Borracho

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JOANA

Estaban pasando los días y la verdad es que todo iba muy bien, mi relación con Cris iba increíble, ya llevaba casi un mes desde que no me daba un brote, y el lunes empezábamos con los primeros exámenes. Estaba en casa viendo películas, y como siempre estaba sola, mis padres seguían trabajando. Me quede algo dormida, y no desperté hasta después de cómo 2hr, cuando desperté vi a mi padre sentado en la mesa de la cocina bebiendo una cerveza, bueno en realidad ya llevaba varias, no me había enterado ni cuando entro a la casa.

J: Hola, ¿Qué haces aquí?

P: Pues nada, estoy en mi casa ¿hay algún problema? – Se escuchaba algo borracho

J: Em no ninguno, solo que siempre estás trabajando y nunca llegas temprano.

P: Ya bueno, no es tu asunto, vete a tu cuarto o yo que sé.

J: Oye tranquilo sí, yo solo pregunte. Se me hizo raro verte aquí y ya está. Pero tienes razón, mejor me voy que estas insoportable hoy.

P: Ya pues vete y punto.

Me fui a mi cuarto y me puse a escuchar música, la verdad no quería seguí hablando con mi padre, cada vez que hablaba con el terminábamos peleando y últimamente todo estaba muy bien, así que no lo iba a arruinar por mi padre. Me quede un buen rato ahí, acostada hasta que escuche como algunas cosas se caían y a mi padre gritando del otro lado de la puerta. Cuando salí vi a mi madre llorando y con el labio roto y a mi padre histérico. Cuando estaba a punto de golpearla de nuevo me metí.

J: ¿Qué te pasa? No la vuelvas a tocar. – se veía que mi papá ya iba muy borracho -

P: Tú no te metas. O también te va a tocar a ti.

M: Joana, tranquila todo está bien.

J: No mamá no voy dejar que nadie te toque y menos este imbécil.

P: A mí no me dices así, puta loca. – Justo en ese momento siento un gran ardor en mi rostro y mi boca sabia a sangre, nunca me había llevado muy bien con mi padre, pero nunca me había golpeado por más fuerte que fuera la pelea, quede en shock. -

M: No vuelvas a tocar a mi hija, lárgate de aquí y llévate todas tus cosas, no te quiero volver a ver.

Mi padre, tomo las llaves del coche y salió del piso. Mi madre se puso a mi lado y me abrazo. Yo aún no reaccionaba, nunca creí que mi padre me golpearía de esa manera. Mi madre no paraba de llorar y yo no sabía qué hacer. Mi madre se fue a su cuarto y se encerró, yo hice lo mismo. No estaba en brote, pero si estaba muy triste, no tenía una relación muy buena con mi padre, pero bueno nadie nunca se espera que les pase algo así. Me puse a dibujar para desahogarme y me puse los audífonos para escuchar algo de música. Necesitaba distraerme y no pensar en eso. Hice fácil unos 7 dibujos, y me quede dormida después de un rato, estaba cansada mentalmente. Fue un día duro, solo quería que fuera mañana para ver a Cris.

CRIS

El lunes llegando al instituto vi a Joana en la entrada un poco rara. Me acerque a ella y la abrace por la espalda.

C: Hola hermosa, ¿Qué tienes? ¿Qué tal tu fin?... Oye espera, que te paso en la cara – me preocupe porque se veía que tenía un golpe en la cara y el labio partido. -

J: Pues...

C: Joana, recuerda que puedes confiar en mí, entre nosotras no hay secretos.

J: Pffff pues, estuvo fatal, mi padre se puso súper borracho y llego a casa más temprano de lo normal y se peleó con mi mama, la golpeo, yo intente detenerlo y me soltó una hostia en la cara, por eso el golpe. Mi madre lo corrió de casa y pues nada, ella esta triste y la verdad yo igual. No tengo una buena relación con mi padre, pero esto me afecta aun así.

C: Pues normal que te afecte bebe, es tu padre. Ven ya paso. Dices que estaba borracho ¿no? Igual y pues no sé, ahorita se esté arrepintiendo. Cuando este borracho haces cosas de las que luego te arrepientes.

J: Ya bueno, no quiero pensar en eso ahorita.

C: Esta bien, venga vamos. Te acompaño a tu clase.

Acompañe a Joana a su clase y luego me fui a la mía. Odiaba verla triste, me partía el corazón en dos. Cuando terminaron las clases acompañe a Joana a su piso y en el portón de su edificio estaba su padre. Joana en cuanto lo vio se le tenso la mandíbula.

JOANA

Cris me acompaño a mi piso y cuando íbamos llegando en la entrada estaba mi padre. Me puse algo tensa de verlo ahí, no sabía cómo iba a reaccionar. Pero me arme de valor para decir algo.

J: ¿Qué haces aquí?

P: Em hola, bueno me gustaría hablar contigo. ¿Se podrá hablar a solas?

J: No, lo que tengas que decirme lo dices frente a Cris.

P: Ya son buenas amigas ¿no?

J: Es mi novia. – dije tomándole la mano a Cris –

P: Oh no lo sabía...

C: Hola señor

J: Bueno a que venias?

P: Ya bueno, quería disculparen, yo estaba borracho, y no me sentía bien. Nunca te hubiera golpeado ni a ti ni a tu madre. En serio lo lamento. Sé que tú y yo no tenemos la mejor relación Joana, pero te amo y eres mi hija. Ahora me estoy quedando en un hotel. No voy a volver hasta ganarme la confianza tuya y de tu madre de nuevo. Las amo y me siento terrible por lo que hice. Voy a cambiar, pedí que me redujeran las horas en el trabajo para poder pasar más tiempo juntos. Recuperar nuestra relación padre e hija.

No sabía que decir, definitivamente estaba en shock. Cuando era pequeña mi papá y yo teníamos una relación increíble. La verdad es que me encantaría retomar esa relación, aunque será difícil y eso lo sé. Solo sentía la mano de Cris que me apretaba un poco fuerte en señal de apoyo.

P: ¿No vas a decir nada?

J: Necesito pensar... pero te perdono. Y creo que es mejor que por ahora te vayas, te marco cualquier cosa.

P: si, está bien te dejare tranquila. – Se giró hacia cris – Adiós Cris, un placer conocerte. Ojala nos hubieran presentado en otra circunstancia.

C: Em igualmente señor, un placer.

Mi padre se fue y Cris y yo entramos a mi piso.

C: Oye, ¿Cómo estás?

J: Bien, emm no sé, definitivamente eso no me lo esperaba. No sabía que decirle.

C: Oye tranqui, sabes que estoy aquí para ti. Te amo Okay, y nunca te voy a dejar.

Nos fuimos al sofá y nos pusimos a ver series un rato. La simple presencia de cris me relajo, si hubiera estado sola, probablemente me hubiera dado un brote, pero con Cris, eso se puede evitar. Y eso me hizo sentir muy tranquila, tanto que me quede dormida recostada en sus piernas. No desperté hasta que se hizo tarde y la madre de cris la presionaba para que regresara a casa, ella se fue y al poco tiempo mama llego y cenamos. 

Todo fluyeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora