Dos chicos caminaban por la calle, ambos sosteniendo una bolsa de comida. Liam platicaba con Zayn de algo sobre su carrera y lo difícil que era. Zayn, para sorpresa de algunos, le estaba prestando genuina atención y preguntaba cuándo no entendía algo de lo que hablaba Liam.
Para Zayn, los ojos de Liam parecían tener un brillo cuando hablaba de algo que le apasionaba, el moreno muy pocas veces podía presenciar aquel brillo en algún mortal.
—Oh.—Liam paro mirando el cartel de la tienda.—Le prometí a Cody llevarle una recompensa.—Dijo con una tímida sonrisa.—¿Podemos entrar? Prometo que no tardaré.—Zayn asintió sin tomar le importancia.
Liam empujó la puerta sonriendo a la chica de la caja antes de encaminar a lo que era una sección especialmente para gatos. Miró la gran variedad de juguetes.
—Llevale este.—Dijo Zayn sosteniendo a un ratón de goma que al apretarlo soltaba un sonido. El moreno contuvo su sonrisa al imaginar a Caleb jugar con eso.
—Espero le guste. Suele ser muy gruñón, me recuerda a ti cuando recién te conocí.—Dijo con una sonrisa traviesa tomando el juguete junto con otro y caminar a la caja.
Zayn rodo los ojos ignorando por completo el comentario del castaño, ya que si, el seguía siendo un gruñón con la mayoría de las personas que conocía, posiblemente las únicas personas con quien podía entablar más de dos oraciones eran Louis y Liam, tampoco es que le importe conocer a los de aquí, el solo quiere averiguar sobre la madre de Liam y sobre su padre, así que tampoco busca una amistad con el castaño.
Siguieron caminando, Liam era quien evidentemente hablaba más de los dos, pero al castaño no parecía importarle se quien llevara adelante la conversación. Aunque no quiera una amistad con el castaño tenía curiosidad por él, por saber como es que podía oler a tristeza y plasmar una sonrisa en su rostro, porqué sus ojos brillaban cuando hablaba de cosas tan normales, entre otras cosas.
Liam sacó la llave de su departamento y la dejó abierta dejando que Zayn pasara primero. De inmediato un felino color negro salto del sofá y gruñó a Zayn antes de restregarse en la pierna de Liam.
El moreno alzó una ceja mirando a su hermano, pero este parecía ignorarlo, parecía que Caleb realmente disfrutaba de las caricias del castaño.
—Te traje dos regalos, espero te gusten.—Liam saco los dos objetos de su bolsa y los dejo en el piso.—Ire a cenar y servirte la cena.—Dio una palmadita en su cabeza antes de alzarse y sonreírle a Zayn.—Me lavo las manos y cenamos.
Liam no parecía incómodo con la idea de que lo viera hablar a su mascota como si esta lo escuchara o de Zayn cenando en su casa por segunda vez. El castaño fue quien había propuesto el cenar juntos y Zayn aceptó para sorpresa de Liam.
—¡Tengo jugo de manzana y de naranja!—Liam grito desde la cocina, Zayn miro a Caleb, con la punta del pie le dio un suave golpe en el vientre y este le gruñó mostrando sus colmillos.
—De naranja esta bien.—Contestó por lo alto y dio otro golpe al gato soltando una risa divertida.—No puedes hacer nada.—Zayn se pudo imaginar a su hermano rodar los ojos con molestia.
Ambos se sentaron en la sala, Liam prendió la televisión y puso en un canal de películas, le dio su vaso de jugo a Zayn y sacó su charola de sushi, el moreno lo imitó y miró los dos palos con confusión. Cody se había instalado en el regazo de Liam y lo miraba atento, de nuevo imagino la sonrisa burlona que le daba.
Liam despegó los palillos y sin más tomo uno de sus rollos remojando un poco en la salsa para llevarlo a su boca. Liam lo miró con las mejillas infladas, sus ojos viajaron a sus manos y de nuevo a la cara de Zayn. Trago su comida antes de hablar.
—Puedo prestarte un tenedor si no los sabes usar.—Levantó los palillos. Dejó su charola sobre la pequeña mesa frente a él.—Primero tienes que despegarlos.—Tomo los palillos de la mano del Moreno y los despegó.—Este lo pones aquí.—Tomó un palillo y lo puso de la forma en que el lo tenía.—Y con este vas a tomar las cosas.—Movio el dedo de Zayn junto con el palillo. Le sonrió y regresó a su comida llevando otro pedazo a su boca.—Solo es práctica.—Zayn jamás en su vida se había sentido tan avergonzado como ahora lo estaba, peor aún teniendo la mirada del maldito gato sobre él.
Agarro con torpeza el rollito y Liam le dio un pulgar arriba que le hizo rodar un poco los ojos pero sin darse cuenta con una sonrisa en su rostro.
—¿Tú madre te enseñó a usarlos?—Dijo Zayn con falsa inocencia mientras tomaba otro rollo.
—Mi papá, solía enseñarme sobre diferentes culturas.—Se encogió de hombros. Zayn noto que no se había molestado en negar que no conocía a su madre.—Incluso me enseñó un poco de español y francés.—Una pequeña risa salió de sus labios, pero su olor era de tristeza y sus ojos ya no brillaban.
—¿Y dónde está él?—Zayn era muy bueno mintiendo, tal vez debería dejar de juntarse con Caleb.
—Murió hace un año.—Hizo una mueca.
—Oh.—¿Deberia decir algo como lo hacían los mortales? Nunca entendió porque la gente decía lo siento.—Debio ser difícil para ti y tu madre.—Caleb le soltó un casi inaudible gruñido y se enrosco más en el regazo del castaño.
—Si lo fue, para mí.—Dio un sorbo a su jugo.—No lo sé para ella, no estoy seguro de que lo sepa.—Se encogió de hombros.—No la conozco.—Zayn llevo un rollo a su boca. Bien y ahora que se supone que diga.
—Oh, supongo que perdón.—Liam soltó una tierna risa y negó con la cabeza.
—El tema de mi mamá no me importa, no puedo sufrir por alguien que no conozco y bueno tampoco es que su amor me hiciera falta.—Le dio una sonrisa aunque Zayn se esforzó por no fruncir el ceño ante el horrible olor de tristeza que podía sentir. Caleb soltó un gruñido y resgrego su cabeza en el vientre de Liam quien de inmediato empezó a acariciar detrás de sus orejitas.
—Si te hace sentir mejor, mi padre es un promiscuo que tiene hijos regados por doquier.—Liam lo miró divertido mientras Zayn se encogió de hombros.
No mentía, en realidad había un 99.9% de que su padre tuviera hijos bastados regados por el mundo, hijos que jamás se iba a tomar la molestia de reconocer como propios. Para Hades sólo existían sus 15 hijos, desde Achilles hasta Caleb y no molestaría en averiguar sobre más hijos.
—Bueno, debe ser difícil para tu mamá.—Zayn se encogió de hombros.
Persefone, su madre no le tomaba importancia a lo que sea que Hades hiciera, claro que ante los ojos de Zeus y los demás dioses del Olimpo ellos estaban casados, más a la fuerza que por amor. Zayn también estaba un 99.9% seguro que todo lo que su madre sentía por Hades era repulsión, pero a Persefone le encantaba mentir frente a él como si fueran la pareja perfecta y su padre no se acostara con cualquier demonio en su reino.
—Bueno, a mamá le gusta fingir que no sabe de eso.—Frunció el ceño. Debería estar sacando información de Liam, no contando su vida.
—Tu padre es un idiota.—Dijo Liam y Zayn asintió en acuerdo, incluso Caleb asintió mientras se restregaba en el castaño.
—Y no conoces a su hermano, es un anciano con delirios de grandeza que al igual que mi viejo le gusta tener hijos regados por doquier.—Liam soltó una carcajada y Zayn sonrió de lado al no sentir el olor a tristeza.
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No les pasa que 💕❣️😍Caleb💕❣️😍
Ya posiblemente Caleb si es mi personaje favorito 😔🤘🏼
Gracias por todos sus comentarios, me alegra saber que esta historia les está gustando 🥺
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Dioses
FantasiaLiam es un semi-dios, hijo de la diosa Atenea, el nunca creyó las historias que su padre contaba. Zayn es un arrogante dios, hijo del dios Hades y la diosa Persefone. Es mandado a cuidar del hijo de Atenea.