Aria, ya con catorce años partió hacia la selección de cazadores de demonios.
"Aria recuerda que no tienes que esforzarte, ningún demonio te atacar. Solamente ve caminando por el bosque y evade cualquier contacto con alguna persona. Todos nosotros confiamos en tí y sabremos que pasarás fácilmente. Douma te estará esperando una vez termines. Lo harás perfecto"
Sonrió recordando las palabras de su padre, las palabras de su parte la hacían sentir más tranquila. Acercándose hacia la selección divisó varias flores de un color púrpura brillante que colgaban de unos árboles.
Le emocionó ver flores tan bellas y brillantes por lo que se acercó a tocarlas suavemente con el dedo índice. Pareció que al sentirla se iluminó levemente, pero lo provocó un pequeño estornudo. Su esencia provocaba un hormigueo en su naríz
Terminó su camino a la cima, mirando a los alrededores habían unas 20 personas, " Daki-chan fue muy inteligente al decirme que esconda mi cabello bajo esta tela " -pensó
Luego de que llegara otro chico de cabellos rojizos unas niñas nos dieron la bienvenida y explicaron las reglas. Teníamos que sobrevivir 7 días.
" Será fácil, aunque aún me siento nerviosa "
Dentro del bosque caminaba desviándome por algunos sitios, realmente no tenía idea de qué ruta tomar.
-- ¡Una! -- esa voz se escuchó a mis espaldas, pero sola se calló y gruñía huyendo
" ¿Era uno? Ciertamente no me atacó... "
Continué y me encontré a unos demonios peleando entre ellos, aunque no entendía por qué.
-- Esto... -- se voltearon con varias notables venas en sus rostros
-- ¡No! -- ambos gritaron preparados a salir corriendo
-- ¡E-esperen! -- les pedí, pero lamentablemente ya se habían marchado
Seguí caminando, quería encontrarme con algún demonio y ser compañeros pero siempre se marchaban.
" ¡Allí hay uno! " Rápidamente corrí a alcanzarlo, pero me sorprendí que a solamente a unos centímetros su cabeza fuese cortada rozándome la espada por la mejilla.
Instintivamente llevé mi mano a la herida mientras quien lo decapitó me miró chasqueando la lengua.
-- ¡Quítate del medio! -- mi cabello calló de la tela al romperse esta un poco -- Imbé... -- quedó callado, miraba embelesado mis facciones y cabello
Me giré asustada volviendo a amarrarlo y acomodando la tela. Le observé de reojo y corrí, era un humano.
-- ¡Espera! --
Me detuve y lo miré un poco atemorizada aún.
-- Tú...una vez me entregaste un ramo de flores -- cambió de una actitud arrogante a un poco más dulce -- ¿No? --
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Flor de Diamante ─ Genya Shinazugawa
RomanceSi solo hubiera estado ese día, todo no habría pasado. Hubiera evitado aquella tragedia. Con tal de saciar tanta rabia, la mataría. Era evidente que no le sería útil, sacrificarla no la traería de vuelta No sabría que al final recurriría a ella para...