CRIS
Ayer la fiesta término algo tarde, nos la pasamos muy bien, dejando de lado lo de Eloy. Cuando despertamos Joana me ayudo a recoger toda la casa. Yo fui al cuarto para arreglar mi cama y en eso, se me cayó la mochila de Joana al suelo y se salieron todas sus cosas. MIERDA, me agache para recoger todo y volverlo a meter a su mochila y vi un bote de pastillas, leí para ver que era, pero la verdad tenía un nombre muy raro. Escuche como Joana se acercaba y guarde todo súper rápido y lo puse en su lugar. Joana entro a la habitación unos segundos después.
J: Che que ya quedo todo, aquí nunca hubo una fiesta jaja.
C: Muchas gracias, oye que... - no sabía si preguntarle de sus pastillas, me quede con la duda, no sabía para que eran - ...emm nada que quiero mostrarte algo.
No sabía cómo preguntarle de sus pastillas así que lo deje pasar, decidí mejor llevarla a mi azotea, realmente amaba ese lugar, es "mi lugar". Le cubrí los ojos a Joana con una pañoleta y la guie hacia allá. Cuando llegamos le destape los ojos.
JOANA
Cris me destapo los ojos y al principio la luz me invadió los ojos, pero poco a poco me acostumbre y estábamos en su azotea. La verdad tenía una vista increíble. Se veía todo Madrid.
J: Joder, cómo mola Cris... ¿y esto?
C: Nada, mi azotea, que es como... mi lugar ¿sabes? Y... me hacía ilusión enseñártela. Aquí subo cuando necesito penar, cuando estoy triste, me hace sentir mejor, me relaja.
J: Guapa – la tome de la cara y le di un beso en la frente –
Me sentía muy bien en con Cris, cuando estoy con ella todo es mejor. No quería perderla, pero creo que ya era momento de decirle de mi enfermedad, no era justo que no lo supiera, ella tenía derecho a decidir si quería o no estar conmigo después de decirle. Solo esperaba que quisiera seguir conmigo.
J: Cris, Te quiero – Lo dije sin pensarlo, simplemente lo solté – Emm solo quería decirte eso, antes de lo que diré después. – note la cara de preocupación de Cris. –
J: pfff Okay, a ver, todo este tiempo... te estuve intentando ocultar... bueno más que ocultar, no sabía cómo decírtelo. Emmm tengo una enfermedad, mental. Se llama TLP trastorno límite de la personalidad. Y bueno, esta enfermedad hace que me den venadas, yo que sé, cambios de humor muy bruscos y bueno más cosas. Y bueno, no te lo quería decir porque cuando estoy bien, me creo que soy normal. Y bebo y fumo, yo que sé... que no debería. Pero... era justo que lo supieras.
C: Eh Joana, es que no sé qué decir. Emm, es que no sé.
J: No te preocupes no tienes que decir nada. – Esto último lo dije algo decepcionada – Sabes, mejor me voy.
C: Joana, yo necesito tiempo, necesito pensar, digerir todo lo que me has dicho.
J: Ya, em si yo ya me voy.
Baje al piso de Cris y fui por mis cosas, definitivamente ya había perdido a Cris, eso de "necesito tiempo" es una excusa para dejarme. Y no la culpo quien querría estar con una loca como yo. En cuanto tome mis cosas, Salí corriendo a mi casa, no podía seguir ahí. Cuando llegue no había nadie, seguramente mis padres estaban trabajando, como siempre.
En ese momento me sentí muy sola y me empezó dar un brote, no podía pensar en nada, otra vez empecé una guerra con mi cabeza la cual estaba perdiendo. Muchos pensamientos negativos me aplastaban. "Estas loca, así nadie te va a querer" "siempre vas a estar sola" "Nadie te soporta" "Ni tus padres te quieren, por eso nunca están." "Cris tampoco te quiere, solo quiere alejarse de ti". No podía dejar de pensar, en todo eso, realmente estaba teniendo un brote fuerte, me dio un ataque de ira y después supongo que me desmaye porque no recuerdo nada.
MAMÁ JOANA
Después de un día largo de trabajo llegue a casa, cuando entre, encontré retratos en el suelo, papeles rotos, por un momento creí que habían entrado a robar, pero las cosas de valor estaban en su lugar. JOANA. Fui a su habitación y todo estaba hecho un verdadero desastre, la pared tenía una unas marcas como de golpes y unas pequeñas manchas de sangre. Cuando gire la mirada encontré a Joana, tirada en el suelo. Lo primero que hice fue tirarme a su lado, la tome de la cabeza y le di pequeños golpecitos en la mejilla para que reaccionara. Poco a poco se fue despertado. Parece que se desmayó después de un brote muy fuerte.
JOANA
Me estaba despertando, y vi a mi madre a mi lado tomándome la cabeza, estaba en el suelo y la verdad no comprendía nada. Me dolían mucho los las manos.
J: ¿Qué paso?
M: Estas bien, ¿Cómo te sientes?
J: Emmm bien creo, algo aturdida, me duelen algo las manos ¿Pero qué paso? Solo recuerdo haber llegado a casa y me dio un brote y nada, desperté.
M: supongo que te dio un brote de los fuertes y rompiste muchas cosas y golpeaste la pared, por eso te duelen las manos.
J: Lo lamento mamá, yo yo no quería. – mis ojos empezaron a llenarse de lágrimas –
M: No pasa nada, lo importante es que estas bien Okay, ya paso todo. Pero a ver ayúdame a entender ¿Qué paso?
Le empecé a contar a mi madre absolutamente todo, en cierto punto me ayudo bastante sacarlo todo, contárselo me hizo sentir algo relajada. Me tome la medicación y me fui a dormir. Tenía que hablar con cris, necesitaba saber cómo estaba, que era lo que pensaba.
