabajar juntas- Me levanté de golpe acercandome a ella.
-No se te olvide con quien estas hablando- se acercaba a mi.

-¿Qué? ¿Sin el CNI no eres nada?- Las dos permanecían en una compostura lista para cualquier acción no deseada por los demás .

-Se abren las apuestas puercos- decía Gustabo levantándose del asiento pidiendo dinero.
-Apuesto 300 euros por Megan- Horacio le entregaba el dinero.
-Tu Volkov ¿Que piensas?- Gustabo se acercaba a el.
-Muy bien anormal- Conway empujaba a Gustabo donde está Horacio.
-Ustedes dos, luego pueden discutir- se ponía entre las dos creando una distancia más saludable.

Yo regresaba a mi lugar y Michelle a lado de Conway y Volkov.

-Bien, hemos estado investigando sobre esa mafia; se dice ver que por la mañana y tarde son unos mecánicos y por la noche trafican droga por toda la ciudad- caminaba por todo el despacho esperando respuestas.

Mis bellos se ponían de punta al escuchar que eran mecanicos.

-¿Mecanicos?- Empezaba a notarme nervisosa.
-Si escuchas bien- respondía frío.
-¿Tienes algunos nombres para identificar mejor?- Volvía a cuestionar.
-Por el momento sabemos que el jefe se llama Armando pero su nombre infiltrado es Nadando- Mis nervios terminaron por notarse completamente.
-Imposible- Todos los recuerdos que tenía con Armando venían a mi mente en millones de olas.
-¿Lo conoces verdad?- Gustabo empezó consumir la tranquilidad del entorno.
-Correcto- Conway dio la respuesta acertada, esperando al momento que yo afirmará.
-Si, yo llevo mi auto con el por años- Ponía mis manos en la nuca volteando al techo.
-Dios como no pude darme cuenta- cerraba los ojos sintiendo como las pisadas pesadas venían hacia mi.

-No tengo todo el tiempo, necesito que hables ya- se colocaba atrás de mí.
-¿Me permites procesar todo esto?- Abrí los ojos tomando el suficiente aire para tranquilizarme.
-Bien ¿Que es lo que sabes?- Volkov sacaba una libreta para anotar cualquier detalle.
-En realidad no se nada, pero el tiene varios meses desaparecido días, otros llega con moretes, deja a varías personas entrar a su oficina- Disponía hablar sintiendo que traicionaba la amistad con Armando.
-Si juntamos todas las piesas los días que el desaparece y los días que la mafia sale es oficialmente que sea el- decía Gustabo.
-Los mismos trabajadores podrían ser sus aliados- concluía Horacio.

-Bien, ustedes dos gilipollas van a seguir intentando infiltrarse- Conway daba indicaciones señalando a Gustabo y Horacio.
-De la misma manera que se querian infiltrar en mi vida ¿No es así?- los miraba con gracia.
-Yo no lo diría así Megan- Gustabo cambia de mirada.
-¿No? ¿Entonces como?- Conway volvía a ponerse entre nosotros dos.
-Guarden silencio gilipollas- su voz se esparcio por el despacho.

-Decia, Gustabo y Horacio estarán infiltrados en la mafia y tu...- notaba como me veía sin parpadear.

-Yo seguiré siendo yo, no me pondrás ni nombre clave y no me tendrás de perrito faldero- Me acercaba a el.
-Puedes hacer lo que se te de la puta gana pero aún así haras algo por mi y porqué yo lo digo- se acercaba a mi tratando de intimidar.
-Hasta que empieces a hacer amable puede que solo haga una cosa por ti- nadie se sentía intimidado.

Era estresante que chocar contra pared cuando conoces a una persona con la misma actitud que la tuya.

-¡Que reabran las apuestas señores!- Gustabo alzaba los brazos como si terminaba de hacer un truco de magia.
-¿Papi y Mami? Es difícil tomar la desicion- Horacio colmó la poca tranquilidad del espacio.

Megan y Conway volteaban al mismo tiempo bastante enojados.

