apuesta | p.jm

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Su cabeza esta hundida en la almohada a mi lado, su brazo esta por sobre mi cintura, luce tan adorable e indefenso. Sus mejillas han perdido un poco el encanto a causa de que dejo de comer y ha bajado algo de peso, pero aun así se oprimen sobre la almohada y son mas voluptuosos al igual que sus labios. 

Sus facciones están relajadas, nunca lo había visto dormir así, ahora mismo parece un bebé. 

Estoy cerca de su cuerpo, pero tampoco tanto, desperté hace no mucho, necesito ir al baño pero la persona a mi lado parece no querer soltarme. Es parecido a la primera vez que dormí a su lado, me abrazo como si tuviera miedo, como si fuera su peluche para dormir, ahora entiendo más porque lo hace. 

Sonrió un poco al pensar en que lo tengo a mi lado, es mejor a que este drogándose, eso me tiene muy preocupada por cierto. No puedo seguir enojada con el, se la razón y el porque de todo lo sucedido, pero no es que vaya a sonreír y ser de nuevo una pareja como si nada hubiese pasado, primero que nada JiMin necesita cambiar y ver a un psicólogo urgente. 

- No... -se removió en la cama- No... Hye Sun, no lo hagas. -susurró-

Lo miré confundida, esta soñando, parece que es algún tipo de pesadilla, claro que lo es, esta demasiado asustado, las lagrimas aparecen tan rápido que estoy sorprendida de lo que esta pasando. 

- JiMin. -lo tome por las manos- Hey, escúchame, JiMin.

- No, no. -su respiración comenzó a descontrolarse, necesito despertarlo- ¡Hye Sun! -abrió sus ojos antes de que yo pudiera accionar- 

Se reincorporo sobre la cama al igual que yo, de sus ojos siguen saliendo lagrimas, su pecho sube y baja con rapidez, me mira con demasiada tristeza, nuevamente acciona primero que yo y me abraza fuerte. 

- Hye Sun... -solloza- 

- ¿Qué sucede? ¿Qué soñaste? ¿Estas bien? -pregunté aun en sus brazos- 

Controla su llanto y sin soltarme contesta.

- Tu.. Tu lo hacías. -cerró con fuerza sus ojos- Tu también morías.  -negó varias veces- No quiero que te vayas, no quiero. 

- Oh, JiMin. -abrace también su cuerpo, lleve mis manos a su nuca y lo acaricie- No morí, fue solo un sueño, solo eso. -hice una corta pausa- No me iré, tranquilo. 

Soltó un pesado suspiro, es como si un gran peso se le fuera de encima, no se que es lo que pasa por su cabeza realmente, pero ahora lo que necesita es apoyo, y estaré para el. 

°

La mañana llegó, no sabe cual es la hora con exactitud pero si por el fuera, se quedaría mirándola por el resto de la eternidad. 

Puede darse cuenta de lo humana que es ahora. 

Suelta pequeños suspiros al dormir, su boca esta levemente abierta y su cabello esta revuelto a pesar de que durmió con una trenza. 

Sonríe al recordar todo lo de anoche, claro, solo las partes en las que la paso a su lado, ella le demostró que a pesar de lo que le hizo no se iría, pero que necesitaba algo de tiempo para sanar, lo entiende completamente.