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19

Se dirigió lentamente hacia la cama, observando como a cada paso, Harry trataba de ocultarse más entre la sábanas. Cuando estuvo frente al menor se sentó al borde de la cama, colocando su mano sobre el delgado hombro del niño, quien aun sabiendo de quien se trataba, no pudo evitar sobresaltarse, hecho que no pasó desapercibido para el mayor.

-Harry, es momento de levantarse - dijo, fingiendo que no había notado su pequeño engaño. El menor abrió los ojos inmediatamente, aún con los lentes puesto mientras la sábana quedaba justo por debajo de su naricita   - Buenos días - como respuesta en niño saco una de sus manitas por el borde de la sábana para mover sus dedos a forma de saludo.

- ¿Cómo te sientes? - le preguntó Severus, sabía que probablemente no obtendría una respuesta verbal, pero se negaba a tratar al niño como si fuera físicamente incapaz de hablar y tampoco pensaba dar por hecho que era un caso perdido intentarlo, intentaría que se sintiera lo más cómodo posible para que cuando se sintiera listo fuera capaz de expresarse, por supuesto que tampoco estaba en sus planes presionarlo.

Por su parte Harry no sabía como responder, la verdad era que su cabeza dolía un poco, al igual que su brazo, donde la madre lo había sujetado, pero sus tíos decían que estaba mal quejarse, que los niños grandes tenían que aguantar el dolor sin llorar y sin molestar a los adultos por cosas sin importancia, sobretodo cuando no era de la familia, el había aprendido eso después de que una de las profesoras que kínder le preguntara sobre uno de los moretones que tenía es su muñeca, estaba de más decir que a su tío no le había hecho gracia ser llamado a la dirección.  Así que, sin sentirse lo suficiente seguro para hablar, pensando que eso podría hacer enojar al señor Severus, termino por encogerse de hombros.

- ¿Te duele algo? - preguntó el mayor, notando el entrecejo ligeramente fruncido del niño. Harry negó rápidamente con la cabeza, cosa que solo logró aumentar el dolor, sin embargo no quería crear más problemas, ademas el dolor no era tan fuerte, así que podía intentar soportarlo. Severus se limitó a soltar un suspiro, no creía al niño y se repitió mentalmente que debía de tener paciencia, no estaría de más darle alguna poción para el dolor después del desayuno, sin embargo tenía unas cuántas cosas que mencionar antes.

- Probablemente tengas un par de dudas sobre el porqué no estás en el orfanato. El señor Abner nos llamó a Albus y a mi para informarnos que te habías enfermado, así que fuimos a verte, consideramos que lo mejor sería adelantar el que vinieras a vivir aquí, a mi casa, se que probablemente sea un gran cambio para ti, así que espero que si algo te hace sentir mal o incómodo, por mínimo que sea, me lo comuniques Harry o si te sientes con mayor confianza, también se lo puedes decir a Albus ¿Esta bien? - el niño le dio un pequeño asentimiento con la cabeza, a pesar de no entender muy bien lo que estaba pasando, ¿Porqué querría saber si algo estaba mal?, de todas formas el estaba seguro de que no se lo diría, no quería que el señor Severus pensara que no agradecía lo que estaba haciendo, ademas, ¿y si el decía algo y se daba cuenta que cuidarlo era mucho trabajo y decidía que lo mejor era regresarlo al orfanato o con sus tíos ? El simple pensamiento lo hizo sentir triste, el no quería regresar ahí.

Severus se limitó a observar las reacciones del menor, vio como titubeaba antes de responder para después perderse en sus pensamientos, sus ojos ligeramente brillosos. Estaba por realizar una última pregunta cuando escucho un ruido ... mismo que evidenció que era hora de ir a desayunar, no pudo evitar que sus labios se elevaran ligeramente ante la respuesta del menor, cuyas mejillas habían adoptado un tono rojizo y había llevado sus manitas al estómago, como si eso fuera a evitar la salida de el sonido. Sabía que el niño no estaba del todo recuperado, pero tampoco le parecía adecuando dejarlo todo el día en esa habitación, le vendía bien caminar un poco, no es como si no se uniera parado previamente al final de cuentas.

- Algo más ... gracias por el cobertor Harry, ha sido muy amable de tu parte, estoy seguro que sin eso habría pescado un resfriado, aquí las noches suelen ser bastante frías - no era muy común que el agradeciera, sobretodo por algo que el mismo no había pedido, sin embargo estaba seguro que un poco de refuerzo positivo no le vendía mal al niño, mismo que terminó por adquirir más de color en las mejillas mientras intentaba cubrirse un poco más con las sábanas, no acostumbrado a ese trato - arriba, es momento de ir a desayunar - exclamó para después ponerse de pie.

Harry siguió la orden que el señor Severus le había dado, sintiendo un poco de frío cuando sus pies tocaron el suelo, fue ahí cuando recordó aquello que había estado cuidando para cuando el señor Severus regresara, el no sabía dónde estaba, su respiración se hizo un poco rápida al mismo tiempo que buscaba por todos lados el saco, no podía haberlo perdido, no recordaba habérselo quitado, como le diría al señor Severus que había fallado, el se había esforzado mucho por que la prenda regresar totalmente cuidada y ahora la había perdido, seguramente el mayor de enojaría con el, ¿Le pegaría como su tío Vernon? Comenzó a tener miedo, no sabía si el señor Severus pegaría igual de fuerte o si le gritaría, quería irse o esconderse, su visión se puso borrosa, ¿Se habría perdido el derecho a desayunar? Tenía que recordar que había pasado con el saco.

Severus observo la reacción del niño, quien buscaba algo desesperadamente, quiso golpearse al darse cuenta de que era, ¿cómo se le había pasado por alto? Se dirigió hacia donde había puesto el saco, tomándolo entre sus manos para después arrodillarse al menor intentando quedar a su misma altura.

- Supongo que esto es lo que buscabas, debo admitir que hiciste un buen trabajo, esta como nuevo - dijo, pasando por alto las manchas de tierra que el saco que en la parte inferior, que evidentemente eran resultado de que esa parte se arrastraba ocasionalmente cuando el niño había caminado, o lo arrugadas que estaban las mangas, pero Harry no tenía por que saber eso, ademas que después de ver ... el recuerdo de lo que había pasado, eso era lo mínimo que podía hacer - y mira lo que he encontrado. - dijo mientras sacaba de las bolsas el soldadito y la paleta - los ojos del niño inmediatamente se abrieron a su máximo y su boquita formó una pequeña "o", para posteriormente extender su mano y recoger tan preciados objetos.

Finalmente Severus se puso de pie, dejando el saco sobre la cama, mientras el niño se sentaba en el suelo para colocarse los zapatos, sin soltar ninguno de los dos objetos que le acababan de ser entregados, Severus se hizo una nota mental sobre la urgente necesidad de cómprale un par de zapatos decentes. En cuanto estuvo listo, harry se puso de pie y Severus le extendió una mano, fue un acto más bien realizado por inercia, y tras un momento de duda y desconfianza el menor tono su mano.

Harry no pudo evitar sentirse un poquito emocionado, ¡así era como los papás caminaban con sus hijos! El lo había visto cuando estaba en el patio arreglando el jardín, y su emoción no se vio opacado ni siquiera cuando tuvo que casi comenzar a correr para alcanzar los largos pasos del señor Severus.

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Hola !
Quería agradecerles por el apoyo que le están dando a la historia, sus comentarios y  votos significan mucho ⭐️

A pesar de que me dije que no escribiría la otra historia hasta terminar esta, ya tengo listo el primer capítulo 🌚 jajaja soy débil que les puedo decir, en si será una historia drarry pero no pude evitarlo y tendrá Severitus, un poco diferente al de esta historia pero lo tendrá..

En fin, espero que cuando la publique, se den una vueltecita por la historia, son las primeras que escribo así que espero no regarla y que les gusten.