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Severus espero hasta que Harry por fin se tranquilizó, haciendo uso de una paciencia que era inusual y ni siquiera él mismo sabía que podía tener.

Haciendo acopio de valor, y sujetando al pequeño lo mejor que pudo, logró ponerse de pie, aún manteniendo al niño en brazos. Sus piernas se sentían bastante temblorosas y adoloridas, producto del tiempo que había pasado en cuclillas pero se obligó a ignorarlo.

Por su parte, Harry se mantenía firmemente sujeto a su cuello, negándose a soltarlo, no pudo evitar pensar que de un pollito que lo seguía a todos lados había pasado a ser un monito que se colgaba de su cuello con toda la fuerza que esos delgados brazos eran capaces de tener.

Aún podía escuchar algunos profundos y temblorosos suspiros que venían del niño y le fue imposible no compararlo con su propia infancia, ¿Cuantas veces no había hecho lo mismo con su madre, negándose a separarse de ella? Sobretodo después de que su padre llegara ahogado en alcohol, apenas logrando mantenerse en pie, y sin embargo, eran esas las ocasiones en que parecía que su fuerza era mayor, cuando los gritos inundaban el ambiente y golpes se sentían de alguna forma más dolorosos que otras ocasiones.
Ver a Harry aferrarse de esa forma, tan conocida para el, le resultaba en una mezcla confusa de sentimientos, el ver como los papeles se invertían, y se presentaba ante él la posibilidad de ofrecer aquello que en algún momento también le fue negado cuando años después su propia madre murió, aquel apoyo tan necesario, solo hacía que más recuerdos salieran a flote.

Sacudiendo la cabeza se obligó a dejar a un lado todos esos recuerdos, ya de nada serviría lamentarse.

Sin intentar ni siquiera colocar al niño en su propia silla, se sentó con el menor sobre sus piernas, dejando que las piernitas del niño quedaran de lado, sin embargo este se mantenía con el rostro oculto.

En cuanto puso su atención a la mesa frente a él sintió como si un balde de agua fría hubiera sido rociado sobre él.
Las tazas estaban tiradas, el té cubría la mayoría de superficie de la mesa, mientras que uno o dos  platos tenían pequeñas fisuras en sus bordes. Sin  lugar a dudas eso no era buena señal, si antes albergaba la menor duda con lo ocurrido con la ventana, ahora podía garantizarlo. Se maldijo internamente por no haberlo previsto.

Aprovechando que Harry mantenía su carita enterrada en su pecho, uso su varita para arreglar la situación, logrando que la mesa recuperara el aspecto que había tenido inicialmente. Ojalá  todo se arreglara con un simple hechizo, pensó.

No le parecía adecuado ocultarle la verdad al niño, pero no sabía cómo podría reaccionar  ante la muestra de magia que había tenido, dudaba que fuera de buena manera contemplando el odio que tenía Petunia por todo lo relacionado al tema, era de esperar que se hubiera encargado de meterle ideas absurdas en la cabeza a Harry.

Finalmente decidió atender un problema a la vez, claramente la necesidad de desayunar se encontraba encabezando la lista, cuando terminaran podría concentrarse en cómo resolver el resto.

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El desayuno en sí mismo fue más complicado de lo esperado, ya que Harry se había negado inicialmente a comer, hizo falta varios intentos y un poco de negociación para lograrlo, retomar la lectura de cuentos le pareció un aceptable precio a pagar.

Incluso cuando había logrado que el menor se sentara viendo al frente para poder comer adecuadamente, este había sujetado la manga de su camisa, así que se vio obligado a comer con una sola mano, y si está ocasionalmente  alternaba entre sujetar los cubiertos y pasar por el lió que tenía por cabello el niño, el lo negaría todo.

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Cuarenta minutos después y por mucho que al profesor de pociones le hubiera gustado volver a la cama e intentar dormir un poco más, tenía que escribir una carta para pedirle a Poppy que se reunieran lo más pronto posible, puede que Harry aún no se encontrará físicamente tan recuperado como la medimaga hubiera querido para poder evaluar a ciencia cierta su núcleo mágico, pero no podía arriesgarse a esperar mucho más tiempo.

HOMEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora