No somos pecadores (2.5)

17.

Connor se lamió los labios y tiró de Christian. El rubio soltó un jadeo sorprendido y Connor un gemido doloroso. Ouch.

—¿Qué haces?—Christian observó las manos de Connor rodeando su cuerpo desde atrás, el pecho desnudo del moreno rozaba con su espalda. Christian agradeció tener el uniforme, así podría separar sus cuerpos, más que sea por una delgada capa.

—Quédate quieto.—Murmuró Connor en su oído y Christian se estremeció. Los labios húmedos de Connor empezaron a dejar besos lentos desde su lóbulo hasta el cuello, el descenso era delicioso y suave.

Christian se contrajo cuando Connor succionó en la curvatura de su cuello y hombro.

—Oye...—Christian sentía el deber de empujarlo. Esto estaba mal. Era incorrecto, dos hombres no podían estar haciendo aquello. Y mucho menos alguien como él. Era algo inaudito. Podrían castigarlos de una forma muy dura y dolorosa si los encontraban en aquella posición tan...

Tal vez lo prohibido le prendió a Christian. Sintió algo formándose en su vientre bajo, su entrepierna empezó a palpitar y sintió sus pantalones muy ajustados mientras Connor seguía mordisqueando su cuello. Las manos del moreno acariciaron su pecho por encima de la ropa. Los dedos de Connor rozaron sus pezones a través de la prenda, Christian gimió...Estaban duros y sensibles.

Connor suspiró.

—Creo que aparte de molestarte...Me va a encantar hacerte gemir...—Connor en un abrir y cerrar de ojos, desabotonó la ropa de Christian y metió sus manos en ella, sus manos estaban frías contra la piel ardiente de Christian.

El rubio se encogió al sentir las caricias de Connor.

—Espera...—Consiguió decir.

—No.—Connor arrimó más a Christian contra sí, y este pudo sentí un bulto rozando su trasero.

—Ah...—Se sintió avergonzado.

—Quiero hacerte sentir bien.—Connor habló tan roncamente que hizo cosas en el interior de Christian.—Déjame hacerlo, por favor. Quiero mostrarte lo bien que se siente.—Connor se acercó a su oído nuevamente.—Quiero observarte mientras te vienes.

Christian solo apretó los ojos con fuerza y sintió su cabeza moverse de arriba hacia abajo en un asentimiento.

Una mano de Connor se deslizó por su vientre y se coló por sus pantalones, Christian miró horrorizado como los dedos largos de Connor rodeaban firmemente su propio miembro y lo sacaba de sus bóxers.

—Connor...—Christian jadeó, percatándose de que tal vez era una pésima idea hacer esto. Él sabía que se iba a arrepentir más tarde, querría matarse, y probablemente hasta se lo contaría al Padre para no sentir culpa.

Se estaba dejando llevar por la lujuria, un pecado. Él estaba sucumbiendo a la tentación carnal, a los deseos y necesidades básicas y primitivas del cuerpo...Él era mejor que esto, él estaba preparándose para ser un sacerdote, entonces, ¿qué estaba haciendo? Él debía su castidad, su amor, su cuerpo y su devoción a Dios...No a otro hombre. No a un hombre llamado Connor. Un chico menor que él, y sobre todo, un chico que no tenía ni la mayoría de edad.

Todo estaba mal por todos lados, por muchos motivos...

Sin embargo, las manos de Connor sobre su cuerpo se sentía jodidamente bien.

—Connor...—Inclinó su cabeza hacia Connor, sus ojos verdes estaban vidriosos, sus pupilas estaban tan dilatas mientras miraban a Christian que el rubio se sentía complacido al provocar esto en él.

La mano de Connor se movió rápidamente de arriba abajo, su dedo pulgar acariciando la punta del miembro de Christian, el líquido preseminal chorreando y escurriéndose.

Christian miró su propio miembro siendo masturbado por otra persona. Se tapó la boca para evitar un gemido.

—Quiero escucharte.—Demandó Connor mientras peñizcó un pezón del rubio.

Christian sacudió la cabeza avergonzado. Su voz salía tan lasciva y descarada. Como si fuera...

—Déjate llevar. Aquí solo estamos tú y yo...—Connor lo acarició más rápido.

Los dedos del pie de Christian se enroscaron. Mierda. Se sentía tan bien...

Las caderas de Connor empujaron hacia él, y Christian pudo sentir más el miembro erecto de Connor en su trasero. Eso fue suficiente para venirse con un largo gemido.

Se dejó caer en el pecho de Connor, mientras trataba de controlar su respiración, su pecho subía rápidamente, se encontraba temblando, su cabeza daba vueltas. Ni siquiera era capaz de pensar con claridad. Un cansancio extraño y nuevo lo invadió, pues no era común aquel acto en él, sentía muchas energías agotadas.

Solo sintió a Connor moverse, lo recostó y el moreno se posicionó encima de él, a horcajadas. Christian medio adormilado lo miró desde abajo.

Connor se desabrochó su propio pantalón y sacó su miembro.

Christian abrió los ojos sorprendido pero no dijo nada. Los ojos verdes de Connor recorrieron el cuerpo de Christian mientras daba tirones veloces a su miembro, su lengua se pasó por sus labios y se inclinó para besar a Christian con fuerza.

El rubio se quejó pero se dejó besar ferozmente. Connor mordió su labio mientras empezaba a respirar pesadamente, descendió un poco y se aferró al pezón de Christian, lo mordió mientras venía.

Christian gritó de dolor y placer.

Un líquido espeso y caliente cayó sobre su vientre. Connor se dejó caer encima de él.

—Esto no me va a hacer olvidar que debo reportar lo de tus compañeros.—Dijo Christian con el aire contenido, Connor pesaba.

—Olvídalo.—Respondió Connor abrazándolo.

—No, ellos también deben ser tratados como te trataron a ti. No puedo permitir que hayas sido el único quien recibiera ese castigo.

Connor no dijo nada. Christian tampoco. Ninguno hizo ningún comentario sobre lo que acaba de pasar.

Christian deseaba que nunca llegara el momento de tocar el tema.

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Amén 🙏 NSKSKSK