A tu lado |Garou| [ FINALIZADA ]

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La castaña abrió con pesar los ojos debido a un molesto ruido que desde hace tiempo no escuchaba, la alarma del despertador. Nuevo año y de vuelta al trabajo, pues desgraciadamente las vacaciones ya habían expirado sin siquiera darse cuenta.

Su jefe se había encargado de enviarle un mensaje a su celular avisándole de que comenzaba a trabajar nuevamente y que no se le ocurriera llegar tarde.

Dejó escapar un suspiro cansado de tan solo recordarlo y se apresuró a estirar una de sus manos en busca de silenciar el dichosos sonido emitido por el despertador, lográndolo luego de un par de intentos.

_¿Qué piensas hacer?_cuestionó el albino medio adormilado.

_Hoy vuelvo al trabajo_respondió cubriendo un sonoro bostezo, aún envuelta entre las sábanas, el clima era un poco frío en contraste con la calidez que emanaba de las mantas.

El joven reforzó el agarre en la cintura de la fémina, quien se giró hacia él para quedar cara a cara.

_Quédate un poco más_le susurró al oído escondiendo el rostro en su cuello, dejando un par de besos que la hicieron estremecer.

Raika se limitó a sonreir acariciando aquellas hebras albinas con cariño.

_No puedo hacer eso o llegaré tarde_respondió con cierto pesar, desvincularse un tiempo de su rutina como reportera luego de seis meses en los que solo se enfocó en trabajar, era un duro golpe a la hora intentar retomarlo nuevamente_Volveré antes de que anochezca y te dejaré el desayuno ya preparado.

Este gruñó por lo bajo alejándose de su cuello sin deshacer el agarre, entendía que su prometida debía irse pero algo dentro de él le impedía soltarla.

_Desayunemos juntos_propuso juntando sus frentes.

_De acuerdo_accedió dedicándole una sonrisa.

Ambos se levantaron con cierta pereza para actoseguido dirigirse a la cocina. Raika hacía el desayuno en lo que Garou preparaba la mesa. Minutos después ya se encontraban desayunando mientras charlaban de casi cualquier cosa, como tenían por costumbre.

_Buscaré un trabajo.

La ojiverde parpadeó un par de veces ante la súbita noticia, levantándose con la intención de recoger la loza pero este la detuvo al sostener sus muñecas.

_Yo lo haré, tú tienes todavía que arreglarte_le recordó dejando un tierno beso sobre su frente, devolviéndola a la realidad.

_Oye, no tienes que forzarte a buscar un trabajo si no quieres_aseguró una vez procesada la información_No me molesta que..._pero un dedo sobre los labios la forzó a detener sus palabras.

_Tengo algo llamado orgullo y no dejaré que mi chica me mantenga siempre.

La castaño noró firmeza en aquella mirada ámbar, entendiendo que dijera lo que dijera no le haría desistir de aquella idea.

_En ese caso está bien_le apoya con una sonrisa en cuanto sus labios dueron liberados_Espero que encuentres un buen empleo pronto, ya me dirás en la tarde qué tal te fue.

Y sin más dilaciones se apresuró a ducharse y preparase para el primer día de trabajo en este año, aunque volver a ver la cara de su jefe no era algo que la entusiasmara demasiado. Observó por breves segundos su reflejo, acomodando un par de mechones rebeldes antes de tomar su bolso y correr hacia la salida, puesto que, aunque no hubiese visto la hora podía presentir que iba contra reloj.

_Olvidas algo_le detuvo el peliblanco sosteniéndola del brazo antes de que lograse cruzar el umbral de la puerta.

_¿Eh? ¿Qué?_preguntó con prisa antes de sentir su cuerpo ser aprisionado entre los brazos de su chico.