Capítulo 15.

145 7 0
                                    

**Narra Niall**

-No sabes el miedo que le tiene mi hermana al rechazo-comentó una vez él y yo quedamos a solas en el salón. Le miré sin pronunciar palabras incitándole a que continuara-Cuando era pequeña mucha gente la odió sin darle la oportunidad de conocerla y desde entonces ha odiado esa idea-Todas las piezas del puzzle comenzaron a encajar, esa reacción que podría haber parecido tan exagerada dejaba de serlo en ese momento-Me tomo tu silencio como que te has dado cuenta de lo que estoy hablando. Desde que empezó a salir contigo ha sufrido ese rechazo de nuevo, nadie le ha dado una oportunidad de conocerla y cuando te fuiste a la gira lo sufrió sola.

-¿Cómo sabes todo eso?

-Eres famoso, Niall Horan. Todo el mundo conoce vuestra historia. ¿Cómo crees que la encontré de nuevo después de 10 años sin verla?

-¿10 años? Eres su hermano, ¿cómo puedes haberla abandonado tanto tiempo?

-Yo...

-¡Ya estoy aquí!-llegó Noelia sonriente-Te he preparado unas tostadas-se las tendió.

-Gracias mocosa-las cogió y comenzó a comersela. 

Noelia se sentó a su lado. Lo miraba maravillada y esa era una idea que no podía llegar a entender. Mi cabeza le daba mil vueltas a la razón por la cual Adrían podría haber abandonado el hogar dejando a su hermana pequeña sin su compañía. Yo mismo era hermano pequeño y la influencia de mi hermano siempre estuvo. 10 años sin verla, estoy seguro que ni se había molestado en buscarla.

La rabia apareció en aquel momento y al ver como mi novia le trataba aumentó. ¿Cómo podía ella perdonar tal comportamiento? ¿Qué me recriminaba él si había sido el primero en abandonarla años atrás? Entendía que se emancipara dejando el hogar familiar y consiguiendo un trabajo propio, pero Noelia no había vuelto a verlo nunca más y eso es lo que no podía soportar.

Al acabar su extensa tertulia los dos hermanos Jonson fueron a la cocina para poder recoger lo que Adrían había utilzado. Parecía que mi novia se había olvidado de mí, de que debíamos ducharnos y de que todavía no habíamos cenado nada. Su hermano había pasado a ser su todo en un mísero segundo. Cada vez odiaba más esa situación.

Me levanté del sofá y caminé hacia su misma habitación, miré la nevera y encontré cuatro cosas que poder picar. Al menos no moriría de hambre. Mientras ellos se mantenían en su propio mundo en un rincón de la sala. Yo me preparé algo rápido y sencillo para poder comérmelo. Me sentía fuera de lugar. Sentía esa casa más ajena de lo normal.

Después de la cena me fui a la ducha. Dediqué un par de minutos a esa lluvia artificial y una vez  tuve mi pijama puesto me tumbé en la cama y me puse con el móvil. Hablar con algunos amigos podría distraerme.

Horas después, no quiero saber cuantas, alguien me despertó; finalmente me había quedado dormido. Abrí los ojos y me encontré con el hermano mayor con mi almohada en el brazo.

-¿Qué pasa?-pregunté desperezándome.

-Nada, solo quiero dormir.

-Me alegro... Pero, ¿por qué tienes que despertarme?

-Porque Noelia me ha dicho que esta es su cama. 

-Así es, su cama. Aquí dormimos ella y yo.

-¿Ella y tú? Cuidado con lo que le haces a mi hermana-advirtió.

-Cuido mejor a Noelia de lo que tu has hecho estos 10 años, así que no me vengas con chorradas-espeté-Pero por si te quieres quedar más tranquilo, amo a tu hermana más que a mi vida, la protegería con mi vida.

-Bueno... Y, no me vas a dejar dormir con mi hermana, ¿verdad?

-Me temo que no, ya que me la robas por el día, me la quedaré yo por la noche.

-Como quieras, dormiré en el sofá. Como un invitado cualquiera.

-Buenas noches-le hice un gesto para que se largara y cerré los ojos.

Le oí resoplar y dirigir sus pasos hacia la salida. Cerró la puerta y de nuevo me dejó a solas.

¿De verdad ahora quería actuar de hermano mayor ejemplar? ¿Después de 10 años sin saber de ella ahora pensaba que podía venir y decirme como actuar? Cada vez flipaba más y me estaba cabreando yo solo con tantos pensamientos sobre Adrían Jonson.

A los poco minutos oí la puerta abrirse y entreabrí los ojos para ver quien era. Era mi niña. Me hice el dormido y esperé a ver qué hacía. Ella se dirigió al baño y enseguida oí el agua caer. Fue una ducha rápida. Enseguida se puso en pijama y se tumbó en la cama junto a mí. 

-Niall me gustaría que trataras mejor a mi hermano. Es mi familia y le quiero a pesar de todo-susurró antes de besarme la mejilla y acomodarse a mi lado.

Me moví hasta su lado y la rodeé con mi brazo. Se dormía mejor así. Estando al lado suyo las noches se me hacía muchísimo mejores y los despertares maravillosos. Quería mantenerla a mi lado. Me llavaría bien con Adrián si eso quería, pero antes debía dejar un par de cosas claras.

**Narra Harry**

Era tarde, lo sabía. Superaba la medianoche, pero yo necesitaba verla. Fui hasta su piso y toqué el timbre emocionado. El corazón me latía a mil por hora, estaba nervioso. La última vez que la vi todo había acabado en beso. Ella había quedado impactada y  yo sin saber que pensar o decir. Quería verla, necesitaba verla, pero temía cual sería su reacción ahora.

Oí la puerta abrirse y mi corazón se aceleró, me peiné una vez más y dirigí mi vista a la puerta. Fue entonces cuando noté mi corazón romperse en mil pesazos. Mis esperanzas derrumbarse. Mis ánimos undirse y mi cuerpo debilitarse por la angustia.

-Hola...

-¿Está Sofía?-me atreví a preguntar.

-Claro que sí. ¿Eres amigo suyo?

-Algo así-dije serio.

-Bueno, yo soy Víctor, su...

-Déjalo. En realidad ya tengo que irme. Nos vemos... Adiós.

Retomé en rumbo a casa. No era tan bonito como yo pensaba. Me sentí sin ánimos para nada.

Ready To RunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora