⭐Capítulo 49⭐

224 48 22
                                    

"La vida trae tantas complicaciones que parece estar maldita, mientras la muerte con su sencillez ya ha enamorado a cientos de corazones destrozados, y el otro porcentaje se quedan sabiendo que están muertos en vida y solo están esperando a que vayan por ellos porque están cansados de dar el primer paso"

🌸🌼🌻-Belosnezkha-🌻🌼🌸

°

°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°

Lían

Como lo echaba de menos, lo extrañé en todos los sentidos, incluso me hacía falta sentir mi ritmo cardíaco acelerado cuando sentía su piel con la mía.

Estamos acostados en la camilla, nos acomodamos lo más que pudimos después de haber hecho el amor. Cada uno tiene un auricular escuchando desde su celular aquella canción que bailamos el día que nos reconciliamos. Mi cabeza descansa sobre su hombro izquierdo, mientras él con ese mismo brazo acaricia mi cabello y canta con voz gruesa y en susurro.

Esta muy tarde, ambos deberíamos estar durmiendo, pero nos añoramos lo suficiente como para que nuestros ojos decidan cerrarse. Sentirlo de nuevo me hace sentir relajada, poder tener mi cuerpo desnudo junto al de él es lo más cómoda que he podido estar.

— Ya debes dormir —habló Derek, retirando el auricular de mi oído. Niego con mi cabeza y acaricio su torso desnudo—. Estás más cabeza dura que antes. Ven, te ayudo a vestirte.

—Quiero seguir así, puedes dormir aquí conmigo —añadí levantando un poco mi mirada.  Este humedece su labio inferior y asiente.

—Pero primero pongámonos ropa.

Me retiro de su hombro para que pueda levantarse, se sienta en la cama, toma su bóxer para luego ponérselo y se levanta por completo.

—Tengo hambre. —Me siento en la cama y lo miro con una sonrisa.

Termina de ponerse el pantalón y camina hasta donde estoy.

—Iré a comprarte algo de comer cuando termine. — Se agacha, levanta mi braga roja y me la muestra con una sonrisa de lado—. ¿Se dejaría poner esto?

(...)

Es un alivio saber que por fin podré irme de aquí, que volveré a ver a mis cachorros y comer mejor, pero antes debo ir a ver a alguien.

El doctor me ha dado las últimas indicaciones, y yo le pregunté una y otra vez que sino hay un medicamento que mejore las náuseas, y su respuesta siguió siendo la misma: "Es normal, posiblemente a los 3 meses mejorará".  ¡Quiero que mejore ahora!

Soy una embarazada muy..., Muy hormonal y últimamente ni yo misma me soporto, pero la ventaja de eso es que consigo lo que quiero y cuando quiero; ejemplo el helado que me estoy comiendo como si fuera una niña de 5 años después de haber peleado tanto por él, con una sonrisa sin importar que Derek este frente a mí con los brazos cruzados intentando sobrellevar mi actitud.

—No fue para tanto  —hablé rompiendo el silencio.

—No, para nada. —contestó en un susurro y puedo notar su sarcasmo —. ¿Satisfecha con el helado?

Asiento.

Estamos esperando a que llegue mi papá y mi hermano mayor, para luego bajar a ver a Héctor y después irnos.

—Sabes que no tengo problemas para complacerte, pero te pones histérica sino lo hacen a tu modo.

Me escojo de hombros y como más helado.

—Así me amas —añadí.

—Gracias a Dios ya he tratado con una embarazada, porque te aseguro que yo sería el histérico en esta situación.

Dejo de comer helado y lo miro extrañada.

—¿Cuál embarazo?

—Gretchen estubo embarazada una vez. —Alzo mis cejas—. Luego te cuento.

Miramos hacia la puerta al escuchar como alguien toca. Y por el pequeño cristal de la puerta noto que es el doctor, éste asoma su cabeza después de abrir, y habla:

—¿Podemos hablar, señor Schmidt?

—Sí —contestó Derek. Éste me mira y me hace seña de que vuelve enseguida para después salir de la habitación con el doctor, cerrado la puerta a su vez.

Sigo viéndolos por la pequeña ventanilla. Noto los gestos de cada uno y sus labios moverse al hablar pero no escucho nada de lo que dicen.

Sigo comiendo el helado mientras miro la escena, hasta que un pensamiento llega a mi mente haciendo que mis ojos se abran. ¿Será que alguien nos vio a él y a mí teniendo relaciones por ahí? Es que nada más a mí me dan ganas de tener sexo en una habitación de un hospital donde cualquiera se puede dar cuenta.

¿Cómo no pude pensar en eso? ¿Será que gemi demasiado alto mientras alguien pasaba? Lo más seguro es que le dimo una vista excelente para su gusto o lo contrario.

¿Cómo nos íbamos acordar de eso? Derek parecía tener todo el control aunque sé que posiblemente no quería tenerlo, y yo, yo estaba disfrutando demasiado cabalgar mi caballo hecho humano queriendo más pero el alemán ese no quería hacerme... Hacernos daño.

Parpadeo varias veces al sentir esas ya reconocidas ganas. Llevo más helado a mi boca y noto la mirada de Derek sobre mí detrás de la ventanilla mientras el doctor le sigue hablando, su mirada no parece avergonzada, se me ve más como triste y preocupada.

Veo como mi hermano y mi papá llegan y se quedan parados con aquellos dos, no puedo ver sus expresiones porque la ventanilla no es tan grande como para verlos a los cuatros. Éstos después de unos segundos entran a la habitación extraños y espero a que digan algo pero no lo hacen.

—¿Qué fue lo que pasó?

—Eh... Nada, ya sabes, el doctor dándonos algunos detallitos —habló Kevin.

—¿Me ves la cara de tonta? —pregunté entrecerrando mis ojos.

—Hija, no ha pasado nada, ¿Verdad que no, Derek?

Miro a Derek pero éste no dice nada, solo se sienta en el sillón.

—Esperaremos un rato más para podernos ir — habló Derek sin responder la pregunta de mi papá. Éste no me mira y eso me da más  curiosidad.

—Ya díganme qué está pasando, ¿Acaso no estoy bien del todo o el embarazo? ¿Qué está pasando, Derek?

Éste suspira y niega sin mirarme.

—Derek —susurro.

—Tranquila —contestó.

—¿Me siguen viendo la cara de tonta? Sé que está pasando algo y quiero saber ahora y no después. —Ninguno de los tres contesta. Resoplo—. Bien, ya que no me quieren decir, ¿Podemos ir a ver a Héctor?

Éstos se miran entre sí, y mi papá habla:

—Eso tampoco se podrá.

—Tampoco. ¿Por qué no? —pregunté mirándolo a todos— ¿Le pasó algo?

Derek  me mira y asiente.

—Héctor acaba de fallecer. 

🌻🌼🌸🌻🌼🌸🌻🌼🌸🌻🌼🌸🌻🌼🌸

Le decimos a Héctor adiós, nos vemos nunca. Fue un buen soldado en los últimos días.😂

50 días Para Enamorarte✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora