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" Amarte sin barreras ".

Yeonhee se sintió completamente viva cuando salió del escenario junto a Suyun y Yunkyung, lo primero que hizo fue abrazar al club de baile que esperaba por ellas. Sobre todo a Minji, quién lloraba de felicidad por haber encontrado un buen reemplazo.

-Yeonhee, en serio gracias -Agradeció Minji envolviendo a la nombrada en un cálido abrazo.

-De nada -Dijo Yeonhee correspondiendo el abrazo- Pero la próxima vez, espero verte a ti sobre el escenario.

-Trataré de no volverme a lesionar.

-De acuerdo.

-Niñas, aun no es momento de festejar -Dijo la profesora de coreografía- Todavía quedan grupos que presentarse.

-Profe -La llamo Suyun con una gigantesca sonrisa- Acaba de ver una de las mejores presentaciones en años y una de las participantes ni siquiera es parte del club, ¿No cree que es motivo suficiente para celebrar aunque sea un poco?.

La profesora dirigió su mirada a Yeonhee, por un momento la peli negra se tenso por completo ante la dura mirada de la profesora pero cuando ella ablando su mirada, Kim pudo dejar de lado el nerviosismo.

-En eso, querida Suyun, tienes mucha razón.

El grupo volvió a saltar de alegría ante el permiso de la profesora, hasta ella comenzó a festejar orgullosa de todas sus estudiantes, cada una de sus chicas habían dado lo mejor sobre el escenario que no podía pedir más.

-Ganemos o perdamos, las invitaré a todas a comer una rica pizza para celebrar este triunfo.

-¡Gracias, profesora! -Gritaron todas al unísono.

-Y quizás piense en reclutar a nuestra salvadora Kim Yeonhee.

-¿Yo? -Preguntó la peli negra sorprendida ante las palabras de la profesora.

-Por supuesto, estuviste magnifica -Respondió la profesora bastante orgullosa.

-G-gracias -Dijo Yeonhee con sus mejillas rojizas por la vergüenza.

Yeonhee disimuladamente volteo a ver a su novia, Yunkyung la miraba con orgullo. La menor siempre la había animado a bailar junto a ella, incluso había innumerables veces que la peli anaranjada la invito al club pero como ella suele ser un poco tímida e insegura la rechazaba, además las pocas veces que había bailado fueron porque Chaewon insistía al punto de volverla loca.

-Bien hecho, Yeonhee -La felicito Chaewon.

-Unnie! -Yeonhee se acercó a abrazar a la recién llegada- Si pudiste ver la presentación.

-No podría perdérmela -Dijo Chaewon besando su mejilla- Alguien se hubiera puesto como loca si llegaba a faltar en un día tan importante como este.

Una carcajada salió de los labios de la pelinegra, Suyun puede ser muy drámatica cuando se lo propone. De todos modos, sabía que Chaewon movería cielo y tierra por ver Suyun bailar, siempre ha sido así y antes pensaba que era solo porque son amigas, que ciega había sido para no darse cuenta sobre el romance entre las dos.

-Seria muy bueno que pienses en unirte al club -Susurro para ellas Chaewon.

-¿Y tú? -Preguntó entre susurros Yeonhee- Las dos sabemos que también te apasiona bailar.

-¿Acaso crees que puedo moverme tan bien como tú? -Le preguntó con una ceja alzada- Desde ahora, Yunkyung debería tener más cuidado contigo -Murmuró en un tono burlón.

Yeonhee se removió ante las palabras de su mejor amiga, esta tendría muchas oportunidades para burlase de ella de ahora en adelante.

-Quizás por eso no te atreves a participar en el club -Murmuró acercándose al oído de la mayor- Para que nuestra Suyun no tenga que cuidarte de forma extrema, porque suficiente tienes con Minju, ¿Cierto?.

¿Pero qué creen? Dos personas podían jugar a ese juego, si tanto le gusta burlarse, ella haría lo mismo.

-Bien jugado, Kim Yeonhee, muy bien jugado.

-Chaewon unnie.

Las dos amigas se separaron al ver a Suyun frente a ellas, Yeonhee lentamente se alejo para acercarse a Yunkyung que igual que ella miraba atentamente la escena. En una semana, esos dos se habían vuelto un poco inestables, quizás por la tensión que tenía Suyun en perfeccionar la coreografía dejando completamente de lado a Chaewon, sobre todo cuando esta última se altero por completo cuando su hermanito menor quedo enfermo y sus padres estaban fuera de la cuidad y no pudieron tomar el primer vuelo regreso a casa, a los pocos días la misma Chaewon había contraído la enfermedad y no había nadie más que su hermanito cuidándola.

Las dos chicas con el mismo apellido se miraron, por un momento el YeonYun creyó que sus amigas llorarían ahí frente a todo el club de baile y no sabrían que excusa darle a sus compañeros. Sin embargo, fue algo diferente a lo que ellas creyeron, Chaewon no vacilo ni un segundo en unir sus labios en un dulce y necesitado beso con Suyun.

Sus compañeras se quedaron sin habla, en realidad, todas veían la escena con la boca abierta sin poder creer lo que estaban presenciando sus propios ojos.

-Oh por dios.

-Ellas...

-Lo hicieron.

-¿Por qué?.

-Sabes lo doloroso que fue para Suyun no poder estar cien por ciento pendiente de Chaewon unnie cuando enfermo por su hermano.

-En cierto punto, es cierto -Concordó Yunkyung mirando a Yeonhee.

La peli anaranjada envidiaba bastante el valor de sus amigas, quizás ella necesita juntar más con ellas para recuperar su confianza y mandar a todos al diablo si no aceptan a su relación con la persona más pura del planeta.

-Yeonnie.

-¿Si?.

-Es momento de poder amarte sin barreras.

-¿Huh?.

Sin darle ni una sola explicación, acercó lentamente su rostro hacia la mayor antes de regalarle una sonrisa enamorada revelando cada uno de sus sentimientos.

-Te amo Yeonnie -Confeso sin temor la pelinaranja.

Una sonrisa se formo en los labios de Yeonhee, eso fue suficiente para Yunkyung que se permitió besar dulcemente los labios de la pelinegra.

Las dos pudieron escuchar la sorpresa en sus compañeras pero a ellos poco le importó. Al igual que sus amigas, están cansadas de esconderse y es su momento para amarse sin barreras.

Amor a escondidasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora