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Capítulo 49:

Salieron de la cuidad y se ocultaron en un camino inhóspito de tierra mientras pensaban que hacer. Astrid le dijo a la policía que estaban siendo perseguidos, le dió la descripción del auto y la patente además que pidió protección para su padre.

- ¿Qué demonios pasa?- gruñe Demián.

- Cedric, nos dijo que era algo así como un ajuste de cuenta pero si Alessandro pagaba todo se terminaría- sigue Christian.

- tienen a Magnus, a Aiden y a Killian- contesta Mackenzie, - y ahora a mi padre y a Zac-

Un silencio ensordecedor se hace presente por unos minutos hasta que la voz de Astrid vuelve a la vida.

- podemos ir a la bodega, ver si están allí, ayudar y llamar a la policía-

- ni en broma- escupe Demián, - es demasiado peligroso-

- Astrid- sigue Mackenzie ignorando totalmente a Demián, -Llévanos-

- Demián, tiene razón- Habla Christian, - Alessandro, le pidió a Cedric que cuide de ustedes y siento que también nos pidió a nosotros-

- no es tu deber protegernos- sigue Elisabeth quien en este momento no sabe porque actúa tan a la defensiva.

- no lo es- repone Christian, - pero lo haremos de todas formas-

- y de todas formas iremos allá-

- ¡Bien!- salta Demián, soltando un suspiro exasperado, - haremos esto, iremos allá, veremos si están allí y llamaremos a la policía y no vamos a intervenir, ¿okey?-

Las hermanas parecen medio sonrier por la respuesta y asiente con la cabeza.

- yo conduzco- salta Astrid que antes que nadie se acomoda en el asiento del chofer. Ella parece ser la más decidida a ir a ese lugar, como sí de verdad le importará el bienestar de todos los que están en las manos de Tyler.

Era más que claro, que Alessandro y Zac,  llegaría primero que ellas. Cuando bajan del auto son interceptado por dos hombres armados, que los revisan en busca de alguna arma, micrófono o algo. Además que se encargaron de ver si ellos no venían con alguien más como la policía ya que un auto se ubicó justo en la entrada del camino que lleva a la bodega pero lo que no saben es que, Astrid ya estuvo alli y sabe otro camino que la deja detrás de la bodega, lejos de la vista de los hombres que "cuidan la entrada".

Acto seguido, Alessandro y Zac son llevados adentro del sucio y deshabitado lugar. Al instante que entran, ven al sujeto detrás de todo, Tyler, alto, moreno y una fría sonrisa en su rostro dejando muy al descubierto el arma en la cinturilla de su pantalón, a su lado está Magus arrodillado con Killian y Aiden, atados de manos y contando a los dos hombres que trajeron a Alessandro, hay dos más con Tyler.

- ¡Hola!- habla Tyler, - hermano- sonrie asqueado pero no más que Alessandro con la confusión en su rostro, - ¿No sabías?- rie sin humor y levanta del piso a Magnus, - cuéntale la historia-

Magnus moja sus labios secos con su lengua, - Blackburn, tuvo otro hijo . Es él-

- ¡Vez! ¡hermano!- sonríe de lado.

- No me interesa- escupe Alessandro incapaz de ocultar la rabia que siente por este nuevo sujeto, -¿Hiciste todo esto por dinero?-

- ¡Es mi dinero!- gruñe y eso resuena en cada rincón de la vacía bodega y cuándo está por decir algo más, un hombre entra en la bodega, agitado.

- señor- habla con la respiración entrecortada, - No...No las pude traer- por inercia mira a Alessandro.

- ¿Qué dijiste?-