apuesta | p.jm

11

♡

- Maldición, mi brazo. -miró el raspón que tiene en todo el antebrazo-

La chaqueta de JiMin que tenía se rompió a causa de la caída. Es lo de menos ahora, necesita salir de ahí, agradece que no se lastimo peor ya que si es alto. Por su lado, JiMin se la ha pasado el día entero cerca del lago. Necesita aclarar su mente y que era lo que estaba haciendo con Kang Hye Sun exactamente.

Aparte aquí fue donde paso, hace ya tres años, no puede evitar pensar en ello. Esta triste y no le gusta que lo vean así.

No sabe que es ese fastidioso sentimiento, le hace perder la cabeza, cuando la mira sonreír, le gusta que ella sonría y ría gracias a él. Pero le cuesta aceptar que le gusta y no poquito.

- No JiMin, no puede gustarte, ella no es tu tipo. Ella no... -suspiró- Esa jodida apuesta. -lanzó una roca al lago-

La imagen de ella aquella noche en su cuarto el viernes, no sale de su cabeza, tampoco las palabras de los chicos.

"Tu nunca te habías preocupado por una chica." "Acéptalo, es linda." "Te gusta, te gusta porque nunca le has insistido a una chica, y no es por la apuesta, disfrutas estar con ella... te gusta JiMin "

Recordó las palabras de sus amiga.

-Me gusta... Kang Hye Sun me gusta.

Se distrajo cuando escucho un ruido de lejos. ¿Eso es un celular? Caminó a donde provenía el sonido, el celular de alguien suena cerca, quizá no ha estado solo como cree.

- Si eres Taehyung voy a asesinarte, te dije que quería estar solo... - callo cuando miro el teléfono en el suelo- Pero que...

Lo tomo en sus manos, en seguida se dio cuenta de que es de Hye Sin, recuerda bien cómo es. Tiene una case muy peculiar.

Miró los mensajes que no sólo Yeirin le están mandando. También...

- JungKook...

"Hye Sun-ah... Estoy muy preocupado, llámame.." -Kooki♡-

"Estúpida regresa, ¿donde estas? Yeirin no deja de llorar, estamos asustados." -Marian-

- Pff, ni siquiera a sus amigas les tiene un corazón -dijo celoso- Ellos piensan que esta perdida. Seguro el maldito flojo del director no ha hecho nada para encontrarla.

Ni siquiera están lejos.

Pensó que seguramente se le cayó al suelo al caminar por ahí, pero no la ve cerca. Se sintió preocupado al darse cuenta que ya comienza a anochecer, debe encontrarla.

Caminó un poco más adentro del lugar entre los árboles.

- ¡Ahh mierda! -gritó al ver a Hye detrás de un árbol- Pensé que eras un jodido animal.

- También me asustaste, no fuiste el único. -suspiró- Es un alivio verte.

-sonrió coqueto- Aw, tanto me extrañaste, no puedes vivir sin mi.

- Alguien debería bajarte de la nube en la que estás, no eres irresistible para mí. -alzó una ceja-

- ¡Ja! Te encuentro y así me agradeces. Eres una... Espera, ¿Qué le pasó a tu brazo? -habló preocupado-

- Oh, no es nada. -escondió su brazo tras de ella-

- Mentirosa déjame ver. -se acercó a ella y miró su brazo- ¿Qué te pasó? 

- Mi brazo. -se quejó- Me duele. Cuidado.

- Cuidado tú Hye Sun. ¿Te caíste? Es peligroso estar en la horilla es obvio Hye Sun, ahora te caíste y te lastimaste, déjame ver. -la ayudo a sentarse sobre una roca-