Déjame leerte en braille [Libro #1 Saga Destinos]

27 es oficial

NOORA

Nunca sentí tanta vergüenza en mi vida como en este momento confesando a Margaret frente a Grayson que hemos mantenido algo más que una bonita amistad estas últimas semanas. La señora Andrew ya estaba al tanto de ello pero hacerlo frente a Grayson me hace sentir avergonzada. Margaret es como una segunda madre para mi y hablar sobre este tema no hace que me sienta lo suficientemente cómoda como para estar aquí.

—No necesito detalles, Grayson—le recrimina Margaret cuando Grayson empieza a dar detalles íntimos de nuestra llamada en navidades.

Mi codo golpea su costado y se gira hacia a mi.

—Solo estoy intentando ayudar.

—Deja de dar detalles que no son necesarios—murmuro avergonzada—Así no estas ayudando.

—Solo quería asegurarme de que entendía en que punto estamos.

—¿Y en que punto creen que están?—pregunta Margaret.

Grayson me mira por unos segundos antes de volver su vista a la señora Andrew.

—Eso debería preguntárselo a ella.

Margaret me mira esperando una respuesta de mi parte. Estas dos últimas semanas ha sido un caos a nivel personal y académico. Las notas de los exámenes fueron publicadas y tuve que enviar cientos de papeles solicitando las prácticas para el hospital junto con el certificado de notas. Para Grayson no ha sido tampoco nada fácil. No ha podido asistir a los entrenamientos hasta esta semana cuando se levantaba su sanción. En un principio no se sintió cómodo allí todo había cambiado aunque Rhett se empeñaba en que todo seguía igual. Lo único positivo es que habían expulsado a Romeo definitivamente del equipo y eso hacía sentir a Grayson algo mejor. En el ámbito personal ha sido todo una montaña rusa de emociones sexuales. Puedo decir que si saber tocar a una mujer fuese una asignatura en la universidad Grayson Lightwood la aprobaría con matrícula de honor. Sus dedos y su lengua siempre están en el punto exacto haciéndome llevar a la locura noche tras noche. Mis manos han recorrido cada rincón de su cuerpo junto con mi lengua y he descubierto todas y cada una de las debilidades de Grayson en el ámbito sexual.

—Estamos bien.

—¿Estáis bien?—pregunta dudosa—¿Qué quiere decir eso?

—Me siento bien con Grayson y con todo esto que está ocurriendo entre nosotros—miro a Grayson—Sea lo que sea.

Grayson eleva una ceja. Después de lo ocurrido no retomamos el tema del noviazgo. Grayson me lo pidió y yo hui no esperaba que el lo hiciera de nuevo. Se que Margaret esta preguntado ahora sobre eso pero no se que debería decir. ¿Somos solo unos jóvenes que se divierten? ¿Somos novios? ¿Quiere Grayson ser mi novio después de lo ocurrió cuando me lo pidió?

—Sé que entre los jóvenes está esa moda de no definir lo que tienen y me parece bien pero yo en este momento de la terapia necesito saberlo. Necesito saber si debo enfocar la terapia de una forma individual o no. Así que le pregunté de otra forma. ¿Sois Grayson y tú pareja?

Grayson me mira impaciente esperando mi respuesta pero yo sigo sin saber que decir. ¿Qué ocurre si digo que no? ¿Cambiaría algo entre nosotros? ¿Y si digo que sí? ¿Y si ahora es él quien no quiere tener nada serio? Miro a Grayson esperando a que él nos saque de este apuro pero no lo hace.

—¿Sí?—dudo mirando a Grayson.

—Sí—asiente—Debería empezar a enfocar la terapia como una terapia sexual para una pareja.

—Hasta ahora habéis utilizado la técnica ahora mando yo. Era Noora quien guiaba cada uno de vuestros encuentros y decidía hasta donde quería llegar. ¿No es así?