-Es que de verdad que sois unos completos gilipollas anormales de mierda- Conway se alejaba de mí sacando la porra para golpear a Horacio.
-Espero y tenga cerca el marcapasos- Gustabo sugirió esperando el golpe de Conway.
-Ahora si- Conway levantaba el brazo pero algo impidió golpearlos.

Estaba yo frente a el mientras los dos niños de 5 años atras de mi esperando ser rescatados.
-Controla tus hormonas y vuelve a tu lugar, dejalos en paz- Quitaba la porra de la mano de Conway.
-¿Quien coño te crees tu para mandarme de esa manera?- se notaba su enojo.
-La misma persona que sacrifica su vida con 2 gilipollas más mientras tu diriges la vida de los demás escondiéndote detras de 4 paredes- estaba tan derecha como las palabras que decía.

Todo se volvió un silencio lo único que alcanzaba a aliviar el ambiente intenso era la radio, con millones de codigos tres.
Volkov salió la mayoría de los problemas respaldando al Superintendente.

Se tomó el tiempo suficiente para tranquilizarnos.

-Tu intentarás infiltrarte sin ser parte de la mafia y todo lo que digan tal cual me lo dirás- Conway termino el silencio.
-¿Donde queda la palabra por favor?- Volvía a crear el ambiente tenso.
-Que pesada tia- Michelle después de tanto se reincorporó a la conversación.
-¿Tienes algun problema?- Volteaba con ella lista para tener otra discusión.
-Basta, no me lo digas a mi pero a Volkov si- estaba ya cansado.
-Bien- Respondía seca como lo que sentía mi garganta necesitaba agua.
-Michelle mandarás a tus agentes a seguir investigando cualquier movimiento- habló y ella sólo asintio saliendo del despacho.
-Tienen ya muchos atracos por resolver no les pago por ser unos gilipollas- Horacio y Gustabo solo se pusieron de pie dirigiéndose a la salida.
-Papi y Mami harán el chaca chaca- Susurró  Horacio a su compañero recibiendo unas cuantas risas de Gustabo.

Estabamos solos ya, esperando quien iniciaba una conversación.

-Me tengo que ir- Caminaba en dirección a la salida.
-Espera- Pare en seco volteando esperando a que hablara.

-Pense que me amabas, dejala ir- El volvía a escuchar la voz.
Megan notaba como el luchaba por hablar mirando a la nada.
-¿Que pasa estas bien?- Megan se acercaba a el.
-Estoy bien, te puedes retirar- Conway sentía como su esposa muerta tiraba de el mientras Megan solo se acercaba cuando lo unico real era lo que Megan hacía.

Megan se retiró.

Conway empezaba a sofocarse.

-Pude ver como la mirabas- Julia entraba a su mente.
-La besaste, rompiste la promesa que no volverías a besar a nadie- el intentaba a hablar.
-Me decepcionas, comienzo a sentir como sientes cariño con ella- empezaba a ver oscuridad.

-Conway ¿Esta bien?- Volkov entraba al despacho.

Fue la mejor salvación notando que podía respirar bien y ya no escuchaba su voz.

-Si ¿Que tal con esos gilipollas?- Conway se reincorpora en su asiento tratando de sonar lo más tranquilo.

-Todos se encuentran empapelados y llegando a la federal- Volkov se encontraba nervioso y su compañero lo notó.
-Habla coño ¿Que te pasa?- Conway intentaba iniciar una conversación agregando confianza en ella.
-No me siento el mismo- Volkov comenzaba a confesarse.
-¿Desde?- Su voz ya se notaba preocupado.
-Que Horacio me dijo que le gustaba- terminó de confesarse.

Conway quedó perplejo, nunca se imaginó escuchar eso.

-Y no sabes si sientes lo mismo- Conway estaba mas confundido que el.
-Si y de la misma forma lo rechace, y siento algo de arrepentimiento con ello en haberlo rechazado- Volkov miraba el suelo, estaba realmente mal de no reconocer lo que siente.