NOORA
Vuelvo a leer el mensaje por quinta vez desde esta mañana. Grayson me escribió hace varios días para retomar lo de mi problema pero todavía no me he dignado a responder. Le dije la verdad sobre que tan solo fui como clase de prueba ya que pensaba que todo saldría mal y tendría excusa para decirle a Margaret que se había equivocada y que todo aquello había sido un error. Pero mientras pasaba el tiempo en su casa cada vez me sentía más relajada y todo mejoró cuando llegaron Ezra y Rhett. La cena con ellos fue bastante agradable y aprovechaban cada segundo para avergonzar a Grayson delante de mí. Llegué a pensar que creían que Grayson y yo teníamos algo pero las dudas desaparecieron de mi mente cuando una amiga de Grayson llegó a casa y me di cuenta de que yo sobraba allí.
—¿Qué tanto lees en ese móvil tuyo?—pregunta Ava—¿Un mensaje de algún admirador secreto?—intenta robar el móvil de mis manos pero se lo impido.
Es habitual que Ava y yo quedemos para estudiar en la cocina de la residencia. Las bibliotecas suelen estar hasta arriba cuando se acerca la época de exámenes y casi estamos ya en ese punto del semestre. Así que Ava y yo pasamos las tardes en la cocina hasta que tengo que ir a terapia o a sesión de grupo y ella vuelve a su habitación. Varias veces hemos intentado estudiar juntas en mi habitación o en la suya pero al final siempre acabábamos durmiendo en lugar de estudiar. Dennos una cama y olvídense de nosotras por toda una tarde. La tentación de una cama en el mismo lugar donde estas estudiando nos hace débiles. En la cocina también tenemos tentaciones, la comida. Pero al menos podemos estudiar y comer a la vez. Ojalá dormir y estudiar también fuese compatibles.
—No, tan solo estaba leyendo el mensaje de Grayson.
—¿Todavía no le contestaste?
—No sé si seguir con esto. Me parece una idea horrible y creo que va a salir mal.
—No le diste oportunidad alguna.
—Fui esa vez a su casa y no avanzamos ni un poco. Perdí todo el día para nada.
—Cenaste con los solteros más codiciados de todo el campus, ¿a eso lo llamas tu perder el tiempo?
—Fuiste invitada a esa cena pero te negaste a ir. Era la oportunidad perfecta para acercarte a ...
—Ezra me mensajeo—me interrumpe—¿Le diste mi número?
—Claro que no. Lo apuntó de mi móvil ese rato que estuviste hablando con él. ¿Qué te decía en ese mensaje?
—No lo sé. Todavía no lo he abierto.
—¿Y a qué esperas?
—No sé si es buena idea. Hace tanto tiempo que no hablo con un chico que ya se me ha olvidado como se hace.
—Tan solo necesitas algo de práctica y tienes a Ezra dispuesto a ello. No prometo que no intente hacer algo de sexting pero es un riesgo que tienes que estar dispuesta a correr.
—Dios, si Ezra O'Donell intenta hacer sexting conmigo iré a su casa y patearé sus bolas—dice y me hace reír—¿Tú no tenías terapia de grupo hoy?
Miro la hora en el portátil.
—Mierda, sí. ¿Cómo se me ha podido pasar? Voy tardísimo la señora Andrew va a matarme.
Bajo la pantalla del ordenador y le pido a Ava que lo guarde en su habitación antes de salir corriendo de allí dirección al instituto. La señora Andrew odia la impuntualidad y cuando me vea llegar tarde va a asesinarme. Con el diario en una mano y el móvil en otra corro hasta que llegó al instituto. Nunca fui una persona muy atlética así que cuando llego una capa de sudor recorre mi frente y mi respiración es irregular. Espero unos minutos hasta que mi respiración se vuelva normal antes de entrar.
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Déjame leerte en braille [Libro #1 Saga Destinos]
Teen FictionEn la prestigiosa Universidad de Londres, Noora, una brillante estudiante de psicología, oculta un doloroso secreto: una fobia que la paraliza y que solo su mejor amiga, Ava, conoce. A pesar de años de terapia, Noora siente que no avanza y su vida s...