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Un día jueves en la mañana, Bokuto y Kuroo llevaron a un amigo suyo a Starbucks. Su nombre era Shoyo Hinata. Su cabello era pelirrojo y era bastante bajo a comparación de los otros. Al entrar al café, Kenma, quien estaba limpiando el piso, notó la presencia de estos tres, abriendo sus ojos en grande al ver al chico pelirrojo. Era demasiado lindo.

Akaashi estaba en la caja atendiendo, a lo que al ver también a Bokuto hizo que le sacara una sonrisa tímida.

—Hola, ¿qué van a pedir? —preguntó por cortesía.

—¡Hinata, aquí venden muchas cosas deliciosas! Ve el mostrador —le señaló Bokuto.

—¡Okey!

El pelirrojo se quedó mirando que podría pedir, aunque la verdad es que no se le antojaba nada, no veía cosas que le parecieran deliciosas... abultó sus labios, sin saber que pedir.

Kenma vió la oportunidad de hablarle y guiarle en su pedido, a lo que se acercó a este detrás del mostrador.

—¿Quieres algo dulce o salado? —preguntó, haciendo rulos en su cabello.

—Ahm... podría ser salado, la verdad es que no he desayunado y tengo mucha hambre.

Kenma soltó una pequeña risa.

—Puedes comprar ese sándwich de por ahí. También tenemos jugo natural de frambuesa y naranja.

—¡Ah, entonces...! Voy a pedir ese sándwich y un jugo de naranja.

Akaashi asintió, marcando los productos en la caja registradora. Luego Kuroo y Bokuto pidieron algo también. Mientras Akaashi preparaba el pedido, Kenma no podía evitar mirar a aquel chico. Se veía tierno y amable, entusiasta y ambicioso, en el buen sentido. Era como si fuese un sol.

—¿Por qué no le llevas el pedido tú? —preguntó Akaashi sonriéndole de lado, entregándole el sándwich y el jugo de naranja.

Kenma apretó sus labios y asintió. Se acercó a la zona donde entregaban los pedidos y miró el vaso para llamarle.

"Hinata"

Llamó por su nombre y este giró su cabeza. Kuroo y Hinata se levantaron, mientras Bokuto se quedó allí para guardar mesa. Cuando Kuroo y Hinata llegaron, Kenma les entregó las bebidas con una sonrisa.

Aquello dejó a Kuroo pensativo. ¿Desde cuándo se colocaba así por un cliente? Miró de reojo al chico pequeño. «Soy muy parecido a él en personalidad, ¿no? También quiero que sonrías cuando venga a buscar lo que pedí» pensó Kuroo. El pelinegro rodeó los ojos e inconscientemente le arrebató el pedido de las manos de Kenma. Al darse cuenta, había creado un ambiente un tanto incómodo.

Kenma le miró con seriedad y relamió sus labios al desviar su vista a Hinata.

—Espero poder verte de nuevo por aquí, Hinata...

—¡Claro! —contestó alegre caminando en dirección a la mesa donde estaba Bokuto.

Kuroo se quedó unos segundos mirando a Kenma para finalmente darse media vuelta e ir a la mesa.

Kenma fue a la caja registradora a ordenar el dinero ya que no había ningún cliente.

—Kenma... ¿pasó algo? —preguntó en un susurro Akaashi, haciendo como si limpiara la mesa.

—Nada. ¿Ya viste a ese chico pelirrojo? Es muy lindo.

Akaashi sonrió de manera torcida, sin saber que responder. Había visto todo lo que pasó y entendió al instante, y si sus pensamientos no eran erróneos, Kuroo estaba... ¿celoso? No lo sabía con exactitud, pero de que algo extraño estaba pasando en esa amistad estaba seguro.

...

Pasaron algunos segundos y el teléfono de Akaashi sonó en su bolsillo. Terminó por atender al cliente y le entregó su pedido, para finalmente tomar el dispositivo. Sonrió al ver que le había llegado un mensaje de Bokuto; levantó su vista para chocar miradas con este, lográndolo.

« ¿Tienes clases después del trabajo? »

Akaashi mordió su labio inferior, respondiendo un "no" con simpleza. Inmediatamente recibió un mensaje por parte del chico.

« ¿Damos un paseo? »

« Está bien, Bokuto-san »

Strawberry Frappuccino ┊ TsukiYama.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora