XXXIX

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Discreción.
No es explícito, pero hay contenido relacionado con violación.
Se puede saltar al siguiente capítulo.
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Despierto sobre una cama. Mis extremidades aún se encuentran sin fuerza, pero me reconforta un poco el darme cuenta de que mi ropa sigue intacta.

Miro a mi alrededor en busca de una forma de escapar, encontrando únicamente a Anthony sentado en una silla a un costado de mí.

—Me cansé de buscarte. Estuve años hundido en la desesperación, esperando alguna vez poder sentir lo que recorrió mi cuerpo al besarte... Y tú sólo quieres irte... ¿En realidad prefieres una vida solitaria que estar conmigo?

Coloco mi mano derecha en mi cabeza con lentitud mientras analizo lo que sale de su boca. Puedo sentir la frustración, el enojo y, sobre todo, la inmensa tristeza.

—No... Sólo... No puedo creer... Que en realidad te he encontrado.

Él bufa antes de levantarse de su asiento y acercarse a mí—. Aún semi inconsciente eres muy buena mintiendo —comenta mientras retira mi mano de mi rostro—. Pero sé cómo es besar a alguien que no siente algo por ti y creo que tú sabes cómo es besar a alguien sin sentir algo por esa persona.

Trago saliva, girando mi rostro en un intento fallido por escapar de su caricia.
—Podemos hablarlo.

—No —replica con firmeza en un tono sombrío que nunca imaginé que podría usar—. Eres mía, te guste o no.

Quisiera poder preguntarme cómo es que pude confiar en alguien que acabo de conocer, pero ese es el punto del estúpido contador. Me pregunto cuántas personas han pasado por esta situación y han callado al respecto para no arruinar el romanticismo que la sociedad refuerza continuamente.

Cierro los ojos al sentir su cuerpo sobre el mío, inmovilizándome por completo. Siento la calidez de sus labios viajar por mi cuello y no puedo evitar sentirme culpable. Anthony es mi alma gemela. Es lo menos que puedo hacer por él. Debería al menos intentarlo.

Sin embargo, no puedo aferrarme a esas ideas. Al escuchar la tela de mi vestido romperse debido a la poca resistencia que he podido ejercer, no me queda más que girar mi rostro y mantener mis ojos cerrados, deseando poder ingerir la droga que me ha dejado en este estado para no tener que experimentar lo que ocurrirá a continuación.

Siento sus manos recorrer mi cuerpo desnudo, pero un fuerte sonido lo hace detenerse.
Abro los ojos con la esperanza de que sea sólo un mal sueño. Sin embargo, la realidad golpea mi frágil mente.

Un hombre aleja a Anthony de mí sin mucha dificultad y lo golpea un par de veces.
Parpadeo varias veces para tratar de incorporarme por completo, puesto que aún no puedo registrar todo lo que está ocurriendo. Subo mis bragas lo más rápido que puedo para posteriormente cubrir el resto de mi cuerpo con la tela desgarrada de lo que alguna vez fue un lindo vestido con hortensias.

—Ponte esto. —Su voz delata de inmediato la identidad del hombre que me ofrece su larga chamarra sin mirar en mi dirección.

Sin dudarlo, hago lo que pide y le indico cuando mi cuerpo está cubierto de nuevo.
Zacky asiente antes de girar su rostro hacia mí. Hay culpa en sus pupilas esmeraldas, pero no tengo la energía para cuestionarle. Sólo agradezco que haya roto su promesa para ayudarme. Me pregunto si sabía que estaba en peligro.

—Ven —dice, inclinándose para levantarme de la cama, cargándome entre sus brazos.

Las lágrimas caen por mis mejillas al ver de reojo a Anthony inconsciente en el piso. No porque me sienta mal por él, sino por la impotencia que ha crecido exponencialmente desde nuestro primer beso.

Recargo mi frente en el hombro de Baker, escondiendo mi rostro en su camisa y dejando que su esencia inunde mis pulmones mientras me lleva a un lugar seguro.

Soulmate | Zacky V ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora