Lo Real (TERMINADA)

Capítulo 33: Narra Nina

La cita fue...divertida, jamás había hablado tanto con un chico, fue una conversación infinita, autentica, real.

Mi madre estaba furiosa al llegar a casa, por lo que tuve que contarle sobre Chris, claro que le dije que lo mantenga en secreto.

- ¡Lo sabía! -dice mi madre- la intuición de una mamá nunca está mal.

Me relajo porque ya no parecía enojada.

-Pero...-tenía que pensarlo- no creas que escapaste de esta, la próxima vez que no sepa dónde estabas te... te desheredo-dice sarcásticamente, pero enojada.

-Uy que susto-digo susurrando.

Mi madre se da vuelta y me mira levantando una ceja.

Eso fue como echarle más leña al carbón.

- ¿Qué?, escuchaste algo porque yo nada, debe ser una mosca que está volando por aquí. Bzz, Bzz, vez se escuchan.

-Sabes que, mejor ve a tu cuarto.

No lo pienso ni un minuto y salgo corriendo de ahí.

Me despierto con un ruido en mi ventana, lentamente me levanto y agarro una regla- que fue lo único que encontré- y me acerco a la ventana.

Chris estaba lanzando piedras pequeñas para llamar mi atención.

- ¡Estas loco! - digo susurrando al abrir la ventana.

Me señala la puerta principal y bajo por las escaleras para reunirme con él.

- ¡Rapunzel! -dice con un todo de voz fuerte.

Rápidamente le tapo la boca y miro a mi alrededor para ver si hay señales de David o mi madre.

- ¿Qué haces aquí?

-No lo se

Tenia los ojos rojos tal cual como lo conocí.

-Estas borracho.

-No-dice sonriendo con la boca cerrada.

- ¿Viniste en auto?

-Vamos Rapunzel no me vas a dejar pasar.

-Respóndeme

-Puede que haya venido en auto, pero lo deje en una cafetería y vine caminando para acá.

- ¿Manejaste así de ebrio?

¿Como lo llevo a su casa? No puedo manejar, no tengo licencia y claro, soy menor de edad.

Lo dejo entrar, al caminar se tambaleaba por lo que lo tuve que sostener. Mi intención era dejarlo en la habitación para invitados, pero esta estaba al lado de la de mi madre, con este intruso y el ruido que genera se despertarían y me cortarían la cabeza. No tuve otra opción que llevarlo a mi habitación.

Cuidadosamente lo llevo arriba intentando hacer el menor ruido posible, lo acerco a mi cama y el cae como una pluma.

-Rapunzel-dice en un tono fuerte.

Nuevamente le tapo la boca y le hago señas para que se callase.

-Rapunzel-dice susurrando- me puedes hacer rasca-rasca

- ¿Y que se supone que es eso?

-Mira, dame tu brazo.

Empieza a mover de un lado a otro sus dedos haciéndome cariño en el brazo.

Yo sin poder aguantar la risa, exploto en carcajadas silenciosas.

-Vaya, un Chris tierno y regalón.