Taehyun recién salía de su habitación hacia el comedor, apenas se había dado un ducha a muy temprana hora del día, no soportaba la incomodidad del sudor sobre su espalda que se había generado durante la noche.
Los varios habitantes de la casa ya estaban sentados comiendo su desayuno, a excepción de dos personas, Taehyun –que apenas apareció– y Jungmi, prima de Taehyun.
Vivian ahí alrededor de siete personas, contando a Kwansoo y su hijo Taehyun. Ambos abuelos y Jungmi junto a su hermano y su madre.
—¿Quieres probar el desayuno? Te puede servir, cariño —habló rápidamente la abuela a su nieto que llegó frotando sus brazos por el frío dentro del hogar.
Taehyun negó con la cabeza y salió del lugar, nadie dijo nada al respecto, pero por lo menos a su padre le incómodo un poco su comportamiento, debería entenderlo, solo era un chico de corta edad que fue alejado de su lugar seguro y de todo lo que conllevaba su vida que tanto decía amar.
—¿Seguro que está bien? Deberías comenzar a interesarte un poco en sus sentimientos más allá de lo que te dice, es muy pequeño todavía —El abuelo habló haciendo que todos prestarán su atención a él. Taehyun era su prioridad, todos sus nietos lo eran.
—Padre, él solo está confundido. Dentro de poco se acostumbrará y volverá a divertirse como antes, dale tiempo.
—Sea lo que sea, es muy distinto al de antes. Cuando éramos niños, siempre me pedía casi de rodillas jugar con él, y ayer que nos volvimos a ver, ni siquiera me dijo “Hola, Jeongho” —reclamó el menor entre los presentes cruzando sus brazos y con su nariz fruncida.
—Recuerda que aún es un adolescente al igual que tú, a esa edad es difícil de entenderse —El de cabello platinado asintió a las palabras de su abuela—. Taehyun necesita su espacio, sabes bien que no es un momento fácil para él.
El menor respondió con un “meh” desde sus labios, siguieron la comida y planeaban como disfrutar ese domingo para hacer a los recién llegados olvidar un poco la presión que los atormenta.
El sol salió y los pajaritos comenzaban a cantar, era temprano, demasiado. Los menores de la casa debían partir al colegio. Para Taehyun, sería su primer día en un nuevo instituto, con nuevos compañeros y profesores desconocidos. Todo era desconocido en este momento para él, la última vez que estuvo en ese vecindario fue hace algunos años, cuando aún jugaba con carritos y muñecos de acción.
Saliendo de la ducha, portó un uniforme que Jeongho le había prestado, aunque lo consideraba un poco tonto ya que probablemente lo regresarían a casa para completar sus trámites y después hacer un cupo.
Los chicos desayunaron y salieron juntos al instituto, Taehyun iba siendo guiado por Jungmi, mientras que Jeongho parecía estar desinteresado en la presencia de Taehyun a un lado suyo.
Al termino de diez minutos, llegaron innecesariamente temprano ya que los trámites no comenzaban hasta que las clases dieran inicio, en ese lapso, Taehyun deseaba poder tomar una siesta o quizás abrazar una almohada mientras jugaba en su móvil. El timbre sonó y casi cae del susto por estar completamente recargado sobre una barda peligrosa.
Con el frío que lo acompañaba, ingresó directo a donde Jungmi le había indicado, sacó todos los papeles de su mochila y se dispuso a comenzar su trámite.
Sorprendentemente, fue aceptado en minutos, una consejera ya lo estaba guiando hasta su aula, sonreía cada que podía al chico nuevo. Su deber era hacer que los estudiantes se sintieran cómodos y era justo lo que hacía. Se acercaron a la puerta de un salón en el segundo piso, la mujer pelirroja abrió la puerta con sus manos, anunció algo a la profesora y alumnos que ahí dentro estaban, después pidió a Taehyun que pasará, este asintió y se acercó a la mujer.
—Después de mucho tiempo, vamos a recibir a un nuevo compañero —Sonrió la alta mujer—. Quiero pedirles un poco de respeto y empatía por él, ya que al igual que ustedes, solo viene a estudiar y prepararse para la vida.
Nadie parecía prestar atención, le indicaron su lugar asignado y fue a ese sitio al que se dirigió. Una vez en su silla, sacó la única libreta que portaba en ese momento para tomar notas, junto a un bolígrafo y pasó en limpio lo poco que había en la pizarra antes de que nuevamente la profesora diera su explicación.
Un joven soltó un gritó tan fuerte como para romper una ventana, todos los presentes lo miraron, aparentemente había perdido su bolígrafo favorito.
Taehyun lo analizó para después ignorarlo, prefería darle toda su atención a la mujer parada hablando como si al menos dos personas les interesarán los pronombres relativos en inglés. Se recargó sobre su brazo y parecía estar muy atento, pero su anterior distracción hizo que se perdiera y prefirió pensar si habría algo bueno dentro de su nueva y aburrida vida.
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From Your Roof | BeomHyun
FanfictionTaehyun parecía llevar una vida normal, instituto, un amigo incondicional, sonrisas, hasta que sus padres decidieron separarse. Su vida cambió desde que se mudo a un lugar que solía recordar, pero sobre todo por aquel chico que lo miraba tímidamente...