Hooked (Camren fanfic)

Capítulo 41

Lauren POV*

El Martes y Miércoles transcurrieron como el primer día. Camila y yo solo nos podíamos ver cuando íbamos al instituto, los almuerzos los aprovechábamos y nos escondíamos en el baño para tener nuestra pequeña dosis de mimos diaria.

No obstante, cuando estábamos en público teníamos que controlarnos, y más ahora, que compartimos clase con Alejandro. A veces, por mera curiosidad, le observaba disimulada y detenidamente en la escuela, para ver que él estaba haciendo justo lo mismo, y me perturbaba. Me perturbaba y me incomodaba el pensar en aquella conversación que tuvo con Britt y la cual escuché. Me molestaba verle mirándome, sabiendo cuales son sus intenciones – o cuales eran – conmigo.

-¡Tierra llamando a Lauren! - Gritó Normani, que gracias a su mano y la manera en la que la agitaba en frente de mi cara, consiguió su propósito.

-Mira lo que está diciendo Dinah – Dijo Camz sin apartar la vista de la chica en cuestión y dándome leves caricias en la espalda. Yo obedecí.

-Mis padres se van mañana y no vuelven hasta el Domingo, así que pensé que podríais venir mañana a pasar la noche en mi casa, ¿qué os parece?

-Pero Lauren y yo estamos castigadas, Dinah...- Explicó Camz...y yo no podía dejar de fijarme en ese perfil tan perfecto que tenía. Me encantaba observarla y admirarla cuando ella no se daba cuenta de que lo estaba haciendo.

-Bueno, podéis decirle a vuestros padres que tenemos un trabajo, quiero decir...ellos parecen majos...¿no? - Camila y yo nos miramos la una a la otra, considerando lo que acababa de decir.

-¡Pensároslo! - Exclamó Ally mientras las tres salían hacia la puerta.

-¿Vienes? - Dijo Camila mientras metía sus libros en la bolsa y se dirigía a la puerta.

-Espérame fuera, quiero hablar con la profesora – ella asintió y se marchó por fin.

Mientras yo hacía lo mismo que ella con mis respectivos libros, noté una presión en mi espalda y una especie de húmedo calor detrás de mi oreja. Era Alejandro.

-¿Que demonios...? - Exclamé, apartándome a un lado.

-¡Hey, hey, nena! - Vaciló, poniendo sus manos al frente como si se estuviera excusando de algo - ¿Por qué tan rebelde?

-¿Por qué tan pesado? - Protesté. Casi me salió una arcada en el momento en el que puso su mano sobre mi hombro.

-Yo solo quería saber como estabas, me enteré de que tu y mi amiga Britt lo dejasteis.

-Ya – murmuré riendo para mi misma.

-Y ayer y hoy te vi muy distante y la semana pasada no viniste a clase...supongo que lo pasaste mal – hizo una mueca de tristeza bastante creíble, si supiera que sé todo lo que ha hecho....- Lo que quiero decir es que, si necesitas algún apoyo y así, cuenta conmigo ¿Está bien? -El se lanzó a mi, abrazándome, aunque duró poco, ya que enseguida lo separé de mi.

-Lo último que necesito es la ayuda de un fuck boy como tu – le lancé mi mayor sonrisa irónica – Así que pírate y déjame pasar – él por suerte se apartó de mi camino y con las cejas levantadas me dejó pasar.

Pude notar como me miraba el trasero con esa fría mirada que tenía y en seguida me puse la mochila en la espalda para disimularlo, escuchando una pequeña risa que hizo él.

Ayer, tuve la oportunidad de volver a casa con Camila y pasar un poco más de rato con ella, pero hoy, desgraciadamente Sinu decidió venir a recogerla, al igual que mi madre.

-Muy bien, esto es raro mamá – Dije mientras subía en el asiento del copiloto.

-¿Que hay de malo? - Ella cambió la marcha del coche y se concentró en la carretera, con sus manos firmemente en el volante.