ᴇsᴀ ᴇs ᴍɪ ᴄʜɪᴄᴀ | ᴊᴀᴄᴋ ᴄᴏɴᴡᴀʏ |

| Capítulo 43 |

Todos habían estado despiertos mayor parte de la noche; los cuerpos de los mortales salieron estables, permanecían en habitaciónes separadas.
El sueño era profundo y constantemente.

Volkov y Michelle estaban en la cafetería hablando de la guerra que estaba por venir.
Gustabo estaba con Megan.

Horacio estaba con Conway.

-Estas superando el record de la princesa que durmio por bastante tiempo, vuelve a mi y a los demás- Gustabo miraba su pasamontañas con tristeza, recordando quien le ayudo a escoger su nueva ropa, su nuevo futuro.
-Me cago en tus muertos- Se ponía de pie alzando la voz mirando el techo, respiraba profundamente ahorrando la ira e impotencia ante esta situación.
-Eres muy importante para mi, eres parte de mi familia, de la familia que nunca tuve, eres más como una hermana mayor eres como una madre- Volvía su mirada a ella sonriendo al ver como seguía durmiendo.
-Siempre daría todo por ver a Horacio feliz, llego Conway a ayudarme a guiarlo por el buen camino y tu a decorar de el- Tocaba su mano helada con una aguja en su vena.
-Estare para ti siempre- Megan abría lentamente los ojos sonriendo al escuchar las palabras de Gustabo.
-Madre mia- Soltaba Gustabo lanzándose a ella con un enorme abrazo.
-Tranquilo, estoy bien- Dejaba un pequeño beso en su frente.

-Conway, lo necesitamos aún con nosotros, extraño tanto sus porrazos- Horacio miraba por la ventana que dejaba ver la calle de palmeras y pocas flores.
-Tengo muchas cosas que amo admirar de usted, del hombre que es y la huella que deja en la vida de todos- Miraba su reflejo en la ventana, una cara triste y cansada.
-La familia siempre estará unida, usted es la clave para que todo estemos juntos- Terminaba mirando el suelo dejando caer una lagrima.

-La clave esta en todos nosotros- Una voz ronca hablo por la habitación.
-¡Abuelo!- Su expresión cambió por completo atrayendo la alegría.
-Basta, no estoy muerto gilipollas, no llores- Habló mirando como Horacio lo dejaba casi sin oxigeno por el enorme abrazo.
-Necesita un abrazo, vamos- susurro el de crestas cerrando los ojos tratando de disfrutar mejor.

Conway dejó de resistirse y acepto el abrazo peleando con sus emociones para no sonreír.

La comisaria volvía a la normalidad cuando el Superintendente se hacía presente en ella; los aliados de el hacían mejor su entrada de el querido ser inmortal.

-Habla ya coño.

-Horacio me habló, Conway ya despertó- Gustabo hablo mirando su movil escribiendo unas cuantas cosas.
-Vamos, tenemos trabajo que hacer- Comenzaba a quitarme todos los cables que tenía pegados a mi cuerpo.
-Horacio viene para aca, Volkov se quedo con el abuelo- Miraba afuera de la habitación esperando a ver a Horacio.

-Michelle ordeno el permiso para que los dos salieran en cuanto antes- entró Horacio a la habitación saludando con un abrazo.
-Perfecto- Respondía ya de pié estirando cada musculo que estaba tenso y frio.
-Violeta viene a revisarte, te traje ropa limpia- entregó una bolsa.

Los chicos amablemente esperaron afuera de la habitación hasta que yo este más presentable.
Los medicamentos que me habían resetado hicieron que el dolor disminuyera, era lo que menos me importaba.
Alguien estaba detrás de nosotros.

-Gracias- salia de la habitación despidiendose de Violeta.

Estabamos por entrar a la habitación de Conway, Horacio nos detuvo indicando con la mirada que escucharamos detrás de la puerta.
Por la pequeña ventana se veía como Conway acomodaba su corbata con su traje listo y Volkov negando lo que el decía.

Me negaba a escuchar pero sabía que era algo importante.

-Cuando yo no estaré aquí necesito que te encargues de ellos, que seas tu el nuevo Superintendente, que Megan se quede a cargo de ellos, que mantengan mi jerarquía estable- Conway miraba su reflejo en la gran ventana que señalaba la calle.
-No sé hasta donde tendré suerte, debí haber muerto hace tiempo- Conway permaneció callado.
-Soy una maquina de matar, Megan no debe de estar conmigo, ve todo lo que acaba de pasar, esto es solo contra mí- Volvía a mirar su reflejo.
-La suerte siempre estara de nuestro lado, estamos en esto juntos, Gustabo y Horacio juraron morir con usted si es necesario no dude que Megan lo hará- Volkov se cruzaba de brazos.