¿Que hiciste qué? ( 15 )

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Narro yo

Raika jugaba con su equipo de realidad virtual perdiendo por enésima vez en aquella calurosa mañana. La castaña bufó con molestia atando su corto cabello con una banda elástica, pues ya le estaba molestando más de la cuenta cuando se le pegaba a la nuca y hombros debido al sudor.

Por otro lado cierto albino la miraba con una sonrisa torcida desde el sofá, que era donde estaba acostado, tratando de comprender cómo era que a la chica le resultaba tan difícil ganar al menos un round a pesar de que no estaban mal sus posiciones de ataque.

_Eres un asco en este tipo de juegos_soltó como si nada al ver nuevamente en la pantalla el avatar de su adversario festejar.

_Gracias por tus motivadoras palabras_respondió sarcástica retirando las gafas de realidad virtual de su rostro_Estoy al pensar seriamente que este equipo está defectuoso.

_El problema es que eres pésima.

La chica dibujó una mueca de disgusto en su rostro ante las palabras del ojiámbar.

_¿Y tú eres muy bueno no?_replicó enarcando una ceja.

_Mejor que tú por mucho_sentenció a ligera aún acostado en aquel cómodo mueble, haciendo el vago como es costumbre.

_Demuéstralo_le retó cruzándose de brazos, todavía sosteniendo aquellas gafas.

El albino de mirada afilada sonrió ante aquellas palabras.

_¿Y qué gano yo a cambio?_cuestionó sin perder aquella sonrisa de su rostro.

_No tendrás que pasear a Rover hasta la próxima semana.

_Tentador, pero no_declinó posando su vista en el techo.

_Hm...haré un menú variado para esta tarde y podrás comer lo que quieras.

_¿Estás incluida en el menú?_bromeó  fijando sus orbes en el rostro de su chica, notando cómo sus pálidas mejillas iban adquiriendo un color rojizo.

_N-no soy comida, idiota_respondió alargando la o de idiota mientras formaba un tierno puchero a los ojos del peliblanco.

_De acuerdo_accedió finalmente levantándose con cierta pereza para luego dirigir sus pasos hacia la castaña, arrebatándole el equipo de sus manos.

_Y si pierdes harás los quehaceres de la casa por una semana_propuso para hacer justa la apuesta_¿Promesa de meñique?

_Eso es tan infantil_bufó el de mayor tamaño.

_La promesa de meñique tiene un significado más macabro, antiguamente la parte que rompiera el trato tenía que cortarse ese dedo_explicó cual historiadora profesional.

_Prefiero hacerlo de otra forma.

_¿Cuál?_preguntó curiosa antes de sentir sus labios ser devorados en un beso lento y tortuoso, el cual Garou dirigió a su gusto mientras una de sus manos permanecía posada sobre la mejilla de la contraria, evitando que escapara hasta que él quisiera.

_A partir de ahora nuestras apuestas serán así_susurró en al oído de la castaña con la respiración entrecortada, logrando hacerla estremecer cuando mordió el lóbulo de su oreja.

_T-tonto_murmuró con un notable sonrojo mientras trataba de estabilizar su respiración, llevando los dedos a sus labios, que de seguro estaban rojos por las sutiles mordidas que el albino había hecho.

El aludido sonrió al ver las reacciones de su chica, las cuales siempre le sacan una sonrisa y esta no fue la excepción.

Sin más dilaciones procedió a colocarse aquellas extrañas gafas y comenzar las peleas virtuales, ganando tres round seguidos sin mucho esfuerzo, cosa que no entendía la protagonista si nunca antes había jugado, o eso pensaba la chica, ya que cuando esta salía de casa para hacer las compras o pasear a Rover, él por mero aburrimiento jugaba y hay que admitir que no se le daba mal.

A tu lado |Garou| [ FINALIZADA ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora