EUPHORIA |KTH & JJK|

열 둘

"Cupid's demanding back his arrow"

No importaba lo mucho que se estaba esforzando Taehyung para evitar que ambos se mojaran, intentando en vano cubrirlos a ambos con el paraguas porque nuevamente se veía batallando con el utensilio, hasta que Jungkook se lo quitó de las manos y prácticamente lo empujó a través del agua.

Pelear con un paraguas solo los estaba haciendo perder tiempo, y Jungkook no era ningún aficionado de mojarse en aquella tempestad que partía el cielo.

—¿Por qué tenías que estacionarte tan lejos?—Suspiró Jungkook tras cerrar la puerta de copiloto, sacudiendo su cabello y dejando gotas por todo alrededor, al igual que el alfa.

La gabardina del mayor se sentía pesada después de absorber las gotas de lluvia que había caído sobre él, por lo que tuvo que quitarla y arrojarla al asiento de atrás.

La camisa que llevaba debajo se pegaba a su cuerpo, moldeando su figura firme y delgada. Jungkook tuvo que mirar hacia enfrente con las mejillas sonrojadas.

Sólo tenía que sobrevivir al auto en viaje, era lo único que tenía que hacer.

Pero las ansias de venganza lo estaban carcomiendo por dentro, porque el alfa si había podido tocarlo sobre su pantalón tan descaradamente que incluso Jimin se percató de ello y dejando a Jungkook con una erección que dolía, aunque ya se hubiera calmado después del baño helado que ambos acababan de tomar.

Porque no sería justo, ¿No?

Que lo tocara tan descaradamente y pensara que iba a salir ileso.

Taehyung puso el auto en marcha, y a pesar de que lo ocurrido en el café le haría estar sobre Jungkook tan pronto como ellos se encontraran solos, estaba más preocupado por la tormenta, pues no podía ver absolutamente nada y el riesgo de choque era peligrosamente alto.

Quería llevar al omega a salvo a su casa y eso era más relevante que...otra cosa.

Pero debía saber que Jungkook no se quedaba de brazos cruzados cuando se le atizaba y Taehyung ingenuamente creyó que estaría bien o que lo ignoraría, pero saltó en su asiento con el omega se inclinó hacia él, rozando su oreja.

—Sigue conduciendo.

¿Y el Jungkook furioso?

En el mismo sitio donde el Taehyung que dijo "no volverá a suceder" se encontraba: Escondidos y sin ningún afán de salir.

Porque la tentación era demasiado grande para ambos, no se podía contener con la manera en la que Jungkook había lucido tan angelical ni con la mirada profunda de Taehyung.

Ambos sabían como terminarían sin siquiera haber empezado.

La mano del omega comenzó a imitar los movimientos que Taehyung había hecho en el café, con un tacto suave al principio y muy apenas rozando las puntas de sus dedos contra la tela húmeda, pero al ver el cuerpo del alfa tensarse bajo su tacto, se volvió más atrevido.

Entre más señales mostraba el mayor en agitarse bajo sus dedos traviesos, Jungkook se acercaba y presionaba sus manos frías contra la tela, enviando escalofríos en la columna del alfa.

Era una tortura que lo estuviera tocando de aquella manera, suspirando en su oído mientras su lobo rogaba por  detener el auto y lo tomara entre sus brazos, que lo sometiera contra su asiento para juntar sus labios con los de él, ambos tan necesitados del tacto como si fuera respiración.

Y Taehyung obedeció a sus instintos.

Detuvo el auto en el primer lugar que vió y tan pronto como su auto dejó de andar, tomó la muñeca del omega que lo acariciaba y lo jaló hacia él, uniendo sus bocas en un beso apasionado y necesitado.