XL

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Despierto nuevamente sobre una cama. A pesar de que esta vez sé donde estoy, el miedo inunda mi cuerpo hasta que mis ojos encuentran los de Zacky.

El arrepentimiento es claro en su mirada, aunque no entiendo por qué. Yo sola me metí en este problema. Lo que él ha hecho es llevarme al hospital y traerme a la que alguna vez fue nuestra casa para descansar y seguir las indicaciones médicas.

Aún me siento sin energía, pero hago lo posible por sentarme sobre el colchón.

Baker se levanta de su silla, acomodando las almohadas detrás de mí para que pueda recargarme en ellas.

—Gracias —repito por enésima vez, sintiendo mi boca bastante seca en el proceso.

Tomo el agua tibia que me ofrece en una taza y bebo con tranquilidad, resistiendo las ganas de seguir agradeciéndole.

—¿Cómo te sientes? ¿Tienes hambre? —pregunta antes de sentarse en la cama frente a mí.

—No. Sólo estoy cansada —admito sin querer darle muchas vueltas a la pregunta. En realidad, me siento furiosa, decepcionada, confundida, culpable...

—Debes quedarte en cama al menos un día. Aún no sabemos qué drogas utilizó ese bastardo en ti, así que dime si necesitas ir al doctor.

Niego con la cabeza, manteniendo mis ojos fijos en mi acompañante para evitar que los recuerdos nublen mi presente.

—Sí, no te preocupes. Estoy bien —confirmo con una débil sonrisa. Bebo un sorbo más de mi agua y disfruto de su sabor inexistente en mi boca.

—Nat. —Zacky coloca su mano sobre mi tobillo, el cual está cubierto por un par de cobijas—. Lamento haberte dejado, yo...

—Fue mi culpa. Yo decidí irme con él. —Me cuesta decirlo, pero es la verdad. Sin duda alguna, ha sido la peor decisión de mi vida.

—Sí, pero debí decirte sobre Vanessa, sobre mi contador... Sobre muchas cosas.

Lo miro con intriga. Quisiera que me explicara más a detalle de qué habla, pero siento que no puedo digerir la información todavía. Debo recuperarme un poco más.

—Sólo quisiera descansar por ahora.

Él junta sus labios hasta formar una delgada línea—. De acuerdo, pero debes comer un poco.

Aunque no tengo apetito, acepto la condición. Baker sale de mi habitación y tarda tan sólo unos minutos en regresar con un plato con sopa caliente.
Si peguntarme al respecto, se sienta junto a mí y comienza a revolver lentamente la sopa con una cuchara, enfriándola un poco antes de acercar la cuchara a mis labios.

Doy todo de mí por dejar el plato vacío porque sé que es la única forma en la que Zacky me dejará dormir nuevamente.

Él está por irse nuevamente, pero lo detengo al tomar su cálida mano.
—Por favor, no te vayas de nuevo. —Espero que entienda que no le estoy pidiendo que se quede para siempre en esta habitación en específico—. Al menos, no te vayas hoy.

Baker deja el Plato vacío sobre la mesa de noche antes de girar su torso hacia mí, extendiendo su brazo como una oferta silenciosa para que me acomode en su regazo.

Escucho los latidos de su corazón sobre la tela que separa su piel de la mía y me doy cuenta de que su melodía no trae paz a mi mente, sino que crea un suave remolino de emociones que me inquieta de una forma positiva.

—No me iré —afirma. Aunque ya ha roto una promesa antes, le creo por completo.

Soulmate | Zacky V ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora