La lengua de Massimo explora mi boca de forma experta. No sé cuánto tiempo llevamos así, siento su enorme erección a la altura de mi vientre. Me tiene atrapada contra su cuerpo estoy temblando de deseo. No esperé que algo así sucediera esta noche.
—Eres una delicia, tu boca me vuelve loco —Pasa su lengua por mis labios reafirmando sus palabras.
Me siento tan agitada que tal parece que he corrido una maratón. Lleva sus manos a mi trasero y lo aprieta ciñéndome aún más contra él.
—Si no tuviera que irme dentro de un rato a atender un asunto importante, tú y yo nos largábamos de aquí para estar solos y poder hacer realidad cada fantasía que tengo con tu cuerpo.
« ¿Se marcha? »El deseo se esfuma de un plumazo como si me hubiesen arrojado un cubo de agua fría. Trato de desprenderme de él pero no me lo permite.
—¿Me sueltas por favor?
—Le miro con enfado.Ni yo misma se por qué me siento tan molesta, al final solo nos hemos besado. Pero lo cierto es que me siento cómo usada. Lo cual es una locura, quizás que se marche ahora sea lo mejor, porque si me siento así porque se vaya después de darme unos besos. ¿Cómo me sentiría si lo hiciera luego de acostarnos?
—Tengo que bajar, Silvano y María se deben estar preguntando dónde estoy.
—murmuro aún tratando sin éxito de soltarme de su agarre.—Examina mi rostro cómo si tratara de descifrar que me pasa.
—Que me tenga que ir ahora no quiere decir que no te desee cómo un demente,
que no me muera por estar dentro de ti. Dacché ti vi sto come affascinato«Desde que te vi estoy como hechizado».
—Esto es una locura Massimo, tú solo buscas sexo cosa que a mi me parece bien, es tu vida y estoy segura de que tienes miles de mujeres que están dispuestas para ti. Pero yo ahora quiero centrarme en mi carrera y por más que lo intentara no me sentiría cómoda con esto.
La melodía de su móvil detiene sus próximas palabras. Lo saca de su bolsillo mira a la pantalla frunciendo el ceño, rechaza la llamada y lo devuelve al lugar de antes.
—Ahora mismo no tengo tiempo para conversar de esto detenidamente y mañana salgo hacia París por negocios, pero cuando regrese la semana que viene tu y yo hablaremos de esto.
—Yo no creo que haya nada que hablar. Lo mejor es que olvide...
No puedo terminar la frase, me agarra por las caderas y me pega a su duro cuerpo. Su mirada se vuelve obscena y embriagadora.—Te deseo Mariana y ahora que he probado tus labios y lo dulces que son , no voy a renunciar a probar el resto de tu cuerpo. —Me da un beso duro y castigador luego me suelta marchándose sin mirar atrás.
¿Pero quién se cree que es? Mi interior bulle cómo un volcán a punto de entrar en erupción. Imbécil prepotente ¿Piensa que tiene la última palabra?
Te vas a quedar con las malditas ganas Massimo Salvatore.Me quedo un rato tratando de calmarme antes de bajar al jardín. Tenía las emociones a flor de piel. Nada más poner un pié en el césped María se apresura hacia mí.
—¡Mariana! Llevo un rato buscándote, necesito hablar contigo.
—Estaba en la terraza del techo. Vaya maravilla tienen ustedes ahí.
— Entrelaza su brazo con el mío.—Sí, es mi lugar favorito para pensar y desconectar.
—¿De qué quieres hablar conmigo? —Pregunto con una sonrisa.
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Bajo Fuego ® (Primer libro de la trilogía Collision)
Romance🌸 Mariana, Chef ejecutiva. Una mujer que ha luchado con uñas y dientes por llegar a donde está. Exótica, hermosa, valiente y decidida. Siente su mundo tambalearse cuándo el primer día que llega a la ciudad de Roma, para continuar cumpliendo sus sue...