~Aprende a tocar la puerta~

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Max.

Quisiera decir que me sorprendió volver a verla, observar de nuevo esa melena tan negra como la noche, pero no fue así, esta igual que como la recordaba, claro exceptuando el hecho de que ahora se ha desarrollado más físicamente, pero mentalmente sigue siendo la misma niña torpe de siempre, y si señores estoy hablando de Sherril Evans, la conozco desde que tengo memoria, pero ella olvido algunas cosas sobre mi y siendo franco es mejor así.

Vuelvo a tomar mi teléfono para leer mejor el mensaje que recibí de mi hermano, no pude leerlo bien debido a que cierta persona vomito en mis bellos zapatos y solo quería fulminarla con la mirada. Realmente eran muy caros, mamá va a matarme cuando los vea.

Para Max:

*¿Dónde estás míster elegancia? Mamá y Papá están preguntando por ti y Nora esta insoportable por favor no me dejes solo en esta hermano o si no eres hombre muerto* BY: Dylan.

Para Dylan:

*Lo siento hermano me acaba de ocurrir un percance no muy agradable, dile a mamá y papá que lo siento y a Nora solo dale algo dulce sabes que con eso se tranquiliza, los espero en casa, ah por cierto deja las amenazas saber que no te convienen hermanito* BY: Max.

No entiendo porque a mis padres se les ocurrió la idea de volver a este pueblo tan nefasto, estábamos muy bien noruega, todo estaba tranquilo, tenía amigos, no muchos, pero tenía y un día sin más lo tuve que dejar todo.

No negare que en un principio sentí mucha curiosidad por saber cómo estaba este sitio después de tanto tiempo o bueno como estaba una persona y toda esa curiosidad se fue cuando note que seguía siendo la misma persona de siempre, torpe, terca, pero muy hermosa, tristemente el puntaje que tiene de hermosa y créanme es muy alto, es el mismo puntaje de odio que siento yo por ella, jamás olvidare lo que me hizo.

Parqueó mi motocicleta en la entrada de mi casa y me dirijo a mi habitación para darme un baño, tengo el olor del vomito de Sherril en mi cuerpo y es totalmente desagradable y si mi madre me ve en estas condiciones le da un infarto como mínimo.

Al entrar en la ducha siento que el agua no está tan fría como me gusta, así que pongo las manos en el regulador de temperatura hasta que llegue a lo más frio posible, es uno de mis poderes que más me gustan.

Cuando por fin termino de mi ducha rápida, salgo directo a mi habitación - si mamá no ve me en su fiesta, seré hombre muerto, ya bastante enojada debe de estar porque me fui de la iglesia- digo en voz alta.

Desde mi habitación puedo escuchar que ya están llegando las personas o mejor dicho los intrusos como digo yo, aunque no lo aparenten, en este pueblo viven más personas que solo están pendientes de la posición económica de los demás, que en sí mismos.

-Porque esta casa es tan grande- dice alguien entrando a mi habitación sin permiso.

En este momento no se si es el destino que no quiere que sea feliz o solo es el karma jugando una mala broma.

-A ti no te enseñaron a tocar ¿verdad? - le digo a esta persona.

- Lo siento Max, de veras no sabia que esta es tu habitación, solo estoy buscando la habitación de tus padre que me pidieron que buscara algo- dice Sherril.

-Número uno no vuelvas a entrar a mi habitación, número dos me importa un pepino que estés buscando o lo que sea que quieres y número tres aprender a tocar las puertas que vez cerradas- le digo.

-Max lo siento si vale, se que no fue nada lindo que mi cena anterior quisiera saludarte, pero tampoco es para que te comportes como un animal- me dice.

Me voy acercado lentamente a ella, como si fuera la comida de un cazador, veo que ella se incomoda un poco porque estoy a escasos centímetros de su rostro.

-Créeme que puedo ser un animal y hacerte gruñir en muchos ámbitos Sherril, pero en el ámbito que te diré esto ahora mismo no es muy agradable, largo de mi habitación en este maldito instante escuincla- le digo.

-Mira estúpido simio con esteroide, a mí no me vas a venir hablar así, te pedí disculpa por lo de esta mañana, pero ahora mismo deseo que te vayas al mismo inferno y te quemes en el- me dice.

Este juego me está comenzando a gustar y soy muy competitivo la verdad, ahora tengo un motivo por que quedarme en este pueblo y se llama Sherril Evans, quien por cierto es mi vecina, bienvenida a los juegos del hambre hermosa.

- vi skal brenne begge dyrebare i helvete- le digo con una sonrisa en el cara y cerrando la puerta en su bello rostro.

Nota: Los Blackwood duraron mucho tiempo viviendo en noruega, por eso tal vez en el trascurso de la historia, aparezcan palabras o frases en noruego pronunciadas por ellos, como lo que acaba de decir nuestro hermoso ojos grises.

-vi skal brenne begge dyrebare i helvete: nos vamos a quemar los dos preciosa en el infierno.

Phoenix [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora