16. Como volver a ser niño.

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Aquel chico rubio ya caminaba con gran velocidad entre los pasillos de la amplia institución chocando con algunas personas que se metieran accidentalmente en su camino. Dejó a HueningKai en el aula sin dar explicación, este pequeño se quedó confundido ante la manera tan rápida de huir en su Hyung, pensó que tuvo que correr al baño o algo así.

YeonJun ya estaba llamando. Ni siquiera pensó que a esa hora TaeHyun seguiría en el instituto, al menos fue durante la media hora de descanso. Kang se preguntó a si mismo, cómo es que YeonJun estaba en casa de su madre a esa hora, se suponía que también debería estar en clases, aunque lo más probable es que haya faltado únicamente para ayudarlo.

Llegó donde la última vez había estado con HueningKai, donde BeomGyu los encontró, detrás de aquel árbol ya viejo. Sacó rápidamente los auriculares de su bolsillo del pantalón y los conectó rápidamente, pero antes de contestar, la llamado se cortó.

TaeHyun golpeó fuertemente el suelo con su pie, deseando que YeonJun volviera a llamar, y así fue.

Respondió aprisa y en lo que conectaba, acomodó un poco su cabello y preparaba su mejor semblante para volver a ver su amada madre. No podía esperar por ese momento. La pantalla reflejó el rostro de la antigua señora de Kang y ambos quedaron paralizados al mirarse cara a cara nuevamente.

Los dejamos solos —. Pudo oír la voz de la madre de YeonJun, después unos pasos y como cerraban una puerta. Al detenerse a observar todo alrededor, notó que esa era la habitación de su madre, sonrió para no llorar ante los recuerdos que llevaba consigo esa habitación.

Ninguno tomaba la iniciativa de hablar, aunque TaeHyun no intentó, su voz se agrietaba al instante.

¿Cómo estás?

Esas simples palabras hicieron que el menor sonriera con lágrimas en los ojos.

—Muy bien —mintió un poco, pero no permitiría que su progenitora se preocupará más de lo que seguramente ya lo hacía —. ¿Estás bien, mami?

La adulta sonrió mientras asintió con la cabeza, también tenía ganas enormes de llorar, pero se contuvo por una clara razón.

Hoy estoy mejor que nunca —limpió rápidamente una lágrima que escurrió desde su ojo —. TaeHyun, te extraño mucho. Me gustaría escucharte cantar desde la ducha u oír tu risa mientras veíamos programas de variedades.

El rubio mantuvo su postura, asintió, no podía hacer más. Después de unos segundos, comenzó a llorar, a pesar de intentar actuar fuerte.

—Mamá, yo te extraño más que a nada —rompió en llanto, comenzaba a ser difícil hablar sin sonar derrotado —. Quiero volver a jugar videojuegos contigo, quiero hacer galletas contigo... Odio esto.

Sé que podremos vernos, está estupidez debe acabar pronto —JuHyun cerró sus ojos por un momento, suspiró y rápidamente cambió el tema, no iba permitir seguir llorando, debería estar feliz —. ¿Qué tal son las cosas allá? ¿Hiciste amigos en el instituto?

—El lugar es lindo, pero no mejor que allá. Hay más gente en las calles y eso me intimida un poco —rió inocentemente —. Conocí un chico, es mi vecino prácticamente y va en mi aula, es un chico agradable y cariñoso. También hay alguien más, pero no sabría cómo describirlo... Es guapo y cálido.

JuHyun sonrió poniendo sus ojos como en media luna.

¿Qué tal son tus primos?

TaeHyun puso una mueca disconforme.

—¿Todo bien, cariño?

TaeHyun asintió: —No me siento cómodo con JeongHo, pero JungMi es muy buena conmigo y me ayuda en todo lo que necesito.

Recuerdo que eres inseparable de él cada que se reunían. Casi rogabas para que jugará contigo, eras muy pequeño.

—Ugh, eso fue antes —farfulló —. Ahora es distinto, creo que no estoy de acuerdo con mi yo del pasado. Solo tengo que soportarlo y eso es todo.

—¿Te ha hecho algo malo?

Kang tragó saliva en seco y negó con la cabeza. No quería preocuparla, no quería causar problemas y definitivamente sus roces con JeongHo solo eran problemas de adolecentes que no sabían que hacer con su vida.

La conversación siguió fluyendo, hasta que en determinado momento, tuvieron que finalizar, aunque en realidad no querían, pero solo quedaban diez minutos de descanso para el menor y lo que menos quería su madre, era que dejará de comer o alguien pudiera encontrarlo.

TaeHyun sintió que se transformaba de nuevo en un niño que no quería soltar a su madre el primer día de clases en el preescolar. Definitivamente ese sentimiento nunca le gustó. No quería sentir que no podría dar un paso sin ella, pero era lo que pasaba en ese instante, al momento de presionar aquel botón rojo.

Suspiró, limpió lo húmedo de sus ojos y salió con la frente en alto a buscar a HueningKai que ya debía estar preocupado o molesto.

No pasó mucho tiempo, en realidad resultó fácil de encontrarlo, aunque no imaginó que fuera con un chico al cual nunca había visto. Era alto, de cabello negro, una nariz grande y hoyuelos.

—¡TaeHyun! —. HueningKai se avalanzó sobre él hasta darle un abrazo muy fuerte. Kang lo recibió y enserio lo necesitaba, pero aquella presencia comenzaba a incomodar.

Kamal se alejó de él con una sonrisa tan amplia y hermosa. Miró de reojo a su acompañante que no tenía expresión alguna en el rostro y lo tomó de la muñeca para animarlo a saludar.

—Tae, él es SooBin —presentó ansioso —. SooBin, él es TaeHyun.

Ambos movieron de un lado al otro la palma de sus manos para saludar. TaeHyun forzó una sonrisa en sus labios y mientras lo ejercía, analizó a detalle a SooBin. Parecía ser normal, usaba el uniforme y también sonreía. Calculaba que debería tener cerca de dieciocho años y eso lo hacía sentir temeroso.

—Se llevarán bien, ambos son muy parecidos —. Opinó HueningKai con entusiasmo.

SooBin sonrió, puesto que TaeHyun parecía estar un poco confundido.

Desde la distancia, un azabache observo a detalle aquella escena, se acercó peligrosamente hasta quedar a un lado de TaeHyun, al cual le ocasionó un buen susto.

—BeomGyu —. Habló TaeHyun.

El azabache asintió con intenciones de abrazar al menor, pero este solo ofreció su mano para chocar los puños. BeomGyu aceptó, cualquier contacto con TaeHyun sería especial.

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No llego mi maestro de matemáticas, me aburrí y salió esto xd

From Your Roof | BeomHyunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora