Los intensos rayos de sol entraban por la ventana, las cortinas abiertas es su totalidad no limitaban a estos, golpeaban con fuerza el rostro de aquel chico sobre el negro sofá. En algún momento de la noche había bajado sus pies y su cuello se recargaba en el respaldo del sofá.
Liam cerró los ojos con fuerza cuando sintió la luz golpear estos, su mejilla ardía posiblemente el sol golpeando su mejilla. Abrió la boca sintiendo el desagradable sabor de alcohol, hizo una mueca y abrió los ojos por completo esta vez. Frunció el ceño mirando la ventana cerrada pero con las cortinas abiertas. ¿Cuándo había cambiado sus cortinas blancas por unas grises tan feas?
Se sentó derecho en el sofá sintiendo el dolor en su cuello al estar en una posición tan incomoda. Miró el sofá aún con el ceño fruncido. ¿Sus sofás no eran color crema? Y podía jurar que eran más suaves.
—Por fin despiertas.—Abrió los ojos de golpe y miró detrás de él. Su boca se abrió en una perfecta O al ver a Zayn parado con los brazos cruzados y su característico ceño fruncido. Sin un poco de delicadeza aventó su chaqueta y golpeó su rostro.—Una chica la trajo ahí estan tus llaves y celular.—Y entonces Liam recordó como la noche pasada había tomado de más.
—Mierda.—Tapó su rostro con su chaqueta.—Lamento las molestias, de verdad.—Se levantó del sofá y camino hasta la puerta aún sin ver a Zayn, por la obvia vergüenza que sentía.—Gracias por dejarme quedar en tu sofá.—Dijo antes de abrir la puerta e ir a su propio departamento.
Cerro la puerta de su departamento y sacó sus tenis en la entrada, aventó la chaqueta al sofá y camino hasta su baño, desabrochando su jeans en el camino y sacando su camisa. Ahora no podría ver a Zayn sin tener vergüenza.
Liam era consiente de pesado que podría llegar a ser cuando cuando estaba ebrio, así que no solia tomar mucho, pero estos días y sobre todo el próximo mes serían una pesadilla y solo quería evitar tener que recordar que un mes se cumplía un año de la muerte de su papá.
Abrió la llave de la ducha y soltó un jadeo al sentir la caliente agua en sus músculos, pero su relajación no duró mucho al sentir un caliente líquido subir por su garganta tapó su boca. Salió de la ducha, abrió la tapa del baño sin más dejó salir el líquido transparente, frunció el ceño al sentir el ardor en su garganta, bien, tal vez el alcohol no era una buena idea para olvidar su problemas.
Cerro los ojos al sentir otra arcada y se sostuvo con fuerza del inodoro. Vamos tampoco había tomado tanto. Pero convino todo el alcohol que encontró.
Se levantó del piso y bajó la palanca mirando con asco. Se miró al espejo haciendo otra mueca al ver su rostro.
—Bien, lo admito, soy muy joven para vivir solo.—Dijo con el ceño fruncido, sus dedos de apretaron con fuera sobre el lavabo.—Vamos Liam, lo haz hecho bien un año.—Se dijo mirándose al espejo, sintiendo sus ojos llenarse de lágrimas.—No llores, no llores, no llores.—Sus dedos se apretaban con más fuerza sobre la cerámica, sus dientes se apretaban mientras decía aquel mantra y sus ojos se empezaban a poner rojos, los cerró y soltó un suspiró.—Estas bien, solo estas estresado por los exámenes y por las fechas.—Soltó otro suspiró y abrió los ojos poniendo una sonrisa en su rostro.—Estas bien.—Trago el nudo de su garganta y en sancho su sonrisa.
[...]
Sus manos sostenían una bolsa de papel con comida, una hamburguesa doble, papas y en su otra mano una malteada de fresa, no era precisamente el mejor desayuno, pero tenía demasiada hambre para llenarse con algo ligero.
Un pequeño maullido lo hizo detener su paso y mirar a su a su izquierda, alzó una ceja al ver al negro gatito mirándolo. Liam sintió un escalofrío recorrer su cuerpo. Mordió su labio pasando la malteada a la misma mano donde sostenía la bolsa para acercarse y tocar la cabecita del felino.
—¿Te perdíste pequeño?—Preguntó en un susurró, el felino se acercó al toque soltando un sonido placentero. Liam soltó un pequeña risa y siguió acariciando sus orejas. Nunca se había plateado tener una mascota, pero suponía que podía tomar al gatito y llevarlo a su departamento hasta encontrarle un hogar.—Supongo que si no tienes dueño puedo llevarte a casa.—Tomo delicadamente el pequeño cuerpo del felino y lo puso en su brazo.
El gatito metió su cabeza en el hueco de su brazo y Liam sintió su corazón derretirse ante ese gestó. Comenzó a caminar hasta su departamento mirando al felino en ocasiones.
Agradecia que en su edificio se permitían las mascotas, incluso su amargada vecina tenía dos perros. Empujó la puerta y sonrió al hombre que cuidaba el edificio, espero paciente el elevador mientras con su dedo acariciaba la pequeña cabeza del felino.
Cuándo las puertas se abrieron salió al pasillo e hizo una mueca al no poder meter su mano al bolsillo para sacar la llave.
—Te voy a bajar. ¿Bien?—Le murmuró al felino antes de agacharse pero el gato se agarró con fuerza de su sudadera clavando sus garras.—Eso duele, anda solo baja un momento.—El animal lo miró y maullo en desacuerdo.—Solo será un momento.—La puerta del departamento de al lado se abrió dejando ver al moreno que había dejado en la mañana en su sala.
—¿Ahora hablas con animales?—Liam sintió sus orejas calentarse y alzó la mirada, sonrió apenado mientras regresaba a su altura normal.
—Lo encontró en la calle.—Murmuró viendo al animal. Zayn le dio una mirada al gato alzando una ceja y sonriendo con diversión.—¿Prodrias, por favor sortenerme esto?—Preguntó alzando la bolsa de papel y la malteada.
Zayn alzó una ceja y con una pequeña mueca sostuvo lo que le dio. Liam metió la mano a su jeans y sacó su llave abriendo por fin su puerta.
—Gracias.—Dio una pequeña sonrisa y tomó de nuevo sus cosas de las manos de Zayn. Iba a cerrar la puerta pero apretó los labios, regresó de nuevo a la puerta mirando a Zayn.—¿Quieres pasar? Podemos dividir la hamburguesa.—Zayn miró al gato de nuevo con una sonrisa y asintió alejándose de su puerta para entrar al departamento del otro.
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Ahora que tengo dos semanistas de vacaciones espero estar actualizando más seguido.Por ciertoo, feliz navidad por adelantado 🎅
Espero que se la pasen bien a pesar de lo que esta sucediendo y que estén con sus seres queridos, 😌
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Dioses
FantasyLiam es un semi-dios, hijo de la diosa Atenea, el nunca creyó las historias que su padre contaba. Zayn es un arrogante dios, hijo del dios Hades y la diosa Persefone. Es mandado a cuidar del hijo de Atenea.