¿Por qué Mafumafu odiaba tanto a los alfas? Porque ellos se aprovechan de su estatus en el mundo, y lastiman a los omegas, como si fueran un objeto de diversión.
Tuvo amigos cuando era niño, y eran buenos con él, o eso creyó. El día que llegaron los resultados del examen, todos los abrieron juntos. Cuando vio "omega" en su ficha, las miradas de sus amigos cambiaron, y al saber que era dominante, su desprecio aumentó.
¿Por qué? Nunca lo supo con exactitud, si obtenía buenas notas se quejaban diciendo que era una puta, y eso era el principio de sus insultos. Solo era un niño, tenía miedo.
No solo eran sus amigos, también su familia. Su hermano Sakata que siempre lo atesoraba, empezaba a odiarlo y culparlo por el bullying que Mafumafu recibía. Y su otro hermano Luz, que estudiaba en Estados Unidos, gradualmente se olvidó de él. Mafumafu dentro de él, asumía que todo era culpa suya.
Permitieron el bullying hacia él aún sabiéndolo, y eso dolía mucho; a excepción de su madre, que también es omega. Ella hizo todo lo posible para alejarlo de esos niños, y lo logró. Pero hubo algo que nunca había logrado, borrar el miedo de Mafumafu.
Por eso, su medicina era componer música y cantarla, cada vez que recuerda lo que pasó, el sentimiento de tristeza y molestia se juntan.
Mafumafu solo quiere gritar a veces, gritar mientras canta, para saber si alguien lo oye esta vez.
En aquel vacío parque, entona su voz y empieza a cantar.
— No importa cómo ni cuánto pase, hemos sido intoxicados e hipnotizados.
No puedo evitar llorar.
Siempre, sólo sé esconderme.
La tarea de ayer, otra vez no puedo resolverla.
He vivido sin excesos, pero ¿Por qué siento este vacío en el pecho?
Quiero desaparecer.Mafumafu sentía esa leve presión en el pecho una vez más. Y aquella voz interior que le repetía que todo estaría bien, era la única que le calmaba en momentos así. También sabía que dentro de él, uno de sus más grandes deseos era que nadie viviera lo mismo que él, que ningún omega tenga que sufrir por ser exactamente eso, un omega.
Escuchó unos pasos venir hacía él y se alarmó. Pero no tuvo la suficiente energía como para huir.
— Hola, yo te escuché. En realidad... me siento como la canción que acabas de cantar —dice una tranquila voz.
Frente a él, estaba un joven de cabellos castaños, que lo intentaba ver fijamente, con cierta emoción.
— Quién eres? —preguntó Mafumafu.
—Me llamo Urata, ¿cuál es tu nombre?
No sabía con certeza el porqué, pero ese pequeño le transmitía una sensación positiva y alegre. Y quiso confiar en él.
— Soy Mafumafu.
— Tienes una voz realmente hermosa, transmites muy bien las emociones —comenzó a alabarlo.
— Eh... No lo creo realmente, me dijeron que sueno como una chica —respondió sinceramente.
— Claro que no. Pero el tono de tu voz es realmente especial y única —dijo sentándose a su lado.
— Me dijiste que te sentías como la letra de la canción, ¿te pasa algo? —preguntó Mafumafu.
— Yo... estoy siendo acosado por un alfa —confesó.
Quiso lanzar mil insultos, pero se detuvo para no asustar al otro omega. En realidad odiaba tanto que los alfas fueran así. Y si por primera vez podría ayudar a otro omega en ese asunto, lo haría sin dudar.
— Eso está muy mal. Debemos hacer algo, no lo permitiré —habló Mafumafu.
— Realmente no sé qué hacer...
— ¿Estudias en alguna universidad?
— Sí, pronto terminaré la carrera.
— Genial, pasaré por ti todos los días y si algo pasa te defenderé sin importar qué, puedes confiar en mí, Urata. —respondió decidido.
Probablemente fue algo muy apresurado. Pero estaba seguro de que defendería a ese omega sin importar que pasara. Además, tenía la breve esperanza de hacer al menos un amigo.
— Muchas gracias —agradeció Urata.
Mafumafu después pidió su número, así podría hablar con él y conocerlo. Y no podía negar que estaba ciertamente emocionado por tener su primer amigo, después de mucho tiempo.
ESTÁS LEYENDO
Lindo Omega ✧ SoraMafu
FanficMafumafu es un omega dominante que jura odiar a los alfas debido a situaciones dolorosas de su pasado. Soraru es un alfa que se acaba de mudar para ampliar sus conocimientos, pero sin querer, termina viendo más allá de la belleza de Mafumafu y queda...