Flame (Sokka x tú)

🍃El reencuentro🍃

Ya sabéis lo que significan 2000 visualizaciones más. Exacto, capítulo doble, mañana subiré otro.😉

ANUNCIO IMPORTANTE:
Me he dado cuenta de que algunas de mis queridas lectoras hacen edits de esta historia o quieren hablar conmigo de algo y quería deciros a todas que siempre leo vuestros comentarios y me encanta ver cómo disfrutáis la historia, por lo que me he creado un correo electrónico para aquellas que quieran hablar conmigo o enviarme cualquier cosa. ❤️

SnakeQueen.0001@gmail.com

Y si preferís hablarme por privado hacerlo sin miedo, siempre estoy encantada de responder a las preguntar de mis lectoras, os adoro❤️

Nos encontramos en el salón cuando Katara y Aang entran emocionados anunciándonos que han encontrado una imprenta para colocar los carteles de búsqueda de Appa.

- ¿¡Qué?! ¡pero pensé que hacer los carteles era cosa mía! – se indigna Sokka enseñando sus dibujos –

Todos se burlan de estos, normal, son horribles, pero ha sido adorable verlo dibujarlos.

Me acerco por su espada y le doy un beso en la mejilla.

- Dibujar no es lo tuyo cielo. – le confieso –

- Esta bien, ya lo dejo. – dice haciendo un puchero –

- ¡Dejaros de coqueteo! ¡tenemos trabajo! – nos grita Aang entusiasmado dándonos los carteles para repartirlos –

Todos salimos a repartir los carteles, pero somos Sokka y yo los primeros en regresar a nuestra casa provisional.

- ¡Por fin tenemos un rato a solas! – grito entusiasmada – Desde que nos conocimos siempre hemos estado en grupo, incluso ahora que somos una pareja oficial no tenemos tiempo para pasarlo juntos los dos solos. – hago un puchero –

Narrador omnisciente:

Sokka te observa y analiza tus palabras con cuidado antes de ponerse nervioso, el corazón empieza a latirle con tal intensidad que teme que lo escuches.

- ¿Qué te apetece hacer? – le preguntas con una sonrisa en la cara –

Te das la vuelta y observas la habitación pensativa, intentando encontrar algo que podáis hacer para aprovechar el tiempo a solas.

Tu futuro marido te analiza, mirando cada uno de tus pasos, recorriendo cada centímetro de tu cuerpo con sus preciosos ojos azules sin saber si puede lograr ser más osado para dar el paso.

Se acerca con cautela, mientras que los latidos de su corazón martillean sus idos y el calor sube por sus mejillas; rodea tu cintura con sus brazos por la espalda y apoya su frente en tu hombro.

- ¿Qué sucede? Estas muy callado. – le dices soltado una risa suave –

Cautivado por tu melodiosa voz y por la forma en la que tu cabello se mueve sutilmente con su respiración entrecortado se digna por fin a hablar.

- ¿P-puedo besarte? – te pregunta tímido –

- ¿Pero que pregunta es esa? ¿desde cuando tiene que preguntar eso mi magnifico novio? – te das la vuelta para verle la cara –

Entonces lo comprendes, su expresión no te había dejado lugar a dudas de lo que quería de ti en ese preciso instante, tu corazón se altera, te ruborizas y los nervios se instalan en tu vientre.

- ¿A que esperas? – le susurras –

Acerca sus labios a los tuyos con temor, rozando estos y agravando el deseo de ser consumidos por el otro, aguardando un permiso silencioso.