IDÍLICO |+18| KNJ

Treinta y ocho

-¿Eva?- expreso aquella mujer más alto como si no la hubiera escuchado la primera vez.

Sin embargo si era más sincera conmigo misma, sabía que quizá trataba de acelerar mi respuesta, quizá después de todo me conocía lo suficientemente bien como para saber que incluso después de tanto tiempo aún llegaba ese reflejo donde trataba de responder lo que ella deseaba escuchar.

-Claro que lo volví a ver- explique respondiendo su pregunta -Sin embargo nada fue igual... no hubo un adiós, ni un desliz de una noche, Namjoon tan solo dejó de verme como siempre lo había hecho... recuerdo haber estado tan molesta que si tan solo hubiera tenido la oportunidad de estar a solas con él hubiera golpeado su cara, para luego besar sus labios... quizá después de todo así de loca estaba- exprese negando con la cabeza mientras reía.

-No estabas loca- dijo como si buscara animarme, quizá antes hubiera sentido que era su trabajo sin embargo ahora podía entender que después de todo realmente aquello no era del todo necesario y pudo habérselo guardado o más bien evitado, sin embargo lo había dicho de corazón -Muchos usan aquella palabra de forma ligera, sin saber que nuestra mente que es increíble, hace que asimilemos todo aquello de forma que podamos manejarla, tan solo te protegía porque enfrentar el dolor era mucho peor pero después de todo lo lograste.

-Sin embargo eso desencadenó todo otro vez- dijo mientras revisaba los apuntes de su libreta -Terminar con él... Había buscado sentirme un poco mejor... realmente no puedo decir que lo recuerdo... muchas de las cosas fueron como lagunas mentales... pero a veces me planteo la idea que quizá todo eso debió pasar para entenderlo, para entender que tan mal estaba.

-Eso como te dije fue un gran avance- había expresado mientras sus ojos brillaban de emoción.

Y aquello había hecho que de la misma manera mi emoción apareciera, porque después de todo yo también lo sentía así, ella se alegraba y nada de eso era falso.

-Sin embargo dolió- dije volviendo a suspirar -Claro que dolió... se que todo el mundo creyó que solo había sido un capricho más... yo misma llegue a sentirlo así cuando lo volví hablar en terapia, sin embargo no todo fue falso, quizá no estaba cuerda, más bien no actuaba con todos mis sentidos pero si lo quise- completé.

-Aceptar nuestros sentimientos, errores y logros hacen que entendamos y sintamos más empatía por nosotros mismos, nos recuerda que somos humanos, nos equivocamos pero también somos dignos de ser amados.

-Pero después de todo quizá él tenía razón... Aquello jamás tuvo futuro y me costó mucho aceptarlo, realmente sólo bastaron días antes de que la abuela regresara a mi cabeza, y hablara una y otra vez, sin embargo aquello tan solo... había evitado aceptar que en realidad ya se había ido, supongo que tan solo necesitaba un adiós adecuando un momento donde la dejará ir y ya... todo pareció desplomarse... el hombre que amaba, la única amiga que pude conseguir y luego la abuela- todo se alejo de mi tan de repente que sentí que era el fin del mundo.

-¿Alguna vez se lo dijiste a Summer?- cuestionó, sin embargo pude sentir que ya sabía la respuesta.

-Ella había entrado a la universidad, empezó a conocer gente nueva, descubrió de cierta manera cuál era su vocación y lo que quería del mundo y yo tan solo sentí que me estanque, permanecí en el mismo lugar, atada al pasado que me costó superar, me había sentido avergonzada sin embargo ella aún creía que yo era genial, "un alma libre", y realmente fue difícil decirle que en realidad yo estaba bastante rota... fue ahí cuando supe que la quería a mi lado todo lo que me quedaba de vida, porque aquello jamás hizo que dejáramos de ser amigas, ella tan solo me abrazo y por primera vez me dijo que todo estaría bien... siempre había sido yo la que le decía eso, así que al escucharla aquello pareció reconfortante, sabe.

-Mencionaste que pronto serán las matrículas, ahora que te sientes mejor, ¿sabes lo que harás?- cuestionó, y que pesadilla había sido esa pregunta para mí, porque después de todo no era la primera persona que me lo cuestionaba, después de acabar el Instituto todo el mundo había estado preguntado una y otra vez que era lo que haría, pero sólo hasta esa vez sentí confianza.

-Estuve visitando un par de universidades... revisado la malla curricular de varias carreras, y en realidad hay cosas que me emocionan y se que lo he dicho antes pero ahora he podido descartar un par de carreras, de hecho hay cosas muy buenas, así que me tomaré mi tiempo, iré a mi paso... sin embargo por muy poco que suene de hecho creo que me interesa la restauración de antigüedades, quizá mi nostalgia y amor por lo pasado ayude a que pueda enfocarme en eso.

-Y dijiste que Summer pronto te vendrá a visitar, ¿verdad?...- expreso muy atenta a ver mi respuesta.

-Si... tiene vacaciones por fiestas así que la veré y eso me emociona- exprese.

-Eva- había vuelto a replicar -Puedo decir que realmente hemos avanzado mucho, las sesiones, y creo que es tiempo que empecemos a probar qué tal te va... qué tal si desde ahora empezamos a vernos una vez por mes.

Y a pesar de que en un principio la idea de tener que ir a terapia era una pesadilla para mí, después de tanto tiempo y muchos avances, entendí que en realidad ahora sentía pena de tener que dejar de ver a la doctora constantemente.

-Si- dije mientras me levantaba del sofá.

Me había despedido de ella y mientras salía de lugar había tomado un taxi para regresar a casa.

Mi teléfono había empezado a sonar.

-Ya llegué a casa... Realmente estoy asustada Eva- había dicho sin siquiera saludar esa voz irreconocible.

-Sabes que pase lo que pase lo solucionaremos- exprese sin dudar.

-¿Y si él ya no me ama?- cuestionó nerviosa.

-Lo superarás- replique riendo.

-Eres cruel- expreso -Y tú ¿que tal va esa terapia?- cuestionó ahora siendo ella la que me atacaba, como si se tratara de una competencia infantil.

-Pues... ya no huyo- concluí mientras reía -Espero verte pronto.

-Espero que sea de blanco y si no, pues un par de porros y alcohol nos vendrá bien.

-Supongo que sí, Summer.