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Dentro del inmenso Megaverso del Anime (En el universo de Naruto).


Entre las fronteras del país del viento y del fuego, se sentía una abrumadora presencia y junto a la repentina tormenta eléctrica que no predicaba nada bueno, así que cualquiera con sentido de auto preservación se alejaría lo más posible de esa zona, entonces... ¿Qué hacían dos adolescentes corriendo directo a donde proviene esa presencia?

Naruto: ¡AAH! –Grita, esquivando una rama que se había roto por el fuerte viento que azotaba los árboles de la zona- Susuki, ¿estas, segura que madre es la que provoca esto? –Preguntaba, entre asustado y emocionado por el alcance del poder de su muy pronto madre oficial, a tan larga distancia en la que aún estaban-

Susuki: Bastante segura, además esto no es nada~ -Canturreó, lo último con orgullo y altivez en su voz-

Naruto: Impresionante...

Susuki: Descuida, a este paso llegaremos muy pronto.

Y con eso último, los dos aceleraron hasta llegar a divisar la arena del desierto contrastando con el césped, ya que los árboles estaban destrozados alrededor de una angustiada Areana, aunque para cualquiera ajeno a la situación pensaría que más que tener una cara de preocupación, tiene una de ira que enfatizaba por el intimidante Chakra que emanaba de su cuerpo y de su penetrante mirada de orbes verdes que brillaban en la oscuridad como si fuera una bestia o demonio y su apariencia no ayudaba, ya que sus alas, cuernos y cadenas se manifestaron de forma completa por la emoción del momento.

Como era de esperarse la Emperatriz no tardo en notar la presencia de estos y quedárseles viendo por unos segundos en ellos, hasta que de pronto los truenos, rayos y viento airoso se fueron disipando a medida que la postura tensa y expresión dura se suavizaba hasta formar un apaciguador silencio que ninguno de los presentes tenía el valor de romper, hasta que la mayor lo hiso.

Areana: ...Susuki... Naruto... -Su voz sonaba grave y entre cortada, pero sus facciones se contrajeron formando una expresión de alivio con lágrimas amenazando con salir y sin reparo se abalanzo a los mencionados dejando salir en vez de lágrimas cristalinas, gota tras gota carmesí abrazándolos fuerte, haciendo que el joven Kitsune se exalte, pero ver que su hermana lo veía normal, decide no preguntar y centrarse en las emociones del momento- Me tenían preocupada... Sugari vino al final de la reunión para decirme que te habían secuestrado... y diciendo que los chicos fueron a buscarte y en ese momento me aterre... sabiendo en las condiciones que estaban Flora y tu Susuki... al oírlo me preocupe saliendo a su búsqueda.-Se separa un poco para limpiarse un poco y verles con una sonrisa- Me alegra encontrarles, pero aún tengo que buscar a los demás.

Naruto: << Así que esto es tener una madre que se preocupa hasta al punto de llorar por ti...>> -El pequeño Kitsune estaba pasmado por las palabras dichas, todas cargadas de sentimiento que para él una vez era desconocido, y ahora decidido de no perderlo con la decisión que tomo, lo iba a decir antes de que la mayor se fuera a seguir buscando a sus amigos y su otra hermana de no ser porque una conocida voz le interrumpe-

Shikamaru: No tiene que hacerlo, majestad, pues aquí estamos. –Apareció detrás de ellos con todos los chicos viniendo del bosque-

Flora: Mamá... -Dijo, suavemente acercándose temerosa, pero preocupada al ver el afligido rostro de su madre manchado con lágrimas de sangre, yendo donde estaba hincada la mencionada- Perdón por irme sin avisar... yo... -Pero, fue callada por un empuje que la llevo en un abrazo maternal-

Los Centinelas de las Cosmovisiones.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora