Parece que a ninguno le ha agradado que sea amiga de un cazador. Daki lloró mucho, Douma ya lo atacaría, a papá no le agradó para nada y por suerte, Kokushibo sé que no le hará nada
La tarea de decírselo a los demás se me hizo más difícil ahora. Tengo miedo de que esto le genere un problema a Genya
Suspiré, caminaba por la fortaleza. Estaba aburrida, no recibía respuesta de Genya, ni tenía misiones
Salté hacia otra de las plataformas, tenía mis manos entrelazadas por detrás y quedé viendo al suelo. Había una puerta corrediza, comenzé a pensar que había allá dentro
Me picó la curiosidad y estiré mi mano para abrirla.
-- ¡Aria! -- saltaron dos personas sobre mi espalda. Cuando me dí la vuelta eran Karaku y Urogi
-- ¡Vamos a jugar! -- dijo Karaku entrelazando sus piernas por mi abdómen
-- ¿Jugar? -- le pregunté con una sonrisa
Urogi subió por mi espalda y quedó abrazando mi cuello -- ¡Sí! ¡A atrapados! --
La cabeza de Aizetsu se asomó por detrás del hombro de Karaku -- Aria, no tienes que hacerles caso por favor. Ya les dije que somos muy grandes para eso --
-- No hay problema Aizetsu -- respondí con una sonrisa
-- ¡Aizetsu ahora no seas zopenco! -- lo señaló Urogi
-- ¡Sí! ¡Que mucho chillabas antes! -- gritó Karaku, y ambos fulminaban al pequeño con la mirada -- ¡Es que a Aria, no se si le molestará-! -- dijo con voz chistosa
-- ¡Cállate cállate! -- lo tomó de las mejillas y lo jaló hacia detrás
-- ¡Quita pulgoso! -- empezó a forcejear con Aizetsu
Sentí como me elevaban, fue cierto porque Karaku y Aizetsu cayeron al suelo. Los brazos de Urogi me cargaron, a estilo princesa
-- ¡Vamos humano! ¡Te alejaré de estos estúpidos! -- sus aleteos resonaron por las paredes
-- ¡Hey! ¡Pájaro retrasado! -- gritó Karaku
-- ¡Nos vemos! -- guiñó un ojo
Voló rápidamente por muchos lugares de la fortaleza, entró por varias habitaciones y me llevó por todos lados. Era una agradable sensación sentir las fuertes ráfagas de viento en mi rostro y era increíble ver a Urogi como volaba con mucha destreza, es como si fuera un ave de verdad
Nos detuvimos en un lugar muy lejano al que estábamos. Él me bajó y se sentó a mi lado
-- Waaaw, hace rato no vuelo tanto -- estiró sus brazos hacia arriba, fue divertido ver como sus alas también se estiraron. Luego me miró -- ¿Te gustó? --
-- ¡Sí! ¡Estuvo increíble! -- respondí apretando mis puños con emoción -- Son impresionantes tus alas Urogi -- él sonrió alegre por mi halago. Miré al suelo, y volví a verle -- ¿Puedo tocarlas? -- pregunté avergonzada
-- ¿Mhm? Sí, por poder puedes -- se giró dándome la espalda a mí -- Aunque no sé cómo se sent- --
Paró de hablar, no había podido esperar y toqué su ala derecha. Me asusté porque se quedó callado, tal vez le duele o molesta
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Flor de Diamante ─ Genya Shinazugawa
RomanceSi solo hubiera estado ese día, todo no habría pasado. Hubiera evitado aquella tragedia. Con tal de saciar tanta rabia, la mataría. Era evidente que no le sería útil, sacrificarla no la traería de vuelta No sabría que al final recurriría a ella para...